Este año la conectividad 5G ha estado más presente que nunca en ferias tecnológicas, noticias y operadoras. Todo parece indicar que estamos ante la próxima revolución en cuanto a conectividad se refiere. Sin embargo, esto acaba de empezar. Aunque algún operador ya ha lanzado su red 5G a nivel comercial, son solo los primeros pasos. Pero claro, para poder utilizar una red 5G necesitamos móviles o dispositivos compatibles. Y Samsung ha sido uno de los primeros en apostar por este tecnología. Tanto es así que ha lanzado un Samsung Galaxy S10 5G, que hemos tenido ocasión de probar durante algunas semanas.
Puede que al leer el nombre hayáis pensado que se trata, simplemente, de un Galaxy S10 al que le han añadido un modem 5G. Si os soy sincero, yo también lo pensé. Pero estaba equivocado, el Samsung Galaxy S10 5G es mucho más. De hecho, podría decir que es el mejor móvil que ha hecho Samsung hasta ahora (a falta de probar el Samsung Galaxy Note 10). Tiene la pantalla más grande de la gama S10, la batería más grande de la gama S10, la mejor cámara de la gama S10 y un diseño espectacular. Todo ello con un precio bastante alto, no os voy a mentir. Lo vende en exclusiva el operador Vodafone con un precio de 1.080 euros. Tras pasar algunas semanas con este magnífico móvil, os cuento qué me ha parecido.
Ficha técnica Samsung Galaxy S10 5G
Pantalla | Dynamic AMOLED de 6.7 pulgadas, resolución Quad HD+ de 3.040 x 1.440 píxeles, compatible con HDR10+ |
Cámara principal | Cuatro sensores: · Principal de 12 MP con apertura variable f/1.5-f/2.4, autoenfoque Dual Pixel, OIS · Ultra gran angular de 16 MP con apertura f/2.2 y campo de visión de 123º · Teleobjetivo de 12 MP con apertura f/2.4, zoom óptico 2x, OIS · Sensor tipo ToF 3D Grabación de vídeo hasta 4K 60fps y cámara lenta 960fps en HD |
Cámara para selfies | Doble sensor: · Principal de 10 MP con apertura f/1.9, autoenfoque · Sensor de profundidad RGB de 8 MP con apertura f/2.2 |
Memoria interna | 256 o 512 GB |
Ampliación | No |
Procesador y memoria RAM | Exynos 9820 de Samsung, 8 GB de memoria RAM |
Batería | 4.500 mAh con carga rápida, carga inalámbrica y carga inversa |
Sistema operativo | Android + One UI |
Conexiones | 5G, WiFi 802.11ax, Bluetooth 5.0, NFC, GPS, USB Tipo C, jack de 3.5 mm |
SIM | Dual Nano SIM |
Diseño | Metal y cristal, colores: plata y negro |
Dimensiones | 162,6 x 77,1 x 7,94 mm, 198 gramos |
Funciones destacadas | Lector de huellas en pantalla Reconocimiento facial |
Fecha de lanzamiento | Disponible |
Precio | Desde 1.080 euros |
Un diseño que enamora a primera vista
Aunque ahora la gran mayoría de móviles cuentan con un diseño que mezcla cristal y metal, lo cierto es que los terminales de gama alta siguen teniendo algo especial. Detalles, sensación en la mano, acabados, empaque o quizás una mezcla de todo ello. No sabría explicar qué es exactamente, pero todo usuario se da cuenta cuando coge un terminal de gama alta.
Esto es precisamente lo que transmite el Samsung Galaxy S10 5G. Luce un diseño realmente bonito, con pantalla curvada a los lados, marcos metálicos que se fusionan a la perfección con el cristal y trasera de espejo, no apta para maniáticos de la limpieza. A pesar de sus casi 200 gramos de peso, es un terminal cómodo de utilizar y llevar. Quizás ayude su grosor de solo 7.9 mm, algo que últimamente muy pocos fabricantes cuidan.
La parte delantera es prácticamente todo pantalla. Para colocar la cámara frontal tenemos un agujero situado en la parte superior derecha. Diría que es ligeramente más grande que el del S10+. Si bien es cierto que llama bastante la atención, también lo es que a los pocos días dejas de fijarte en él.
