Pantalla infinita. Diseño compacto. Así se presenta el Samsung Galaxy S8+, un móvil capaz de llevar un panel de 6,2 pulgadas en el cuerpo de un Samsung Galaxy S7 edge. El smartphone estrella de la coreana vuelve con un puñado de características de primer nivel, con un conjunto técnico a la altura y la misma cámara que le encumbró el año pasado.
Todo ello, con un precio de quitar el hipo de 910 euros. ¿Merece la pena invertir esta cantidad en este móvil? Lo hemos probado en profundidad, esta es nuestra review del Samsung Galaxy S8+.
Ficha del Samsung Galaxy S8+
Pantalla | 6,2 WQHD de 2960 x 1440 píxeles (529ppp) | |
Cámara principal | 12 megapíxeles, F/1.7 y estabilizador | |
Cámara para selfies | 8 megapíxeles con autoenfoque | |
Memoria interna | 64 GB | |
Ampliación | Sí microSD (hasta 256 GB) | |
Procesador y memoria RAM | Exynos 8895 / 4 GB | |
Batería | 3.500 mAh, carga rápida | |
Sistema operativo | Android 7.0 Nougat/ Samsung Touchwiz | |
Conexiones | BT 5, GPS, USB de tipo C, NFC | |
SIM | nanoSIM | |
Diseño | Metal y cristal, certificación IP68, lector de huellas dactilares / varios colores / Protección Gorilla Glass 5 | |
Dimensiones | 159.5 mm (alto) x 73.4 mm (ancho) x 8,1 mm (grosor) | |
Funciones destacadas | Bixby, multiventana, triple seguridad | |
Fecha de lanzamiento | 28 de abril | |
Precio | 910 euros |
Cuando Samsung decidió hacer magia en su diseño
Diseño extraordinariamente ligero, bordes curvados, diseño resistente al agua y al polvo, lector de huellas en la parte trasera, adiós al botón de inicio
El Samsung Galaxy S8+ es, simplemente, precioso. La compañía coreana ha puesto toda la carne en el asador en el diseño de su terminal estrella. Y se nota. Lejos quedan los días en los que se acusaba a la coreana de hacer móviles poco atractivos. El S8+ brilla con luz propia, hasta tal punto que será difícil que otro terminal le arranque el trofeo del móvil con mejor diseño de 2017.
Gran parte de culpa la tiene su pantalla “infinita”, de la que hablaremos más adelante. Pero es que hay otro aspecto de su diseño que puede pasar inadvertido, a pesar de su importancia. El Samsung Galaxy S8+ es ligero. Muy ligero. Sorprende cuando lo coges en la mano, y facilita mucho su manejo en cualquier situación. Son 173 gramos, más ligero que modelos como el Huawei Mate 9 o el iPhone 7 Plus. Pero con una pantalla de 6,2 pulgadas.
En el diseño de este móvil vuelven a ser protagonistas las curvas. Tanto las de la pantalla (a los dos lados) como las de la parte trasera y las esquinas. La sensación que se crea es la de un móvil muy estilizado. En cuanto a los materiales, se mantiene la fórmula ganadora de Samsung. Cristal tanto en la parte trasera como en la delantera y una franja de metal en los laterales.
A pesar de lo que pueda parecer, lo cierto es que el Samsung Galaxy S8+ da una sensación robusta. Eso sí, no lo hemos llegado a probar (por suerte) en golpes y caídas. Lo que sí hemos catado es su certificación IP67. Gracias a ello, se puede sumergir el móvil en agua durante un buen rato sin que sufra ningún daño. Claro que con peros.
La profundidad máxima a la que se puede sumergir es de un metro, y hay que tener cuidado de no bañarlo en agua de una piscina o de un mar. Tanto el cloro como la sal son materiales corrosivos que pueden terminar por dañar el móvil. En verdad, el Galaxy S8+ no se ha pensado como un móvil sumergible. Pero sí como un smartphone capaz de aguantar un chaparrón o una caída accidental en el agua. Y eso es algo que echamos en falta en rivales como el Huawei P10.
Adiós al botón de inicio, hola Bixby
Y claro, no podíamos dejar de lado en la review del Samsung Galaxy S8+ otro de los cambios fundamentales que ha recibido su diseño. La desaparición del botón de inicio físico. Un botón que se había convertido en una de las señas de identidad de los móviles de la firma. Y que, precisamente, ha seguido presente en la familia Samsung Galaxy A 2017.
