Huawei P20 Pro, lo hemos probado

Huawei ha insistido mucho en lo revolucionaría que es la triple cámara del Huawei P20 Pro. Pero, tras probarlo a fondo durante más de 15 días, os puedo decir que este terminal es mucho más que una triple cámara. Huawei ha logrado un gran diseño, con una pantalla de calidad y un conjunto técnico muy capaz.

No es perfecto, por supuesto, pero es un terminal que puede plantar cara (incluso superar) a sus dos grandes rivales: el Samsung Galaxy S9+ y el iPhone X. A poco que Huawei hubiera pulido algunos detalles que ahora veremos, estaríamos ante el que podría ser el mejor móvil del mercado. Sin embargo, la compañía ha preferido fijar un precio ligeramente inferior al de sus rivales, a costa de hacer algunas concesiones. Os lo cuento en detalle en el análisis del Huawei P20 Pro.

Ficha técnica Huawei P20 Pro

Pantalla	6,1 pulgadas, FHD+ de 2.240 x 1.080 pí­xeles, OLED con proporción 18,7:9, 408 píxeles por pulgada
Cámara principal	– sensor RGB de 40 mp (tecnología light fusion), f/1.8 –  sensor Monocromo de 20 megapí­xeles, f/1.6 – sensor teleobjetivo de 8 megapíxeles
Cámara para selfies	24 megapí­xeles, f/2.0, ví­deo Full HD
Memoria interna	128 GB
Ampliación	No
Procesador y memoria RAM	Kirin 970 con NPU (chip de procesamiento neuronal), 6 GB de RAM
Baterí­a	4.000 mAh, carga rápida
Sistema operativo	Android 8.1 Oreo/ EMUI 8.1
Conexiones	BT 4.2, GPS, USB de tipo C, NFC
SIM	nanoSIM
Diseño	Metal y cristal, certificado IP67, colores: negro, azul, rosa y multicolor
Dimensiones	155 x 73,9 x 7,8 mm, 185 gramos
Funciones destacadas	Zoom 5X híbrido, estabilización inteligente de imagen, larga exposición sin trípode, súper cámara lenta a 960 cuadros en HD, desbloqueo por escaneo facial, infrarrojos
Fecha de lanzamiento	Disponible
Precio	900 euros

 

La magia de las tres cámaras

Esta vez voy a empezar el análisis por el apartado fotográfico, ya que es, quizás, la característica más importante del Huawei P20 Pro.

Como ya os conté en mi análisis tras las primeras 24 horas con el Huawei P20 Pro, el nuevo buque insignia de Huawei cuenta con tres cámaras en su parte trasera. Es una de las principales diferencias con sus hermanos pequeños, pero no la única como luego veremos.

Por un lado se mantiene el conjunto de cámara monocromo + cámara RGB que la compañía lleva utilizando unos años. Aunque esta vez los sensores han sido mejorados. Tenemos un sensor RGB de 40 megapíxeles, f/1.8 y con un tamaño de 1/1.78″. Es decir, es, aproximadamente, el doble de gran que el sensor del S9. Esto se traducen en que captura hasta un 20% de luz que los sensores más pequeños que utiliza la competencia.

El sensor monocromo es de 20 megapíxeles y apertura f/1.6. La combinación de ambos sensores ya consigue un zoom óptico 2x, pero Huawei ha querido ir un poco más allá.

Para ello han incluido un tercer sensor. Es un teleobjetivo con 8 megapíxeles de resolución y apertura f/2.4. ¿Qué se consigue con esto? Una distancia focal equivalente a un 80 mm, con un zoom 5x tremendamente adictivo.

Además del conjunto técnico, otra parte realmente importante del conjunto fotográfico del Huawei P20 Pro viene de la unidad NPU que incorpora el procesador. El terminal es capaz de detectar la escena y mejorar automáticamente la fotografía. Además, incorpora un sistema de estabilización inteligente que compensa el movimiento del terminal. Incluso tenemos enfoque predictivo, para conseguir imágenes nítidas incluso cuando tenemos mucho movimiento.

