Que el móvil es un accesorio imprescindible en nuestro día a día no es ningún secreto para nadie. Esta realidad cada año va a más, hasta el punto de que ya está reemplazando un objeto con el que teníamos que salir siempre de casa: la cartera. Según el Banco de España, uno de cada cuatro españoles tiene ya instalada en su móvil alguna app para realizar pagos online y no dejan de aumentar los interesados en conocer alternativas disponibles como Bizum, PayPal, Google Pay: Guía completa para pagar con el móvil con pros y contras y valorar así si conviene subirse a una ola que ya surfean muchos jóvenes (el 55% de los menores de 25 años).
La aceptación de los pagos móviles se le resiste aún más al segmento de población más veterano, ya que sólo el 5,4% de los mayores de 65 años recurre a este tipo de aplicaciones. Por el momento, el gesto de pagar con el móvil no va a reemplazar al efectivo, ni mucho menos a la tarjeta de crédito o débito, pero sí está haciéndose un lugar entre los ciudadanos que utilizan a diario alguna app para realizar sus pagos, un grupo que ha pasado en sólo un año del 7% al 10%, según se recoge en el ‘Estudio sobre hábitos en el uso del efectivo’ del año pasado publicado por el Banco de España.
Este informe también apunta que el uso de los dispositivos móviles como medio de pago es más común entre las personas con estudios superiores (15%) que entre aquellas que poseen estudios básicos (5%). Estas aplicaciones tienen aún un hándicap notable, y es que mientras el efectivo se acepta en la totalidad de negocios, pagar con el móvil no siempre es una opción en establecimientos de pequeño y mediano tamaño, algo que se acentúa aún más en municipios que no disponen de oficina bancaria estable. Además, algunas de estas apps para realizar pagos móviles requieren que el dispositivo sea compatible con la tecnología NFC, algo que en modelos más antiguos no siempre está presente.
Para poder valorar cuál es la app para pagar con el móvil más útil para cada persona, conviene conocer las características de cada una y así poder comprobar cuál responde mejor a las necesidades de cada uno. Algunos problemas son comunes a todas, ya que ninguna de estas plataformas o aplicaciones es 100% inmune a posibles caídas del servicio a nivel general. Además, la ausencia de cobertura en ciertas zonas del país puede hacer que sea obligatorio tener que recurrir aún al efectivo o a la tarjeta.
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Bizum
Una de las plataformas para realizar pagos con el móvil más comunes en España es Bizum, aunque no la encontrarás directamente ni en Google Play Store ni en la App Store. Bizum es un servicio que está integrado en las apps de la gran mayoría de bancos del país y que está destinado a realizar pagos entre particulares o en negocios que acepten esta forma de pago.
Una de las principales ventajas de Bizum es que ha servido para reemplazar los arduos y lentos envíos bancarios, ya que las transferencias se realizan de forma instantánea y más cómoda, ya que se puede elegir cualquier destinatario de tu agenda telefónica, sin necesidad de conocer su número IBAN. Además, al estar integradas dentro de las apps de los bancos, ofrecen una mayor sensación de seguridad a los usuarios que si fuera un servicio externo. La amplia cobertura de Bizum en el país es otra fortaleza, ya que pueden utilizarlo las personas que tengan cuenta en 26 bancos españoles, lo que supone un 96% de la cuota de mercado actual.
No obstante, la experiencia de uso de Bizum tiene algunos detalles que pueden generar recelos. Uno de ellos es el hecho de que los pagos no sean reversibles. Confundirse a la hora de realizar un envío por Bizum puede resultar un problema, sobre todo si se realiza a una persona desconocida o con la que tenemos poca confianza, ya que tendríamos que contactar con ella y podría ser reacia a devolver lo que le ha llegado gratis. Como alternativa, siempre se puede contactar con la entidad bancaria para intentar anular y revertir el movimiento, pero no deja de ser una tarea bastante engorrosa.
Otros aspectos mejorables de Bizum es que no se puede utilizar con otros dispositivos que no sean el móvil. Además, las estafas con Bizum son una realidad de la que hay que ser consciente, ya que muchos usuarios confunden una solicitud de envío de dinero con la aceptación de un ingreso.
PayPal
PayPal es una de las plataformas para realizar pagos online más veteranas, ya que fue fundada en 1998 por un grupo de desarrolladores entre los que se encontraba Elon Musk. PayPal es un medio de pago muy aceptado en todo el mundo para realizar compras online, aunque también se puede transferir dinero entre particulares a través del correo electrónico.
PayPal es una alternativa que ofrece una mayor seguridad al comprar en Internet, ya que funciona como una capa de protección extra en caso de dudas sobre la fiabilidad de ciertos sitios web. Sólo hay que aportar los datos de la tarjeta en el momento del registro, y al pagar en una tienda online, el usuario es redirigido a la web o app de PayPal para acceder allí con su contraseña, confirmar el pago y después regresar a la plataforma donde se realizó la compra. De este modo se evita que el vendedor acceda a los datos de la tarjeta. Como en el caso de Bizum, los pagos o transferencias también son instantáneos y gratuitos.