Pero el hecho es que ese botón sobraba si se quería conseguir el efecto de la pantalla infinita. En su lugar, la compañía ha dejado un botón central táctil que se ilumina cuando tenemos la pantalla apagada. Eso sí, solo reacciona si lo apretamos con fuerza. El motivo es evitar que accionemos el equipo por descuido cuando lo tenemos guardado en el bolsillo.
La idea es muy buena, pero en la práctica me ha parecido poco cómodo. Sobre todo al principio, la presión requiere maña y no son pocas las ocasiones en las que hemos tenido que repetir el proceso. Además, tras apretarlo todavía hay que pasar por la pantalla de bloqueo. El mismo resultado se consigue presionando el botón de encendido y apagado.
Review en vídeo del Samsung Galaxy S8+
Un botón que se va y otro que viene. Y es que en el lateral izquierdo del móvil contamos con un nuevo botón, justo por debajo de los botones para cambiar el volumen. Dicho botón sirve para activar el asistente inteligente Bixby. Una herramienta a medio camino entre Siri, Cortana y Google Now. Más adelante hablaremos en profundidad sobre Bixby y las opciones que quiere ofrecer.
Galería de fotos del Samsung Galaxy S8+
Tres colores diferentes
Cada día más, la personalización es clave a la hora de ofrecer un móvil. Y el abanico de colores disponibles se amplía año tras año y modelo tras modelo. En el caso del Samsung Galaxy S8+, contamos con tres tonalidades diferentes a elegir en España: negro, gris orquídea y plata.
El modelo que usamos para la prueba es el gris, que tiene unos bonitos reflejos azulados. Lo cierto es que se trata de un color que luce mucho y la opción más diferenciada entre las tres disponibles. Los laterales metálicos están en sintonía con esta tonalidad, por lo que hay en el equipo una sensación armoniosa en todo el diseño.
Además, entre el propio color y el trabajo de Samsung las huellas quedan bastante disimuladas. Como era de esperar, es imposible huir de este problema propio del cristal pero se soluciona con buena nota.
El lector de huellas, ese molesto problema
Hasta ahora, Samsung había apostado por colocar el lector de huellas en su botón de inicio. Pero al acabar con dicho botón, la compañía se encontró con un problema. Muchos rumores apuntaban que Samsung estaba preparando un sensor bajo el propio cristal de la pantalla. No llegaron a tiempo (si es cierto este rumor), así que tuvieron que llevar este sensor a la parte trasera.
Hasta ahí, todo normal. Pero lo cierto es que la compañía quiso primar la armonía y minimalismo del diseño. Y decidió colocar el lector de huellas en una misma línea junto a la cámara trasera. Bien a nivel de aspecto, pero no en comodidad.
El lector de huellas se sitúa en la misma línea de la cámara trasera y provoca que más de una vez hayamos ensuciado la lente del sensor al ir a presionarlo
De hecho, su posición puede resultar un pequeño quebradero de cabeza al manejar el móvil a una mano. No olvidemos que estamos ante un smartphone grande. Si eres zurdo el sensor queda en el mismo lado que el índice, pero si eres diestro tienes que cruzar con el dedo de lado a lado del teléfono. Y eso significa que más de una y de dos veces terminarás por palpar y ensuciar el sensor de la cámara al buscar el lector.
Pantalla sin bordes
Pantalla infinita, panel con tecnología Super AMOLED y formato de 6,2 pulgadas, resolución WQHD+ de 2.960 x 1.440 píxeles
Sin duda, uno de los grandes atractivos de esta review del Samsung Galaxy S8+. Una enorme pantalla de 6,2 pulgadas que ocupa casi todo el frontal del teléfono. La pantalla está curvada a los dos lados y tanto el marco superior como el inferior se quedan en una fina línea. El primer impacto que genera esta pantalla es espectacular, con una sensación inmersiva difícil de igualar por cualquier otro móvil del mercado.
No obstante, hay que tener en cuenta que esta pantalla tiene una particularidad. Al reducir los marcos superior e inferior, también se ha optado por un formato panorámico 18:9. Dicho formato está a medio camino entre los 16:9 de la mayoría de las pantallas y el formato ultrapanorámico de 21:9 en el que se graban las películas.
A nivel práctico, eso significa que tanto en las aplicaciones que no son propias de Samsung como en los juegos se tiene que convivir con dos franjas en negro que reducen ligeramente el espacio útil. Se puede elegir que los juegos se muestren a pantalla completa, pero corremos el peligro de que no funcionen bien.