Por lo demás, los bordes superior e inferior están bastante ajustados. Especialmente el superior, que a pesar de medir poco milímetros tiene sitio para un auricular que además hace las veces de altavoz secundario.
El marco inferior es algo más grueso que el superior, lo cual facilita sujetar el móvil en algunas posiciones. Por ejemplo, cuando estamos tumbados. Algo que, aunque parezca una tontería, no es tarea sencilla. Debéis recordar que la pantalla es curvada, lo que hace que podamos tocarla sin querer al sujetar el terminal.
En cuanto a botones físicos, tenemos el de volumen y el del acceso directo a Bixby en el lado izquierdo. Es en el lado derecho donde encontramos el botón de encendido. La bandeja para la tarjeta se sitúa en la parte superior, mientras que en la inferior tenemos un puerto USB-C y el jack de 3.5 mm. Porque sí, el Samsung Galaxy S10 5G se mantiene la conexión para auriculares.
La parte trasera, como adelantaba antes, es de cristal con efecto espejo. Al menos en el modelo en color plata, que es el que he probado. Es muy llamativa, pero es prácticamente imposible tenerla más o menos limpia. El sistema fotográfico está colocado en la parte central y en posición horizontal. Tenemos tantos componentes en el módulo de las cámaras que prácticamente llega de un extremo a otro del móvil.
No es una pantalla cualquiera
En muchos de mis análisis incluyo la pantalla en el apartado de diseño. Pero es que la pantalla del Samsung Galaxy S10 5G se merece un apartado propio. Lo he comentado otras veces y lo vuelvo a repetir, las pantallas de Samsung tienen algo especial.
El S10 5G cuenta con el panel más grande de la serie S10. Concretamente tenemos un Dynamic AMOLED de 6.7 pulgadas con resolución Quad HD+ de 3.040 x 1.440 píxeles. Además, es compatible con la reproducción de imágenes HDR10+.
La calidad de la pantalla, una vez más, es alucinante. Los colores, el brillo, la definición, la nitidez, todo es casi perfecto. Desde ajustes podemos cambiar la resolución, activar el filtro de luz azul e incluso un modo noche. Además, este año Samsung ha optado por unos colores menos saturados por defecto. Pero si os gusta tener un poco más de «punch», podéis cambiar al modo de pantalla Intenso.
Vale la pena destacar el brillo que ofrece este terminal. Según datos del fabricante, supera los 1.000 nits cuando es necesario, poniéndose así a la altura de algunos televisores QLED de Samsung. Es decir, no tendremos ningún tipo de problema en exteriores, ni siquiera con la luz del sol incidiendo en la pantalla de forma directa.
Puede con todo
Hasta ahora hemos visto un ligero cambio de diseño y la incorporación de una pantalla de mayor tamaño. Pero no todo es nuevo en el Samsung Galaxy S10 5G. El conjunto técnico que utiliza este dispositivo es el mismo que vimos en el S10+.
Hablo del procesador Exynos 9820 de Samsung. Un chip que viene acompañado por 8 GB de memoria RAM y 256 GB de almacenamiento interno. También tenemos la posibilidad de adquirir una versión con 512 GB de almacenamiento. Son dos capacidades generosas, pero debemos tener en cuenta que no tenemos opción de ampliación.
En cuanto al rendimiento del terminal, como imaginaréis, es excepcional. Cualquier aplicación responde rápido, sin ningún tipo de lag por muchas apps que tengamos en la multitarea. Todos los juegos cargan rápido y funcionan a las mil maravillas.
Puede que en los test los móviles con el último chip de Qualcomm obtengan mejores resultados, pero os puedo asegurar que no lo notaréis en el uso diario. Aún así, sobre estas líneas tenéis el resultado que ha obtenido el S10 5G en los principales test de rendimiento.
Si cinco cámaras se te quedan cortas, aquí tienes seis
Conjunto técnico
Cuando Samsung presentó la familia S10 a todos nos extrañó que ni siquiera el S10+ contara con sensor ToF. Más que nada porque el Huawei P30 Pro, su gran rival, sí lo incorpora.
