Gracias al móvil, las personas que somos un poco despistadas o que no tenemos muy buen sentido del orientación ya no nos perdemos. Puede parecer una frase un tanto chistosa pero es la pura realidad. Ya no más preguntar a nadie por una calle cuando vamos caminando para luego olvidar el mensaje a los segundos; ya no más dar vueltas y vueltas buscando un camino para luego tener nuestro destino a un palmo de narices. Gracias a aplicaciones como Google Maps o Waze, ambas sospechosas, ahora, de provocar atascos en lugares en los que no había, podemos llegar de un punto A a un punto B sin complicaciones, en poco tiempo y ahorrándonos tiempo y esfuerzo.
¿Y cómo lo consiguen? Gracias a un sistema de posicionamiento llamado GPS que, con el tiempo y los usos de distintos aparatos, ha ido derivando en otros más sofisticados y mejorados como el A-GPS o en otros similares como el GLONASS, Seguro que has visto estas siglas en las especificaciones de tu móvil y no sabes muy bien a qué se refieren. Pues bien, aquí vamos a resolver tus dudas. ¿A qué llamamos GPS, A-GPS y GLONASS?
GPS
Gracias al GPS o, lo que es lo mismo, ‘Global Positioning System‘, Sistema de Posicionamiento Global, se puede determinar la localización de una persona u objeto en un espacio determinado con una precision de hasta centímetros (unos metros de diferencia es lo habitual). Fue un sistema que desarrolló, en 1973, el Departamento de Defensa de los Estados Unidos con objetivos estratégicos. Para que un objeto o persona sea localizado por este sistema han de localizarlo cuatro o más satélites, utilizando para ello la ‘trilateración’. Sin entrar en demasiados tecnicismos matemáticos, la trilateración es un método matemático por el cual podemos saber la posición de un objeto mediante tres puntos de referencia. Los puntos de referencia, en este caso, serían los satélites encargados de enviar la señal al receptor GPS.
En la década de los 80, el Departamento de Defensa liberó el GPS para que pudiese valerse de él la sociedad civil. 15 años más tarde, se utilizan en total, alrededor del mundo, 31 satélites. Los datos que arroja el GPS pueden no ser los más fiables, por lo que se desarrollo el A-GPS. A continuación vemos en qué consiste esa evolución.
A-GPS
El GPS Asistido o A-GPS no es más que, literalmente, una mejora de la conectividad GPS. Para ello usa la red de telefonía terrestre. En las ciudades hay numerosos obstáculos que impiden una buena transmisión entre los satélites y los dispositivos, como los edificios. Es aquí donde entra el A-GPS. Este sistema de posicionamiento utiliza cuatro antenas de telefonía que va actualizando, en tiempo real, los datos de trilateración de la posición del sujeto. Además ofrece información adicional que el GPS no era capaz, como la predicción del tiempo. ¿Cuál es la desventaja del A-GPS frente al GPS? Que consume datos de nuestra tarifa y que el GPS funciona mejor en el campo y en zonas descubiertas.
GLONASS
Podríamos definir el GLONASS como el GPS ruso. El ‘Sistema de Navegación Global por Satélite’ creado en 1976 por la extinta Unión Soviética, siendo sus primeros satélites lanzados en 1982, entrando en funcionamiento en 1993. Actualmente tiene 24 satélites en órbita que ocupan un territorio global.