La sensación inmersiva de la pantalla del Samsung Galaxy S8+ es espectactular, sin rival en el mercado
En cuanto a los vídeos, la cosa cambia. En este caso, Samsung nos ofrece la opción de introducir zoom en la imagen para disfrutar del vídeo a toda pantalla. El problema es que se pierde visión de los bordes de la parte superior e inferior. No es mucho, pero si estás viendo una película o una serie con subtítulos probablemente perderás una línea del texto.
De momento, la compañía coreana no se plantea llegar a acuerdos para producir contenido en este formato. Pero esto podría cambiar si las “pantallas infinitas” se extienden entre los móviles de gama alta. Ahora mismo son tres los modelos que apuestan por los 18:9. El propio Samsung Galaxy S8+, el Samsung Galaxy S8 y el LG G6 (este con pantalla de 5,7 pulgadas).
Review en vídeo del LG G6, el otro móvil con pantalla infinita
Tecnología Super AMOLED
En cuanto a la tecnología del propio panel, no hay sorpresas. Samsung vuelve a apostar por Super AMOLED. Una tecnología con la que se consiguen colores más vibrantes y negros más profundos. Y todo ello con un gasto de energía inferior a la de los paneles LCD.
En cuanto a la resolución, sube a la WQHD+ de 2.960 x 1.440 píxeles. Eso se traduce en una densidad de 529 pixeles por pulgada, con un nivel de detalle muy alto en los contenidos. De hecho, para ahorrar energía el panel se muestra por defecto con resolución Full HD+ de 2.220 x 1.080 píxeles.
Podemos cambiar la resolución de la pantalla del Samsung Galaxy S8+ según queramos más detalle o mayor autonomía
Lo cierto es que la experiencia con este panel es muy buena, a la altura de lo que venimos disfrutando en los móviles estrella de Samsung de los últimos tiempos. Su nivel de brillo es alto, suficiente para ver sin problemas los contenidos del smartphone bajo la luz directa del sol. Los colores pueden pecar de algo de saturación, pero potencian la experiencia de cine y vídeo.
Sea como fuere, tenemos varias opciones para cambiar el modo en el que se muestran los colores. Desde el modo de pantalla adaptivo a un modo orientado a cine o a foto. También existe un modo básico o la opción de hacer un balance de color personalizado según nuestros gustos.
Funciones Edge de la pantalla curva
Aunque pasan más desapercibidas por los cambios que ha experimentado el Samsung Galaxy S8+, la compañía sigue manteniendo el conjunto de apps específicas para aprovechar la pantalla curva. Estas aparecen por defecto en una fina franja de color azul en el lado derecho de la pantalla que se abre cuando arrastramos el dedo.
Entre las características que podemos aprovechar, accesos directos a contactos, a las apps más usadas, información deportiva de nuestros equipos favoritos o de las finanzas.
Aplicaciones propias de Samsung
Asistente inteligente Bixby, Samsung Health, Always On Display, Samsung DeX, Samsung Pay
El Samsung Galaxy S8+ llega con la versión Android 7.0. Esta versión del sistema de Google nos trae algunas mejoras interesantes como, por ejemplo, el sistema Doze para reducir el consumo de energía cuando tenemos el móvil en estado de reposo. Además, también se incluye la función de multipantalla de forma nativa. Aunque, todo hay que decirlo, se trata de una característica que Samsung lleva trayendo a sus móviles desde hace tiempo.
Pero, claro, el gran atractivo a nivel de software está en el propio ecosistema de apps y funciones de Samsung.
Ya hemos hablado antes de las funciones Edge en el apartado de la pantalla, así que no las vamos a repetir aquí. Una de las opciones que nos han llamado mucho la atención en el uso habitual del móvil son los menús que se abren cuando presionamos fuertemente sobre el icono de una app. Al más puro estilo Windows, veremos aparecer un menú desplegable con varias opciones. Dichas opciones son:
-Elegir varios elementos
-Añadir acceso directo al inicio
-Desactivar o desinstalar
-Info de la aplicación
Otro de los apartados que nos ha gustado es el del panel de notificaciones. Resulta muy útil que al arrastrar ligeramente con el dedo de arriba hacia debajo de la pantalla nos aparecen los cuatro primeros iconos de este menú. En cualquier momento podemos ampliar o reducir esta zona con un movimiento de arrastre.
También llama la atención la nueva disposición de la carpeta de aplicaciones instaladas. Para acceder a ellas hay que arrastrar el panel hacia abajo desde la pantalla principal. Después, para moverse entre las apps se mueve a izquierda y derecha la pantalla.