La cámara delantera quizás esté un poco eclipsada por el triple conjunto trasero, pero eso no significa que el fabricante la haya dejado de lado. Tenemos un sensor de 24 megapíxeles con apertura f/2.0. Además, como ahora veremos, cuenta con Modo Retrato.

App cámara

Antes de ver los resultados que ofrecen las cámaras, echémosle un vistazo a la aplicación cámara. Una aplicación que ha sido ligeramente renovada respecto a otros terminales de la compañía.

En la parte inferior (si sujetamos el terminal en vertical, lateral derecho si lo tenemos en horizontal) tenemos los diferentes modos que ofrece la cámara. Para cambiar entre ellos tendremos que deslizar arriba o abajo, tal y como vemos en otros terminales.

De esta forma podremos acceder a los modos más habituales, pero no a todos. Tendremos disponibles los modos Apertura, Retrato, Foto, Vídeo y Profesional. Al final del «carrusel» tenemos una opción «Más», donde encontraremos algunos de los modos más interesantes, como Cámara lenta, Toma nocturna o HDR, entre otros.

En el otro extremo de la pantalla tendremos la típica rueda dentada para acceder a los ajustes, una opción que nos permite cambiar el tratamiento del color (Estándar, Colores vivos y Colores nítidos), la posibilidad de habilitar las fotos con movimiento y el flash. El acceso al zoom se coloca en la parte superior de la pantalla.

Esta opciones pueden variar al cambiar entre modos. Por ejemplo, en el modo Retrato tenemos una barra que nos permite cambiar el nivel de belleza. También una opción que pone 3D, que en realidad se refiere a los diferentes modos de iluminación del modo Retrato (similar a lo que ofrece el iPhone X).

En el modo Profesional podemos cambiar desde la ISO hasta la velocidad, pasando por el modo de enfoque y el balance de blancos.

Por otro lado, el modo monocromático también nos permite disparar en modo Apertura, Retrato o Profesional.

Cuando cambiamos a la cámara frontal también tenemos disponible el Modo Retrato. Además, la aplicación nos ofrece hasta 10 grados de belleza. Como es lógico, si lo ponemos al máximo el resultado será muy artificial.

Algo que no me ha gustado es que la ruleta de modos sigue apareciendo completa aunque cambiemos a la cámara frontal. Esto puede llevar a confusión y hacernos creer que todos los modos están disponibles también para la cámara frontal. Además de poder cambiar de modo sin querer, lo que provoca que cambie de forma automática a la cámara trasera.

En definitiva, el Huawei P20 Pro cuenta con una aplicación Cámara muy completa. Sin embargo, se podrían haber pulido algunos detalles. Por ejemplo, algunos de los modos más interesantes están escondidos y no podemos acceder a ellos rápidamente.

Resultados cámaras traseras

Llega el momento de ver qué tal rinde el conjunto fotográfico del P20 Pro. Pero antes os quiero comentar un pequeño detalle. La cámara viene configurada por defecto en una resolución de 10 megapíxeles. En los ajustes podemos seleccionar la resolución de 40 megapíxeles, pero perderemos el maravilloso zoom híbrido. Es algo que debemos tener en cuenta.

En condiciones de buena luz el Huawei P20 Pro consigue unas imágenes excelentes. Las fotografías son nítidas, con un amplio rango dinámico, una exposición prácticamente perfecta y sin grano apreciable.

El sistema de autoenfoque es rápido y preciso. Nos permite realizar fotografías en ráfaga y con el sujeto en movimiento con unos resultados realmente buenos.

Algo que os llamará la atención nada más empezar a utilizar la cámara del P20 Pro será la detección de la escena. Cuando apuntemos a algo, veremos como el sistema de IA nos dirá que «está viendo», aplicando la mejora que considere conveniente.