Pues bien, parece que el fabricante coreano se lo reservaba para el Samsung Galaxy S10 5G. Así pues, tenemos el mismo sistema principal de triple cámara que incluye el S10+, junto con el comentado sensor ToF.
Es decir, contamos con un sensor principal de 12 MP con apertura variable f/1.5-f/2.4, autoenfoque Dual Pixel y estabilización óptica (OIS). También con un ultra gran angular de 16 MP con apertura f/2.2 y campo de visión de 123º. El tercero es un teleobjetivo de 12 MP con apertura f/2.4, zoom óptico 2x y estabilización óptica (OIS).
Y el cuarto es el comentado sensor tipo ToF 3D, que ayudará con la profundidad de las fotos en modo retrato. Además, nos permite hacer vídeos con desenfoque. Pero de esto hablaremos más tarde.
Calidad de imagen
Puedo decir, sin miedo a equivocarme, que estamos ante la mejor cámara de Samsung (a falta de probar a fondo el Note 10). Los resultados son excelentes en prácticamente cualquier condición. Tenemos un muy buen contraste y una magnífica exposición, ya que el terminal es capaz de conservar bien los detalles tanto de luces como de sombras.
Por otro lado, el Samsung Galaxy S10 5G destaca por su reproducción del color. Ofrece colores neutros y muy precisos, tanto en exteriores con buena luz como en interiores. Y hablando de interiores, el S10 5G hace un gran trabajo con este tipo de fotografías, reduciendo los artefactos y consiguiendo salvar los contraluces.
En cuanto a la fotografía nocturna o con poca luz, el terminal hace un buen trabajo al controlar el ruido. Sin embargo, el sistema de reducción de ruido hace que tengamos una pérdida de detalle en condiciones de poca luz.
Al igual que su hermano de gama, el Samsung Galaxy S10 5G cuenta con un teleobjetivo. Este nos permite hace zoom 2x de buena calidad, con fotos nítidas y sin ruido. Sin embargo, este zoom de 2 aumentos se queda algo corto si lo comparamos con el impresionante zoom del P30 Pro.
Y si os gusta hacer fotos con el famoso modo Retrato, el S10 5G también os dará muy buenos resultados. El efecto bokeh es muy natural, sin grandes fallos a simple vista. Además, como suele ser habitual, tenemos la función de Enfoque dinámico y la posibilidad de disparar en modo Retrato utilizando el ultra gran angular.
En cuanto al modo Noche, conseguimos imágenes con más detalles, pero también algo más artificiales. Aún así, puede ser un gran aliado para ciertas tomas complicadas. Diría que no está a la altura del que ofrece el P30 Pro, pero ofrece buenos resultados.
Por último, la diferencia de calidad del ultra gran angular y el sensor principal es obvia. Sin embargo, especialmente con buena luz, tendremos un resultado bastante bueno. Además, el ultra gran angular siempre nos proporciona un punto de vista diferente.
Cámara frontal
El Samsung Galaxy S10 5G está equipado con la misma cámara frontal que tiene el S10+. Es decir, tenemos un sensor de 10 megapíxeles con apertura f/1.9 y sistema de autoenfoque. Además, cuenta con un sensor de profundidad de 8 megapíxeles con apertura f/2.2.
La calidad de imagen de la cámara frontal es bastante buena, tanto con buena luz como en interiores o de noche. El modo Retrato también lo hace bastante bien, contando con el famoso Enfoque Dinámico también en la cámara frontal. Por cierto, los efectos de belleza están activados por defecto, algo a tener en cuenta. Pero tranquilos, se pueden desactivar.
Galería de fotos hechas con el Samsung Galaxy S10 5G
El vídeo llevado a otro nivel
Si en fotografía sube ligeramente el nivel de sus hermanos de gama, en vídeo destaca sobre ellos. El S10 5G puede grabar con resolución 4K a 60fps, con una exposición y color excelentes. El terminal consigue un gran equilibrio entre la preservación de detalles y la reducción de ruido, incluso cuando grabamos con poca luz.