La gratuidad de PayPal para sus usuarios (siempre que no haya cambios de divisas de por medio, en cuyo caso sí hay un recargo) encierra una de sus principales desventajas: las comisiones que cobra a los comercios, que muchos consideran excesivas. Es bastante frecuente encontrarse con algunas plataformas que no aceptan PayPal como medio de pago, siendo Amazon uno de los ejemplos más notorios. Otros aspectos que destacan los más reacios es que la empresa tiene sede en Luxemburgo, lo que complica las vías de reclamación, o que al no estar integrada en el sistema bancario, la plataforma puede ser más susceptible a intentos de fraude por vía del ‘phishing’.
Google Pay
Una de las apps más prácticas para ganar de forma más práctica y cómoda es Google Pay. En esta app sólo hay que vincular la tarjeta bancaria para poder pagar en los negocios que acepten pagos a través de la tecnología NFC. Un aspecto positivo de Google Pay como sustituto de las tarjetas de crédito o débito es que el comercio no recibe ninguna información de la tarjeta, por lo que refuerza la privacidad del usuario.
En cuanto a seguridad, Google Pay es una de las opciones más recomendables, ya que cumple con el sistema de autenticación reforzada de PSD2, la directiva de pagos digitales en Europa. Otro detalle que podría pasar inadvertido pero es también beneficioso es que dispone de un sistema de recompensas para los usuarios que paguen con esta app. Desde el punto de vista de las empresas, ofrecer la opción de Google Pay puede hacer que una tienda en línea pueda llegar a más usuarios.
¿Inconvenientes? También los hay, y es que no tiene tanto alcance como Bizum, por lo que algunos bancos no lo admiten como medio de pago. Enviar dinero entre particulares tampoco es una opción en esta app, lo que puede explicar su menor popularidad en España en la actualidad, y además obliga a tener una cuenta de Google, aunque esto es tan común hoy día que es difícil pensar que pueda resultar un problema para casi nadie.
Apple Pay
El equivalente a Google Pay para los usuarios de iPhone o Apple Watch es Apple Pay, la app de pagos móviles para el sistema operativo iOS. La ventaja es que esta plataforma viene instalada de serie tanto en el iPhone como en los relojes inteligentes de Apple, los portátiles Mac o el iPad. Este método de pago también ofrece una mayor seguridad, igual que en el caso de Google Pay, al utilizar códigos de transacciones únicas que evitan que se comparta el número de la tarjeta. Además, también se puede ocultar la dirección de correo electrónico mediante la generación de direcciones únicas y aleatorias.
En contra de Apple Pay juega la adopción de terminales Apple en España, que es más modesta que en países como EE. UU, donde tienen mayor cuota de mercado. Su exclusividad implica que no se puede descargar en la Google Play Store, mientras que Google Pay sí está en la App Store. Además, el número de comercios que aceptan Apple Pay, siendo amplio, puede ser inferior al de otras alternativas para realizar pagos online, lo que supone una limitación para sus usuarios.
Samsung Pay
Las apps para realizar pagos no sólo dependen del banco o del sistema operativo de cada usuario, sino que también pueden ser distintos en función del fabricante del móvil. Samsung, una de las compañías que más móviles vende en todo el mundo, tiene su propia app de pagos móviles, Samsung Pay, que permite registrar los datos de una tarjeta para pagar en tiendas físicas o a través de Internet con la comodidad, privacidad y seguridad que aportan otras alternativas ya citadas. Samsung Pay también ofrece recompensas a sus usuarios, por lo que estos regalos pueden suponer un acicate para sus usuarios.
Evidentemente, Samsung Pay es compatible con las principales familias de móviles de Samsung (Galaxy M, Galaxy A, Galaxy S, Galaxy Note y Galaxy Z), así como con sus principales relojes inteligentes. En su contra juega la experiencia de uso, ya que no son pocos los usuarios que han compartido en distintos foros sus problemas para vincular una tarjeta. Su alcance también es muy amplio, pero no está en tantos comercios y bancos como muchos desearían.
Otras opciones para pagar con reloj inteligente: Garmin Pay, Swatch Pay, Fitbit Pay
Muchas de las alternativas ya citadas permiten también realizar pagos con relojes inteligentes en función de su sistema operativo o del fabricante, pero también hay otras opciones disponibles en el mercado. Garmin Pay, Swatch Pay o Fitbit Pay son aplicaciones con las que se puede evitar tener que sacar el móvil del bolsillo, acercando el ‘wearable’ al terminal de pago igual que se haría con una tarjeta ‘contactless’. Eso sí, estas opciones son más minoritarias y no están disponibles para los usuarios de muchas entidades bancarias, por lo que su implantación y uso es bastante menor, incluso anecdótico en algunos casos.
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