La detección de la escena funciona muy bien. El sistema es capaz de reconocer el cielo, vegetación, flores y mucho más. Sin embargo, la mejora que aplica suele traducirse en un aumento de la saturación y contraste para resaltar algunos colores. Y eso no siempre es lo ideal.

Por ejemplo, en la fotografía que tenéis sobre estas líneas vemos un verde y un marrón en el tronco más destacados, pero el resto de la escena está ligeramente quemada, con pérdida de definición.

Sin embargo, Huawei ha pensado en todo, y este sistema de asistencia se puede desactivar. El resultado es una imagen mucho más natural, con un buen contraste.

Cuando la luz empieza a caer, el Huawei P20 Pro sigue rindiendo a un gran nivel. Gracias a un sensor inusualmente grande, el ruido se mantiene a raya incluso en condiciones de poca luz.

Incluso con poca luz el enfoque automático sigue dando muy buenos resultados. La reproducción del color se mantiene a un gran nivel cuando la luz va desapareciendo, así como el nivel de exposición.

Cuando cae la noche, o en interiores muy oscuros, podemos utilizar el modo «Toma nocturna». Aquí entra en juego el sistema de estabilización de imágenes con IA, pudiendo hacer tomas con exposiciones de 4 segundos sin trípode.

Aunque podemos utilizarlo en modo automático, también podemos configurar nosotros el ISO y la velocidad de obturación.

Otro de los grandes atractivos del sistema de triple cámara del Huawei P20 Pro es el zoom. El terminal ofrece un zoom 3x óptico y 5x híbrido. Y, como os decía al principio, es tremendamente adictivo.

No hemos visto ningún terminal que pueda plantar cara en este aspecto. El P20 Pro consigue unas imágenes con gran nivel de detalle y bajos niveles de ruido en todas las condiciones de luz.

Tranquilos, no nos hemos olvidado de una de las características más demandadas de los últimos años, el efecto bokeh o desenfoque. El Huawei P20 Pro nos ofrece dos opciones para conseguir este efecto, el modo retrato y el modo apertura.

El primero es más automático, no es necesario ajustar nada. Simplemente tendremos que colocar al sujeto u objeto a la distancia que nos diga el asistente de la cámara. Una vez el terminal determine el objeto principal de la fotografía, se realizará el desenfoque.

En el segundo podemos seleccionar la apertura de forma manual. Esto nos permitirá, por un lado aplicar desenfoque siempre, y, por otro lado, conseguir un desenfoque más agresivo. Eso sí, tendremos que tener más cuidado para que no aparezcan borrones o efectos extraños.

Gracias a la cámara secundaria monocromática, el Huawei P20 Pro es capaz de realizar una estimación de profundidad muy precisa. El modo Retrato es más exigente, pero obtiene unos resultados espectaculares, con un desenfoque muy agradable. Además, es capaz de detectar las áreas más complejas, como los huecos o el pelo.

Acabamos el repaso a la cámara principal con el modo Monocromático. Como hemos visto en otros terminales, la calidad de las fotografías en blanco y negro de los últimos topes de gama de Huawei está fuera de toda duda. Sin embargo, aunque nos permite no tener que recurrir a filtros o edición posterior, no aporta demasiado frente a estos.

Resultados cámara frontal

Pasamos ahora a la cámara frontal. Aunque Huawei ha decidido no poner una doble cámara en la parte delantera del P20 Pro (hubieran rizado el rizo), han colocado una cámara de mucha resolución.

Una cámara que, además, también ofrece el modo retrato. En general, la cámara ofrece una calidad muy buena, especialmente cuando las condiciones de luz son favorables.

En esta toma podemos ver como en condiciones más complicadas (con luz natural pero en interior) la cámara se defiende, pero muestra una imagen demasiado lavada. En general, el conseguir o no un buen selfie dependerá mucho de las condiciones en las que nos encontremos.