Se trata de un acercamiento interesante, pero cuesta acostumbrarse a él (de hecho, varias semanas después seguimos sin hacernos del todo con esta disposición). En el caso de que te ocurra lo mismo, se puede volver a colocar un botón para abrir las apps a través de la configuración del Samsung Galaxy S8+.
Bixby, el nuevo rival para Siri o Cortana
Bixby es la solución de Samsung para una demanda cada vez mayor de asistentes inteligentes. Una herramienta que está en sus primeros pasos y que tiene una interfaz similar a la de Google Now, con el uso de tarjetas con información relevante.
De momento todavía no están disponibles los comandos de voz en español. Pero eso no significa que esta herramienta sea inservible. De hecho, ya se encuentra integrada dentro de la cámara del Samsung Galaxy S8+.
El asistente Bixby tiene una herramienta integrada con la cámara del Samsung Galaxy S8+
El icono denominado Bixby Vision nos permite analizar diferentes objetos o lugares que se enfoquen con la cámara. Una vez los analice, podremos llevar a cabo una búsqueda de imágenes similares (a través de Pinterest), una búsqueda del lugar (por medio de Foursquare) o buscar un objeto por medio de una tienda online (de momento, en España solo Amazon).
Además, dentro de su interfaz con tarjetas se nos muestra información recogida de diversas apps. Información sobre el tiempo, las últimas fotos que llegan a la galería, las recomendaciones de Spotify, notificaciones de LinkedIn”¦ Todavía le queda un largo camino por delante, pero este asistente comienza a tomar cuerpo.
Always On Display
Vuelve la pantalla siempre encendida. Y con mejoras. Esta característica parece haberse convertido en tónica habitual en los móviles de la coreana, tanto la familia Samsung Galaxy A 2017 como los nuevos Samsung Galaxy S8.
Si todavía no conoces esta herramienta, su función es la de enseñar información básica del teléfono con la pantalla apagada. Esto incluye la hora, las últimas notificaciones (en forma de icono) o datos del calendario. La clave está en que se ha conseguido reducir el consumo de energía de esta pantalla de modo que no tenga un impacto fuerte en la autonomía del terminal.
Una de las novedades más interesantes que ha introducido Samsung es la opción de ponerle color al texto y los iconos de las notificaciones. De hecho, hasta podemos introducir en pequeño una foto que tengamos guardada en la galería.
Samsung Health
Tampoco podía faltar la app para ponerse en forma de Samsung. Una herramienta muy completa que se aprovecha de los diferentes sensores del Samsung Galaxy S8+. Empezando por su podómetro para contar los pasos. Tanto andando como a la carrera. Y siguiendo por sensores más potentes como los de pulso o medidor de estrés. De hecho, incluso se puede medir el nivel de oxígeno en sangre.
Al margen de este completo conjunto de sensores, Samsung Health tiene como principal objetivo el ayudarnos a tener una vida menos sedentaria. Para ello, se fija un objetivo de actividad diaria o programas de entrenamiento personalizado. Un pequeño gimnasio en el bolsillo.
Samsung Connect
Esta es la app con la que Samsung se quiere meter de lleno en el mundo del hogar conectado. Samsung Connect permite conectar distintos dispositivos inteligentes que sean compatibles con esta plataforma. Entre sus funciones principales, la de apagar y encender diversos electrodomésticos o las luces de la casa, programar los dispositivos o controlar distintos aspectos de cada aparato.
Carpeta Segura
Una de las grandes bazas de Samsung para potenciar el uso del Samsung Galaxy S8+ en empresas, junto a sus sistemas de reconocimiento y Samsung DeX (de los que hablaremos después).
Carpeta Segura es la evolución de Samsung KNOX. Un espacio seguro en el que guardar nuestros archivos y fotos privadas. Además, también se pueden almacenar ahí las apps de las que no queremos dejar registro. Uno de los grandes avances de la Carpeta Segura es la facilidad con la que se pueden compartir los archivos guardados en este espacio sin necesidad de dar pasos intermedios.
Precisamente, ese era uno de los puntos más pesados de usar KNOX. Ahora, mover documentos o fotos entre este espacio y las apps principales resulta más sencillo y rápido.
Tres opciones avanzadas de seguridad
Como un espía. Así te hace sentir el Samsung Galaxy S8+. Un móvil con hasta tres métodos diferentes para reconocerte más allá de la contraseña, el PIN o el patrón.
