El Summer Game Fest trajo novedades frescas sobre la adaptación del videojuego The last of us que HBO está preparando para 2023 en forma de serie de televisión. Neil Druckmann, director creativo del videojuego que también ejercerá como director en la serie, que aún no tiene tráiler oficial, mostró una imagen nueva de los protagonistas, Pedro Pascal y Bella Ramsey, y confirmó que los actores que encarnan a Joel y Ellie en The Last of Us estarán presentes. Además, Craig Mazin, coguionista, reveló en Twitter que el rodaje ya ha terminado. ¿Triunfará la serie de The Last of Us? Las mejores y peores adaptaciones de un videojuego a una serie o peli hacen que muchos esperen el estreno con una mezcla entre expectación y temor a que sea un pinchazo.
Aún faltan por conocer tanto el primer tráiler oficial (sí hay algunos concept trailers muy logrados creados por fans) como la fecha de estreno. Mientras tanto, el videojuego tendrá un remake para PlayStation 5 que se lanzará el próximo 2 de septiembre y posteriormente también en PC. El revuelo generado en redes sociales ha sido inevitable, y en tuexperto echamos la vista atrás para ver cómo han funcionado, para bien y para mal, otras adaptaciones de videojuegos.
Arcane (2021)
Uno de los máximos culpables de que las grandes plataformas audiovisuales se lancen a adaptar videojuegos la ha tenido Arcane, serie disponible en Netflix desde el año pasado. Esta serie de animación basada en el popular League of Legends fue una de las grandes triunfadoras en los premios Annie (galardones al cine de animación que se entregan en EE. UU.). Las expectativas no eran demasiado altas, pero terminó enganchando incluso a quienes no están familiarizados con las dinámicas del LoL. Otro gran éxito de Netflix es The Witcher, pero la serie protagonizada por Henry Cavill surge de una saga literaria, por mucho que el videojuego también sea altamente popular.
Uncharted (2022)
Otra saga con la que los fans no querían hacerse demasiadas ilusiones era Uncharted. La elección de Tom Holland para encarnar a Nathan Drake, el protagonista del videojuego, despertó algunas dudas. Aunque en un principio era Mark Wahlberg el elegido para interpretarlo, el hecho de que se esperen más películas decantó la balanza a favor de Holland, bastante más joven. La película funcionó sorprendentemente bien, convirtiéndose en una de las más taquilleras de lo que va de 2022, aunque las críticas sí son algo más tibias que con Arcane.
Mortal Kombat (1995)
Algunos la consideran una gran adaptación, otros no le conceden ni el consuelo del aprobado. Mortal Kombat fue bastante aplaudida por los fans de uno de los videojuegos de peleas más emblemáticos, a pesar de que técnicamente es innegable que no era una película para los Oscar (sí para el Festival de Sitges, para el que fue nominada como mejor película). Paul W.S. Anderson creó un entretenido film que ya se puede considerar un clásico de las adaptaciones de videojuegos. El techno de su banda sonora también fue un factor clave para un éxito que ha intentado ser replicado con insistencia en las últimas décadas.
Tomb Raider (2001, 2003, 2018)
Otra saga que tuvo mucho impacto en su salto a la gran pantalla fue la de Tomb Raider. En 2001 y 2003, sus dos películas con Angelina Jolie encarnando a la icónica Lara Croft gustaron a la audiencia y dejaron beneficios a las productoras. La saga tuvo un renacer hace relativamente poco, cuando en 2018 Alicia Vikander tomó el testigo de Jolie. La fórmula parecía agotada, pero la película tuvo una mejor recepción que las dos primeras. Netflix tiene en sus cajones una nueva adaptación, esta vez en forma de serie, que se estrenará en 2023, coincidiendo con el relanzamiento de la trilogía de videojuegos.
Super Mario Bros (1993)
El videojuego de Nintendo es considerado por muchos como el clásico de los clásicos, un punto de partida muy exigente para los productores de Super Mario Bros, que terminó suponiendo uno de los pinchazos más recordados de la década de los 90. El Mario de Bob Hoskins y el Luigi de John Leguizamo no calaron entre los fans que crecieron con una Game Boy o una Super Nintendo por muchos motivos: una historia que no tenía que ver con el videojuego, vestuario mejorable, su atmósfera oscura, etc. Sí se puede decir que sirvió de aviso para futuras adaptaciones sobre las trampas a evitar. En 2023 habrá un nuevo intento con Chris Pratt como Mario del que apenas se conocen detalles.
Street Fighter, la última batalla (1994)
Mortal Kombat no fue la pionera en cuanto a adaptaciones de videojuegos de combate se refiere. Un año antes, Street Fighter había llegado a las salas con Jean-Claude van Damme como cabeza de cartel. La popularidad del actor belga hizo que la película dejara beneficios a pesar de las trabas constantes que éste ponía durante el rodaje, pero el recuerdo que dejó no fue demasiado positivo, hasta el punto de que muchos han olvidado que el personaje de Cammy lo interpretaba Kylie Minogue. Otra saga similar que también tuvo sus adaptaciones fue Tekken, con una primera película aceptable pero deficitaria y una segunda sencillamente olvidable.
Alone in the Dark (2005 y 2008)
Si no recuerdas ninguna de las dos películas de Alone in the Dark, por algo será. La primera película contaba con actores reconocibles como Christian Slater y Tara Reid, pero eso no fue una garantía para salvar una adaptación que costó 20 millones de dólares y ni siquiera llegó a los 13 millones de recaudación en todo el mundo. Tres años después hubo una secuela con mucho menos presupuesto y mucha menor recaudación, pasando a la historia como una película de serie B en la que uno se encuentra sin esperarlo a Danny Trejo.
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