En el modo Retrato tenemos 10 niveles de belleza. El nivel máximo nos dejará la piel estupenda, pero cuidado porque el efecto queda bastante artificial. Lo ideal es ir probando niveles y encontrar el que más nos guste.

Galería fotografías hechas con el Huawei P20 Pro

 

Vídeo

Quizás las mejores en vídeo sean menos cuantiosas, pero son bastante interesantes. La primera y principal es el sistema de estabilización que proporciona la IA (EIS). Este ofrece un rendimiento excelente, incluso superior a algunos estabilizadores ópticos. Funciona de forma eficiente incluso cuando caminamos con el móvil en la mano. Sin embargo, para poder utilizarlo tendremos que grabar con resolución Full HD.

Y hablando de la resolución, el Huawei P20 Pro pone a nuestra disposición varias resoluciones de grabación: UHD 4K, FHD+ (2160 x 1080), FHD 1080p, FHD 1080p 60 fps, HD 720p. Además, podemos guardar los vídeos en forma H265 (más eficiente) o H264 (mejor compatibilidad).

Los niveles de ruido en los vídeos grabados con el P20 Pro son muy bajos, incluso en condiciones de luz desfavorables. La exposición es correcta, el balance de blancos preciso y colores realistas.

En algunos vídeos muy concretos podemos notar pérdida de nitidez, especialmente cuando tenemos una luz directa muy fuerte. También puede aparecer un efecto aliasing en algunas tomas.

La segunda gran novedad en el apartado de vídeo es la cámara súper lenta. El Huawei P20 Pro es capaz de grabar a 960 fps durante unos segundos. Tendremos que estar hábiles para captar el momento que queramos a cámara lenta, ya que la grabación dura solo 0,25 segundos. El resultado final es un vídeo de unos 10 segundos, sumando el principio y el final, que se reproducen a velocidad normal.

Estos vídeos son resultones, pero no ofrecen demasiado detalle. La resolución de estos vídeos es de 720p, manteniéndose así Sony como la única que ha conseguido una resolución FHD.

Además, la aplicación no nos permite seleccionar el trozo del vídeo que queremos a cámara lenta. La aplicación del Samsung Galaxy S9, por ejemplo, nos permite elegir cuándo grabar a cámara súper lenta. En el P20 Pro no podremos hacerlo.

Estilo Huawei adaptado a 2018

Huawei tiene un estilo de diseño propio, que no ha abandonado en el P20 Pro. Eso sí, la compañía ha sabido adaptarse a las exigencias del mercado actual.

Tenemos una trasera de cristal, con muchos reflejos y brillos. Nuestra unidad de prueba luce un bonito color azul, pero el que parece estar triunfando es el Twilight, un bonito acabado que cambia de color con la luz.

La parte trasera se une a la parte delantera mediante unos marcos metálicos cromados. Tienen un tono oscuro, muy elegante. Es aquí donde tenemos colocados los botones de volumen y encendido. Este último tiene una marca de color rojo para identificarlo más fácilmente.

Las cámaras están situadas en vertical y en el extremo superior izquierdo. Como hemos visto antes, el conjunto formado por el teleobjetivo y la cámara RGB sobresale bastante de la carcasa. Esto hace que cuando dejamos el terminal sobre la mesa no quede plano, quedando «cojo».

En la parte frontal la gran protagonista es la pantalla, de la que luego hablaremos. Como sabéis, en la zona superior tenemos el famoso notch o muesca. En la parte inferior Huawei ha decidido poner un marco para colocar el lector de huellas dactilares. En mi opinión es una decisión acertada, ya que lo veo más cómodo que cuando está situado en la parte posterior.

Pantalla de gran tamaño con muesca

La famosa muesca en la pantalla es una de las características más polémicas de los últimos años. Aún así, parece que ha llegado al mundo de los terminales Android para quedarse.

Y, no sé si es porque estoy acostumbrado a utilizar el iPhone X, pero a mí personalmente no me molesta en absoluto. La muesca del Huawei P20 Pro es más pequeña que la del terminal de la manzana.