El primero de ellos es compartido con la mayor parte de los móviles de gama media y alta del mercado. Hablamos del lector de huellas. Aunque su funcionamiento es bueno, pierde algo de brillo por su colocación junto a la cámara trasera.
El Samsung Galaxy S8+ cuenta con lector de huellas, reconocimiento del iris y reconocimiento de los rasgos faciales
Y ahora entramos en materia. El segundo de los métodos es el reconocimiento de iris. Una novedad que ya llegó al Samsung Galaxy Note 7. Este es el sistema de seguridad por excelencia del Samsung Galaxy S8+. Tanto por su rapidez (el reconocimiento es prácticamente instantáneo) como por el propio grado de seguridad. Y es que este método es más difícil de hackear que un lector de huellas.
A pesar de que este sistema ya resulta muy completo, la compañía coreana ha incluido un tercer método. A medio camino entre el lector de iris y el reconocimiento de huellas. Hablamos del reconocimiento del rostro. Esta herramienta es más ágil porque no requiere que deslicemos el dedo en la pantalla de bloqueo para activarla. Pero también es menos seguro y fácil de penetrar.
Samsung DeX
Se trata del accesorio de Samsung que convierte al Samsung Galaxy S8+ en un ordenador de sobremesa. Este hub incorpora una salida HDMI y puertos USB para que conectemos el móvil a un monitor, un teclado y un ratón. Una vez en la base, tras unos segundos se carga una pantalla de escritorio con un buen puñado de funciones propias de un PC.
Eso sí, solo una parte de las apps que usemos en Samsung DeX podrán aparecer a pantalla completa. Entre ellas, las más interesantes son probablemente las apps de Word, Excel y PowerPoint. En caso de que no estén adaptadas, las apps aparecerán en una ventana en pequeño con formato móvil. En cualquier momento podemos apartar el Samsung Galaxy S8+ de la base y usarlo de manera normal.
Nosotros pudimos ver en acción Samsung DeX durante un rato, pero tenemos ganas de poder probarlo en profundidad para tener una idea más formada sobre esta herramienta. Lo cierto es que el primer impacto fue bastante positivo, con un funcionamiento fluido y bastantes alternativas.
Samsung Pay
Otra de las apps en las que Samsung lleva poniendo mucho esfuerzo desde hace ya un tiempo. Los pagos por el móvil ya no son cosa del futuro, pero es cierto que todavía le queda camino por recorrer. En el caso de Samsung Pay, su principal problema es que tenemos que registrar los datos de una tarjeta bancaria en la app antes de poder usarlo. Y, hasta el momento, el número de bancos compatibles en España es bastante limitado.
Aplicaciones de Microsoft
No hay duda de que el acuerdo la firma coreana y Microsoft ha sido prolífico. La opción de disfrutar gratis de Word o Excel en el móvil puede darnos mucho juego. Y es que la conversión de estas apps a formato móvil se ha hecho muy bien, con una interfaz agradable y muchas opciones disponibles. Además, ya hemos hablado de que también se convierten en apps estrella si vamos a aprovechar Samsung DeX.
Potencia y más potencia
Procesador propio de Samsung Exynos, memoria RAM de 4 GB, memoria interna de 64 GB
El Samsung Galaxy S8+ cumple con lo que se espera de un smartphone de primera línea. Un rendimiento fluido y potencia para correr cualquiera de las apps y juegos de la plataforma Android.
Para ello, cuenta con un procesador propio Samsung Exynos de ocho núcleos. Este procesador está fabricado en 10 nanómetros, por lo que tiene un gasto energético menor (gracias a ello, mejora la autonomía). Eso no significa que perdamos potencia, ya que este chip tiene cuatro núcleos a 2,3 GHz y los otros cuatro a 1,7 GHz.
Su rendimiento en juegos y aplicaciones pesadas es muy bueno, sin que se ralentice en ningún momento el apartado gráfico. Como suele ser habitual, lo hemos puesto a prueba a través del juego Asphalt 8: Airborne, uno de los más exigentes de la plataforma Android.
Tampoco se nota en ningún momento que la memoria RAM sea corta. 4 GB da más que suficiente para un uso exigente del universo de Android, a pesar de que ya hay un buen puñado de móviles que nos ofrecen 6 GB.
