Con el verano puede que nos apetezca poner un poco más de picante a nuestras sesiones de películas en el salón de casa. Aunque las plataformas de streaming no suelen hacer demasiada promoción de este tipo de largometrajes, en sus catálogos siempre podemos encontrar obras que llaman la atención de los más atrevidos. Descubre estas 7 películas con contenido erótico que puedes ver en Netflix y eleva la temperatura de tus sesiones de sofá y peli. Comedia, drama, thrillers psicológicos y de terror… Con el erotismo de fondo hay alternativas para todos los gustos.
La vecina de al lado
Esta comedia adolescente tiene ya 18 años y sigue siendo recordada con agrado por numerosos millennials. La historia del joven Matthew, que se enamora de la tentadora vecina de al lado que interpretó Elisha Cuthbert, se convirtió en una de las comedias con toques eróticos más importantes de la primera década del siglo XXI.
Su contenido erótico no va mucho más allá de la tensión sexual que despierta el personaje de Cuthbert, pero con los adolescentes de aquella época funcionó y aún tiene bastantes visionados en Netflix.
Elisa y Marcela
El romance de Elisa y Marcela, dos profesoras gallegas, a finales del siglo XIX y principios del XX lleva la firma inconfundible de Isabel Coixet, por lo que la imagen y la fotografía están muy cuidadas en esta película, que recibió varias nominaciones en entregas de premio españolas como los Forqué o los Gaudí.
Natalia de Molina y Greta Fernández son las dos protagonistas de un filme que supera las dos horas de duración en las que se retrata también las dificultades de la época para una relación homosexual. Su erotismo es también una de las cartas de presentación de una película arriesgada que ha gustado bastante a la audiencia.
Cuatro historias de deseo
Desde la India llega esta mezcla entre drama y comedia con el sello de cuatro de los directores más destacados del país asiático. El amor, el sexo y las relaciones no siempre son sencillos en la sociedad india, y a través de cuatro historias se muestra cómo las viven sus protagonistas.
Esta película, enfocada en la perspectiva femenina del amor y el erotismo, quizá no tenga el voltaje erótico que muchos desearían, pero es una ventana muy interesante a otras realidades muy distintas a las que se viven en Occidente, aunque con el trasfondo común que mueve los sentimientos: el amor.
Newness
Con una premisa tan actual como común, una pareja que se conoce a través de una aplicación para ligar, comienza Newness, una película independiente estadounidense que no ha calado tanto entre los críticos de cine como entre los suscriptores de Netflix. Los primeros días de conocerse, llevados por la pasión y la lujuria, parecen que guían la relación viento en popa, pero todo cambia cuando empieza a asentarse la monotonía.
Con Nicholas Hoult y la española Laia Costa como pareja protagonista, los inesperados derroteros que va tomando la relación conquistan la atención del espectador. La fotografía de la película también es bastante destacable, aunque no es uno de los títulos que hayan copado el protagonismo en festivales y entregas de premios.
El síndrome de Berlín
Desde Australia llega El síndrome de Berlín, otra historia con un apasionado romance que termina dando un giro de 180 grados. En este caso, la historia contada por la directora Cate Shortland abandona rápido el erotismo para terminar convirtiéndose en un thriller de casi dos horas que no da apenas respiro.
Si como espectador buscas una película ligera con toques de contenido erótico sin mayores pretensiones, El síndrome de Berlín quizá no sea la mejor elección. Eso sí, esta película merece un vistazo por sí misma, como reflejan sus ocho nominaciones a los Premios del Cine Australiano y su presencia en el emblemático Festival de Sundance en 2017.
Hot girls wanted
El mundillo del porno amateur ha captado a muchas chicas jóvenes que buscan convertirse en pequeñas celebridades de Internet al mismo tiempo que se ganan unos ingresos extra. Este documental muestra cómo es ese recorrido mientras sigue las andanzas de una de esas chicas que intentan convertirse en la próxima “vecina de al lado”, y no pocos críticos sostienen que esta obra debería verse en los institutos para despertar las consciencias de los más jóvenes sobre los peligros que puede llegar a encerrar este sector.
El documental llamó bastante la atención en su estreno en 2015 y ofrece una mirada novedosa a las realidades que encierra el mundo del porno. El contenido erótico de este documental no busca satisfacer al espectador, sino removerlo en su asiento hasta el punto de terminar cuestionándose las bondades de Internet.
Cam
La última recomendación de este listado es Cam, una película de apenas hora y media del director Daniel Goldhaber. Con la excusa del fenómeno de las cam girls que trabajan en páginas web para adultos exponiéndose ante una webcam, se termina articulando un thriller psicológico retorcido que ha despertado bastantes comparaciones con la serie Black Mirror, otro de los grandes tesoros de Netflix.
Madeline Brewer encarna a la modelo Alice, que un día descubre que al entrar en la plataforma en la que ejerce como cam girl, ha sido sustituida por una réplica de ella misma. Sin demasiado presupuesto, la idea de la película y la forma de resolverla son bastante llamativas, llevando a los thrillers de terror a un nivel superior, incluyendo una crítica al sistema y a la sociedad actual.
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