Pero si no soportáis tener esa isla en medio de la pantalla, no os preocupéis, Huawei nos deja elegir si queremos verla o no. Tenemos una opción que nos permite colocar una franja negra en la parte superior, con lo que la muesca pasará desapercibida. Eso sí, perderemos una parte de la pantalla.

Aunque en la mayoría de situaciones la muesca no molesta, es cierto que algunas apps no están adaptadas. Uno de los casos más llamativos es el de las Stories de Instagram, en las que la muesca pisa el contenido.

Otras, como YouTube, directamente se olvidan de la muesca. Si ampliamos la imagen, veremos que esta se queda justo cuando empieza la muesca.

Dejando de lado la muesca, tenemos un panel con tecnología OLED y 6,1 pulgadas. Ofrece una resolución de 2.240 x 1.080 píxeles y formato 18,7:9.

Además del habitual sistema de brillo automático, EMUI nos ofrece varios ajustes para la pantalla. El primero es la resolución, que podemos bajar si queremos ahorrar algo de batería. Yo no he cambiado la resolución en ningún momento, ya que prefiero aprovechar al máxima las posibilidades de la pantalla. Pero la opción la tenemos.

También tenemos opción de ajustar cómo queremos ver los colores. Podemos activar la opción de «Tono natural», que ajustará la temperatura del color automáticamente. O si queremos hacerlo de forma manual, podemos optar por una configuración más fría o más cálida, así como colores normales o algo más vivos.

Una vez probados los ajustes, yo lo dejé todo en automático. El ajuste automático de brillo funciona de maravilla, ofreciendo una visualización prácticamente perfecta incluso con el sol incidiendo de forma directa.

La respuesta táctil es muy buena, mientras que los ángulos de visión son correctos. En general, la experiencia con la pantalla del Huawei P20 Pro ha sido muy satisfactoria. Se ve realmente bien en cualquier aplicación, aprovechando las ventajas de los paneles OLED (como el negro infinito) en la reproducción de vídeo.

Gran rendimiento con hardware conocido

Huawei ha tenido mucho trabajo con el P20 Pro. Han cambiado por completo el diseño, incluyendo una nueva pantalla. Además, han revolucionado el panorama fotográfico de la telefonía móvil.

Así que, para el cerebro de la bestia, han preferido utilizar un viejo conocido. En el interior del Huawei P20 Pro encontramos un procesador Kirin 970, el mismo que equipa el Huawei Mate 10.

Este viene acompañado por 6 GB de memoria RAM y 128 GB de almacenamiento interno. Quizás os sorprenda esta capacidad de almacenamiento de serie, pero es que el terminal no cuenta con ranura para tarjetas microSD.

Como imaginaréis, el terminal puede con todo. El sistema EMUI funciona a las mil maravillas, totalmente fluido incluso con muchas apps ejecutándose a la vez. Los test de rendimiento demuestran que, a pesar de no estar ante el móvil más potente del mercado, no tendremos problemas con ninguna aplicación.

Sí hemos notado un ligero calentamiento del terminal cuando estamos un rato con aplicaciones exigentes, como juegos o la propia app de la cámara. No es para nada molesto o alarmante, pero lo notaremos.

Sonido con Dolby Atmos y sin jack

Otra de las funcionalidades que han adoptado los móviles es la de reproductor de música. Por eso, aunque no siempre es una característica en la que nos fijemos, los fabricantes siguen mejorándolo.

En el Huawei P20 Pro destacan dos características respecto al audio. La primera, la incorporación de unos altavoces estéreo con tecnología Dolby Atmos. El sonido de los altavoces es muy bueno y potente, más que el de la mayoría de terminales que he probado.

¿Y con los auriculares? Lo primero destacar que el P20 Pro no tiene jack de 3,5 mm. Sin embargo, el fabricante ha incluido tanto unos auriculares con conector USB-C como un adaptador de USB-C a jack.