En cuanto al almacenamiento interno, se sitúa en los 64 GB. Un espacio que se puede ampliar a través de una tarjeta de memoria microSD. Aquí hemos de hacer una puntualización. Para un uso normal del móvil, es una capacidad más que suficiente. Pero nos hubiera gustado que Samsung apostara por los 128 GB en su terminal más potente hasta la fecha. Tanto por los 910 euros que cuesta comprar el Samsung Galaxy S8+, como por su vida alternativa como PC de sobremesa al comprar el Samsung DeX (150 euros).
Sea como fuere, además de la ampliación a través de una tarjeta microSD también tenemos otras opciones de almacenamiento online como Google Drive, Dropbox o OneDrive. Precisamente, esta herramienta de Microsoft está instalada por defecto en el terminal.
Audio de calidad y auriculares AKG
Altavoz pequeño pero potente, sistema de audio de alta fidelidad, auriculares AKG incluidos
El Samsung Galaxy S8+ nos ha dejado un buen sabor de boca en su apartado de audio. Es cierto que no llega al nivel del ZTE Axon 7 con sus altavoces estéreo. Pero su pequeño altavoz en la parte inferior sorprende tanto por su aceptable calidad de audio como, sobre todo, por su potencia. Esta potencia nos permitirá enseñar sin problemas a nuestros amigos el último vídeo de YouTube que nos ha hecho reír. En mitad de la calle y con ruido ambiente. Sin necesidad de echar mano de los auriculares.
Claro que, hablando de auriculares, Samsung ha hecho una apuesta por ofrecer un plus con sus equipos estrella Samsung Galaxy S8 y Samsung Galaxy S8+. Estos equipos vienen de serie con unos auriculares de la marca AKG de regalo.
Y no son cualquier cosa. Estos auriculares tienen un coste por separado de 100 euros, lo que nos da una idea de la calidad que alcanzan. Gracias a ellos se puede reproducir en el Samsung Galaxy S8+ sonido de alta fidelidad de 32 bits.
Conexiones de primera
En el campo de las conexiones, no hay mucha sorpresa. El Samsung Galaxy S8+ viene equipado con lo mejor que puede ofrecernos el mercado. Desde su conexión USB de tipo C para la carga y la transmisión de archivos. Pasando por ser uno de los primeros móviles del mercado con conexión Bluetooth 5.0. Esta nueva versión duplica la velocidad de transferencia de datos y además mejora a la hora de evitar interferencias con otros dispositivos.
También es más rápido a la hora de descargar archivos a través de WiFi (hasta un 20%), gracias a su soporte para 1024-QAM. Claro que para aprovechar esta mejora es necesario tener un router compatible, por lo que se trata de una apuesta más de futuro que de presente. Otra de las conexiones que no podía faltar es NFC, que facilita el pago a través del móvil.
Autonomía para un día
Batería de 3,500 miliamperios, 15 horas de navegación WiFi, sistema de carga rápida
El Samsung Galaxy S8+ incorpora una batería de 3.500 miliamperios. Una capacidad que nos había dejado alguna que otra duda, si tenemos en cuenta que tiene que hacer frente a una enorme pantalla de 6,2 pulgadas de gran calidad. O a la potencia de su procesador.
Crear un móvil realmente fino y delgado tiene sus sacrificios, pero Samsung ha conseguido un buen equilibrio con su smartphone estrella. Después de haberlo usado como móvil habitual durante estas semanas, podemos afirmar que no es un equipo para tenerlo dos días sin cargar. En este punto, se aleja de la tendencia de los fabricantes de crear móviles capaces de resistir el día entero sin necesidad de buscar un enchufe.
De hecho, la propia Samsung ha dado pasos de gigante en este punto con modelos como el Samsung Galaxy A5 2017. Aún así, el Samsung Galaxy S8+ es capaz de aguantar sin problemas una jornada intensiva de uso.
Según los datos oficiales de la propia compañía, este terminal aguanta:
-Hasta 50 horas de música
-Hasta 18 horas de reproducción de vídeo
-14 horas de conversación
-15 horas de navegación WiFi o 4G
Sea como fuere, no podemos terminar con este apartado sin hablar del sistema de carga rápida del móvil. Este sistema nos permite recuperar hasta un 10% de carga con apenas cinco minutos enchufado. Toda una garantía para poder resistir si solo tenemos acceso a un enchufe unos pocos minutos antes de seguir camino.
Muchas opciones para comprar accesorios del Samsung Galaxy S8+
Fundas de todo tipo, Samsung DeX, gafas de realidad virtual, cámara 360…
Ya hemos hablado de Samsung DeX, la base para convertir al Samsung Galaxy S8+ en un verdadero ordenador de sobremesa. Pero hay mucho más. La compañía coreana ha querido completar la experiencia del S8 con un enorme puñado de accesorios para comprar.