Pero la gran diferencia respecto al S10+ es que el S10 5G graba en resolución 4K por defecto. Consigue así vídeos con mucho detalle, al menos en condiciones de buena luz. Cuando grabamos en interiores o de noche el sistema de reducción de ruido hace que parte de ese detalle extra se pierda. Aún así, la compensación entre detalle y ruido que realiza el S10 5G es realmente buena.
Los vídeos que grabamos con el S10 5G muestran un balance de blancos preciso y un color agradable en la mayoría de las condiciones. El enfoque automático es realmente bueno, así como la estabilización que ofrece el terminal. Sin embargo, el rango dinámico no es tan bueno como el que ofrece el iPhone XS Max, por ejemplo. Y eso que la cámara del terminal de Samsung es compatible con la grabación de imágenes HDR10+.
Buena autonomía, aunque sigue sin ser de las mejores
Comentaba al principio que el Samsung Galaxy S10 5G cuenta con la mayor batería de la gama S10. Concretamente está equipado con 4.500 miliamperios, una cifra realmente impresionante sobre el papel. Además, al igual que sus hermanos, dispone de carga rápida (25W), carga inalámbrica (15W) y carga inversa.
Sin ser el móvil con mayor autonomía del mercado, se consigue sin problemas un día completo. Incluso con un uso intensivo, con juegos, fotos, música y navegación, podemos llegar al final del día sin pasar por el enchufe. He llevado siempre la pantalla en la máxima resolución y aún así se consiguen 5 horas sin problemas.
En cuanto a la carga, no es la más rápida del mercado, pero está a un gran nivel. En poco más de una hora tendremos cargada la batería de 0 a 100%. Además, contamos con carga rápida inalámbrica y con carga inversa. Esta última no es demasiado rápida, pero puede ayudarnos a cargar los auriculares u otro móvil compatible.
Conectividad a la última, magnífico sonido y One UI
Estamos llegando al final del análisis y no podía dejar de comentar algunos «extras» que ofrecen un valor añadido. Por ejemplo la conectividad 5G que, aunque no he podido probarla por no tener un operador compatible, nos asegura tener un terminal preparado para el futuro y que nos durará muchos años.
Por otro lado, el Samsung Galaxy S10 5G también cuenta con WiFi 6 (802.11ax). Se trata del último estándar de conectividad WiFi que mejora sustancialmente la velocidad del mismo. Aunque de momento son muy pocos routers los que lo incluyen, nuevamente estaremos preparados para el futuro.
Por lo demás, tiene Bluetooth 5.0 compatible con A2DP, LE y aptX. El puerto de carga es un USB-C, como hemos visto, y mantiene el conector para auriculares. También tenemos chip NFC, imprescindible para el pago móvil.
También vale la pena destacar el sonido que ofrece el terminal. Los dos altavoces incluidos ofrecen un sonido potente y de mucha calidad. Además, como suele ser habitual, incluye auriculares AKG.
Por último, merece una mención especial el sistema One UI, que en este modelo llega a su versión 1.1. La capa de personalización de Samsung sigue mejorando, con detalles como los gestos integrados, un bonito diseño que podemos usar a una mano, modo oscuro, botón de Bixby ligeramente programable, modo Instagram en la cámara, disparo de selfie con la palma de la mano y mucho más.
Conclusiones y precio
El Samsung Galaxy S10 5G es un S10+ mejorado, sin más. Tiene mejor batería, mejor cámara y mejor conectividad. Además, cuenta con una pantalla más grande, algo que para algunos usuarios será un punto a favor y para otros en contra.
Si dejamos de lado la comparación con sus hermanos de gama, podemos decir que el S10 5G es un terminal muy completo. Quizás no sea el que mejor cámara tenga, ni el que más autonomía ofrece y ni siquiera es el más potente. Pero es un móvil que «todo lo hace bien» y con un diseño de primera.
Eso sí, como suele ser habitual, no es un terminal precisamente económico. Además, tiene «el inconveniente» de que solo se vende, de momento, con el operador Vodafone. Su precio es de 1.080 euros con 256 GB de almacenamiento interno. Es un precio alto, pero tendremos móvil para muchos años.