El sonido es muy bueno, además podemos elegir si activar o no el sonido Dolby Atmos cuando utilicemos los auriculares (con los altavoces del móvil lo tendremos siempre activado). Además, también podremos seleccionar qué tipo de contenido estamos viendo, si es película o música. Al hacerlo el sonido se configurará para ofrecer la mejor calidad.

La diferencia entre el modo Película y el modo Música es considerable, ofreciendo en el segundo un sonido más natural. Sin embargo, entre las diferentes opciones de ecualización del modo Música no he notado demasiadas diferencias.

Gran trabajo en autonomía

Hoy en día los fabricantes están centrados en ofrecer nuevos diseños, pantallas de gran tamaño y cámaras de gran calidad. Sin embargo, parece que el apartado de la batería se ha dejado un poco de lado. La mayoría se conforman con que sus terminales lleguen al día completo con un uso habitual.

Por suerte, Huawei no ha querido ser uno más y ha colocado en el P20 Pro una batería de 4.000 mAh. Y eso, no nos olvidemos, manteniendo un grosor de menos de 8 mm. ¡Gran trabajo Huawei!

Y vaya si se nota. El terminal cuenta con una autonomía realmente buena. Uno de los días de prueba estuve por la mañana con un uso habitual, redes sociales, mensajes y navegación. Toda la tarde de sesión fotográfica por la calle. Y el resto de la noche nuevamente con uso constante de redes sociales y demás. A la 1 de la madrugada todavía tenía un 35% de batería. ¡No está nada mal!

Con un uso menos intensivo del terminal, he llegado a irme a la cama algunos días con más del 50% de batería. Es decir, podremos pasar el día completo sin problema.

La batería se carga mediante un conector USB-C. Además, el Huawei P20 Pro cuenta con sistema de carga rápida. Gracias a este sistema podemos cargar el terminal al 50% en una hora. La carga completa se demora unas 2 horas y media.

Sin embargo, aquí tenemos un toque de atención para Huawei. Y es que el P20 Pro no incluye carga inalámbrica, algo que no entendemos, ya que el material utilizado para la carcasa trasera lo permite.

EMUI 8.1 sigue siendo EMUI

Huawei instala en sus terminales una capa de personalización muy característica. El P20 Pro llega con EMUI 8.1 instalado sobre Android 8.1 Oreo.

A nivel estético sigue siendo muy similar a otras versiones de EMUI. Tenemos un menú de Ajustes con el estilo de Huawei, bastante alejado del que ofrece Android puro.

También contamos con una buena cantidad de aplicación preinstaladas, tanto de Huawei como de terceros. Algunas las podremos desinstalar, pero otras no. ¿Son aplicaciones útiles? Pues eso depende del uso que le de al terminal cada usuario, pero lo más probable es que acabemos teniendo varias apps para un mismo uso.

Para personalizar el terminal EMUI nos ofrece algunas opciones interesantes. Y no me refiero a cambiar el fondo de pantalla, sino a partes importantes del sistema. Por ejemplo, la pantalla de inicio. Podemos disponer de una pantalla de inicio con todas las aplicaciones, al más puro estilo iPhone. O bien podemos optar por tener un cajón de aplicaciones, como suelen hacer la mayoría de terminales Android.

También podemos ajustar las notificaciones. Es posible desde agrupar los iconos que aparecen en la barra superior, hasta decirle si queremos que se encienda o no la pantalla al recibir una notificación.

Otra opción interesante que encontramos en EMUI es qué hacer con la barra de navegación. Aunque por defecto viene con los botones de navegación en pantalla, tenemos más opciones. Una es utilizar un botón de navegación virtual que nos aparecerá en pantalla.

La otra es utilizar el sensor de huellas dactilares para la navegación. Yo lo activé un día para probarlo y no volví a activar la barra de navegación en pantalla. Su uso es muy sencillo y nos permite aprovechar al máximo la pantalla.