Así, por ejemplo, contamos con varios tipos de fundas diseñadas para el móvil. En concreto, de siete fundas diferentes. Fundas con un panel LED para mostrar la hora, con funda para mantener el móvil erguido a la hora de ver películas, con un teclado a lo BlackBerry…
Además, tampoco podían faltar las gafas de realidad Samsung Gear VR. Estas gafas nos adentran en una experiencia mucho más inmersiva. O un cargador inalámbrico para poder cargar el móvil sin necesidad de enchufarlo por cable.
Comprar accesorios del Samsung Galaxy S8+ en la tienda de la marca
Cámara principal con Dual Pixel
Cámara principal con características similares a la del Samsung Galaxy S7 edge, muchos añadidos de software, gran modo HDR, vídeo a 4K, cámara para selfies de 8 megapíxeles
El apartado de la cámara es el que menos cambio ha experimentado. Por lo menos, la cámara principal. Y es que la compañía se ha decidido a mantener un sensor muy similar al que veíamos el año pasado en el Samsung Galaxy S7 y Samsung Galaxy S7 edge. Eso no es necesariamente malo, aunque los más aficionados a la fotografía echarán en falta una mayor evolución.
Con todo, sigue siendo una de las mejores cámaras que encontraremos en el mercado. Con un sensor Dual Pixel con resolución de 12 megapíxeles. Esta tecnología de doble sensor se traduce a nivel práctico en un enfoque prácticamente instantáneo. Pero, además, el rendimiento de esta cámara en condiciones de poca luz es muy bueno, gracias a su apertura de f/1.7.
No podía faltar la estabilización óptica de imagen para evitar que nuestras fotos salgan movidas. Y estabilización también a la hora de grabar vídeo. Hablando de vídeo, se puede grabar escenas a una resolución máxima 4K a 60 fps. Hay que tener en cuenta que las propias limitaciones del sistema de archivos provocará que nuestros vídeos en esta resolución tengan un tiempo máximo de 10 minutos.
Hay que destacar el excelente modo HDR de la cámara del Samsung Galaxy S8+. Por defecto, contamos con HDR automático, que se activa en las escenas propicias (como por ejemplo, durante un atardecer). El modo está muy conseguido, con colores muy vibrantes pero manteniendo una sensación de naturalidad que no logran otras cámaras.
Donde sí sufre más la cámara del Samsung Galaxy S8+ es a la hora de fotografiar detalles muy de cerca, aunque es una dificultad que experimentan la mayoría de cámaras en smartphones. Ya hemos dicho que el doble sensor de esta cámara es muy luminoso, algo que se nota cuando la enfrentamos a fotos nocturnas. En cualquier caso, contamos con un flash LED de doble tono que cumple con creces.
Muchos añadidos de software
Aunque no haya cambios a nivel de hardware en la cámara principal, sí que contamos con un buen puñado de añadidos en la interfaz misma de la cámara. Empezando por Bixby Vision, que aparece con solo presionar sobre el icono del ojo en la pantalla. Esta función también se extiende una vez hemos realizado la foto. Una ventaja sí, por ejemplo, volvemos a ver una foto antigua y no sabemos bien dónde la hicimos.
Por otra parte, también ha llegado la fiebre de Snapchat a la cámara del Samsung Galaxy S8+. Y cuando decimos Snapchat también nos referimos a Instagram, Facebook o WhatsApp. Dentro de la interfaz aparece un nuevo icono con máscaras. Estas máscaras identifican nuestro rostro y nos permiten disfrazarnos de focas, conejos o perros, entre otros. Un añadido divertido que apreciarán sobre todo los más jóvenes.
De hecho, también hay opción de usar diferentes stickers para colocarlos en la imagen resultante.
También contamos con varios añadidos para mejorar las fotos en las que aparece nuestro rostro. Entre ellas herramientas como un corrector del tono de la piel, una opción para hacer los ojos más grandes o para adelgazar la cara.
Tampoco podía faltar el apartado de los filtros para darle a nuestras fotos un toque más personal. El filtro en blanco y negro está bastante conseguido, pero es cierto que no se llega al mismo nivel de calidad que en el caso de sensores monocromo como los del Huawei P10 o Honor 8 Pro. La verdad es que sí se llega a echar en falta.
Lo que sí disfrutamos más son otros filtros como memoria y clásico. En total, tenemos más de treinta filtros distintos entre los que ya aparecen con la propia cámara y los que podemos descargar para completar la experiencia.
