Lo mejor y lo peor del Samsung Galaxy Z Flip4

Los móviles plegables siempre llaman la atención por la novedad que supone su diseño respecto a la gran mayoría de smartphones en el mercado. Más allá de ese factor diferencial, conviene conocer lo mejor y lo peor del Samsung Galaxy Z Flip4, una de las novedades de Samsung más llamativas del año.

Las mejores características del Samsung Galaxy Z Flip4

El rendimiento que ofrecen estos terminales es una de las mejores características del Samsung Galaxy Z Flip4. La incorporación del Snapdragon 8+ Gen 1, el procesador más potente que admiten los teléfonos Android, hace que se puedan ejecutar los juegos más exigentes con fluidez y sin un calentamiento excesivo.

Otra característica notable del Samsung Galaxy Z Flip4 es que su modo Flex hará que no sea necesario utilizar ningún trípode para que tus fotos salgan movidas. Podrás plegar el móvil para que quede apoyado en la palma de tu mano o en la superficie desde la que quieras tomar la foto o grabar tus vídeos. Si a esto se le suman las mejoras en la estabilización de la cámara que presenta este modelo, el beneficio es notable.

Lo mejor y lo peor del Samsung Galaxy Z Flip4 1

En cuanto al diseño, la escasez de modelos plegables en el mercado hace que inevitablemente el Samsung Galaxy Z Flip4 destaque por sí mismo. Quienes quieran ganar espacio en sus bolsos o bolsillos con un móvil más compacto notarán la diferencia de inmediato. El hecho de que las huellas no se queden reflejadas en el marco con el uso habitual también es un plus a tener en cuenta, ya que muchos teléfonos premium no consiguen evitar que su superficie termine convirtiéndose en el festival de los dedos.

Hay algunas nuevas funciones para la pantalla exterior que también merecen la pena, como el widget de marcación rápida. Con él podrás añadir a tus tres contactos más frecuentes para poder llamarles sin necesidad de desplegar el teléfono, y aunque se podría haber sacado más partido a la pantalla exterior, bien recibidas son novedades como esta o la incorporación de un ‘track pad’ con un puntero para poder navegar con el móvil en modo Flex como si estuviéramos usando el ratón del ordenador.

Lo peor del Samsung Galaxy Z Flip4

Aunque la calidad de las fotografías es innegable y cumple de sobra para un uso casual y no profesional, el hecho de que la cámara del Samsung Galaxy Z Flip4 sólo disponga de dos lentes es un factor llamativo, especialmente si tenemos en cuenta que estamos ante un móvil de gama alta.

La batería es otro de los apartados de este móvil premium de Samsung que podría ser francamente mejorable. Con 3.700 mAh y una carga rápida de 25 W, es probable que este modelo sepa a poco a los usuarios más intensivos. Presenta mejoras respecto a su hermano menor, el Galaxy Z Flip3, pero aun así no es suficiente para aguantar todo el día, llevando a que sus usuarios tengan que recurrir a algunos trucos para aumentar su autonomía.

Por último, la singularidad del diseño del Samsung Galaxy Z Flip4, además de las ventajas ya mencionadas en el apartado anterior, se cobra sus peajes, como la entrada de polvo en el hueco que queda entre pantallas al plegarlo. Un usuario que tenga las manos pequeñas puede encontrar alguna incomodidad no sólo en el gesto del despliegue, sino a la hora de alcanzar algunas teclas como la del volumen, situada en una posición algo alejada en la parte superior del lateral.