Mediante una pulsación larga iremos a la pantalla de inicio. Con una pulsación leve haremos la acción «Atrás» y con un deslizamiento lateral abriremos la multitarea. Como os digo, tras unas horas de adaptación, lo dejé activado para siempre.

Y ahora que hablamos de sacarle el máximo partido a la pantalla, resulta que algunas aplicaciones no están disponibles a pantalla completa. Seguro que en alguna captura de pantalla os habéis dado cuenta. Esto se debe, como es lógico, al ratio de pantalla y la no adaptación de las aplicaciones al mismo.

Por ello, Huawei ofrece la posibilidad de «estirar» las aplicaciones para que ocupen toda la pantalla. Sin embargo, el propio software del terminal avisa de que utilizar esta opción puede hacer que la aplicación en cuestión no funcione de forma correcta.

Aunque esconde muchas más funciones (como la aplicación Salud), termino el apartado de software con tres opciones que me han parecido especialmente interesantes. La primera es poder hacer una captura de pantalla mediante dos toques en la pantalla con los nudillos. Es algo que llevamos tiempo viendo en los terminales de Huawei y que se mantiene en el P20 Pro.

La segunda es el sistema de reconocimiento facial. Registrar el rostro es sencillo, aunque tendremos que buscar un lugar bien iluminado. En mi caso he hecho la detección del rostro sin gafas y después el sistema me reconocía con ellas puestas.

La verdad es que el sistema funciona bastante bien. Al levantar el terminal el sistema nos identifica y desbloquea el móvil de forma automática. Sin embargo, tiene sus limitaciones. Al no contar con un sistema láser de detección como el de Apple, no funciona con la luz apagada. Pero en general su funcionamiento es bueno.

Por último quería destacar el sistema Huawei Share. Lo tenemos disponible en el centro de control de EMUI y hace que podamos acceder al móvil desde el ordenador fácilmente, como si fuera cualquier otro equipo de la red. Al activarlo veremos el terminal en los equipos en red. Solo con colocar el usuario y la contraseña del móvil podremos acceder a su estructura de archivos y transferir cualquier contenido entre el ordenador y el móvil. ¡Me ha resultado tremendamente útil!

Conclusiones y precio

Os tengo que ser sincero. He pasado unos 15 días con el Huawei P20 Pro, probándolo a fondo, y me he enamorado de él. Tiene un diseño elegante, con una parte trasera en cristal realmente bonita. Es cierto que si somos unos maniáticos de la limpieza sufriremos mucho, pero hoy en día esto ocurre en cualquier terminal de gama alta.

La pantalla ofrece una gran calidad de imagen y el funcionamiento del terminal es perfecto. Quizás la capa de personalización podría ser algo más ligero y contener menos apps preinstaladas. Pero es algo que, teniendo 128 GB de almacenamiento, importa algo menos.

Pero donde realmente despunta el Huawei P20 Pro es en su apartado fotográfico. El zoom híbrido que ofrece este terminal es realmente impresionante. Además, la calidad general de las fotografías está en un nivel muy alto.

También tenemos otros añadidos, como la cámara súper lenta o el espectacular modo nocturno, que puede salvarnos de alguna situación complicada. Y no me olvido de los modos manuales, perfectos para los amantes de la fotografía.

Entonces, ¿es el terminal definitivo? No, tiene algunas cosas que mejorar. Por ejemplo, el desempeño de la cámara frontal, sin ser malo, tiene ciertas lagunas. También se puede pulir el sistema de inteligencia artificial, por ejemplo a la hora de identificar las escenas y aplicar los ajustes correspondientes.

Por otro lado, no entiendo que Huawei no haya incorporado la carga inalámbrica. Aunque puede que para la mayoría de usuarios no sea algo imprescindible, cuando pagas una cantidad alta por un móvil lo quieres todo.

Aún así, puede que estemos ante el terminal más equilibrado del mercado. El Huawei P20 Pro ya está a la venta en España con un precio oficial de 900 euros.