Modos de la cámara principal
Los modos de la cámara del Samsung Galaxy S8+ ascienden a ocho preinstalados y otros cinco que se pueden descargar de la tienda de Samsung. Estos ocho modos son:
AUTO: Es la propia cámara la que decide los valores para realizar una foto perfecta.
PRO: El usuario tiene un mayor control sobre la cámara y aspectos como la exposición a la luz, el tipo de enfoque o el balance de blancos.
PANORíMICA: Un modo clásico que no puede faltar en cualquier cámara.
ENFOQUE SELECTIVO: En este modo se enfoca un objeto a unos cincuenta centímetros de la cámara y se toma la foto. Después, se puede jugar con efectos de profundidad de campo para resaltar el objeto en primer plano o el fondo.
CíMARA LENTA: Podemos grabar vídeos para luego reproducirlos a cámara lenta (con hasta 1/8 de la velocidad original).
CíMARA RíPIDA: En este caso, se acelera la escena. Aquí hemos echado en falta más opciones de control.
COMIDA: El modo que (casi) todos los amantes de Instagram usarán. En este caso se resalta la zona del plato de comida que fotografiamos.
DISPARO VIRTUAL: Para crear una imagen en 3D de un objeto.
Además, podemos descargar otros cinco sin coste adicional:
GIF ANIMADO: Con el que se crea un GIF. Lo cierto es que tenemos una buena herramienta de edición.
SPORTS SHOT: Para fotos en movimiento.
BEAUTY FACE: Un complemento a las herramientas de las que ya hemos hablado para mejorar la apariencia de nuestro rostro.
REAR CAM SELFIE: Un modo para detectar el rostro cuando estemos usando la cámara principal y tomar un selfie.
DUAL CAMERA: Un modo muy curioso que nos permite usar de forma simultánea la cámara delantera y la trasera.
Cámara para selfies
Aunque la cámara principal no ha experimentado cambios, sí lo ha hecho la cámara delantera para selfies. En este caso, el sensor pasa de los 5 megapíxeles de resolución a los 8 megapíxeles. Además, con una apertura de f/1.7, lo que es toda una garantía a la hora de realizar fotos en entornos con poca luz. También nos ha gustado mucho el hecho de poder grabar vídeo en calidad QHD de 2.560 x 1.440 píxeles. Lo cierto es que se trata de una cámara con mucho potencial, con varios modos para exprimir todo el jugo de este sensor:
SELFIE: El modo básico para esta cámara
SELFIE PANORíMICO: Una opción que resulta algo difícil de poner en práctica ya que sigue la misma mecánica que el modo panorámico. Eso se traduce en que tenemos que mantener el brazo firme a la hora de mover la cámara y mantener la expresión deseada al mismo tiempo.
ENFOQUE SELECTIVO: La misma idea que el modo de la cámara principal.
DISPARO VIRTUAL
GIF ANIMADO: Los selfies, todavía más divertidos.
Precio y conclusiones
Precio de 910 euros, diseño muy fino y ligero, pantalla infinita de 6,2 pulgadas
El Samsung Galaxy S8+ se puede comprar en tiendas por un precio oficial de 910 euros. Aunque ya se pueden encontrar ofertas en portales como Amazon para conseguirlo por algunos euros menos.
[amazon_link asins=’B06XX6F5XY’ template=’ProductCarousel’ store=’tuexpertocom-21′ marketplace=’ES’ link_id=’89b3b534-37ba-11e7-bbde-b76b9ef913a4′]
En definitiva, nos encontramos ante uno de los smartphones del año. Un equipo que muestra el nuevo camino que se abre con móviles de pantalla infinita. Esto es, móviles con casi todo el frontal ocupando la pantalla. El Samsung Galaxy S8+ tiene todos los ingredientes para enamorar, como su diseño fino e increíblemente ligero, el panel brillante de 6,2 pulgadas y un conjunto técnico muy potente. Claro que esta receta también tiene un importante pero: su precio de 910 euros no está al alcance de cualquiera. Si tienes el dinero para invertir, el S8+ es un equipo que no decepciona.
LO MEJOR
-Su diseño tan ligero
-La espectacularidad de su pantalla infinita
-Un conjunto técnico muy potente
-Cuenta con tres sistemas de seguridad avanzados
-El completo ecosistema de aplicaciones y accesorios
PUEDE MEJORAR
-La ubicación del lector de huellas
-Su precio tope de gama