Instagram es la red con más crecimiento de todas y su éxito es rotundo. Por si hubiese alguna duda, representantes de la compañía acaban de anunciar que han alcanzado los 700 millones de usuarios activos.
Esta noticia ya de por sí impacta, pero tenemos en cuenta que en diciembre de 2016 anunciaron los 600 millones y en junio los 500, empezamos a darnos cuenta que esto no ha hecho más que comenzar. ¿Por qué tiene tanto éxito Instagram? ¿Cuál es su fórmula secreta?
Copiando a la competencia
Durante 2016, Snapchat parecía la gran amenaza a Instagram. Sin embargo, desde junio de 2016 hasta hoy, Instagram ha crecido más que el total de usuarios de la empresa del fantasma (los últimos datos hablan de 160 millones de usuarios). Uno de los elementos clave fue la aparición de Instagram Stories, el sistema que copiaba literalmente los vídeos de vida corta de Snapchat.
A los usuarios pareció encantarles la estrategia, que ha sido un éxito (algo que no ha ocurrido con los Facebook Stories ni los momentos de Whatsapp). Después vendrían los vídeos en directo, como en Twitter.
Integración con Facebook
Mientras la compra de WhatsApp por Facebook tuvo muchos detractores, la compra de Instagram en 2012 fue la catapulta del éxito. Y es que tener cerca a la más grande de las redes ayuda. Con 1.860 millones de usuarios potenciales, Facebook deja de ser rival para ser aliado. Facebook parece centrarse ahora en los vídeos y la mensajería, y le deja a Instagram el terreno para ser la reina del lifestyle.
Instagram, la red de la felicidad
Aunque pueda parecer una broma, es cierto que los usuarios utilizan las diversas redes sociales buscando potenciar un tipo de contenido específico. Twitter, por ejemplo, parece condenada a ser la vía de escape para el troleo, la burla y el insulto. El debate político y muchas malas caras abunda en esta red, la eterna promesa, que se ha quedado bloqueada en los 300 millones de usuarios activos.
Instagram representa todo lo contrario. Fotos de ropa, selfies, comida… el estilo de vida y el postureo es lo que ofrece. En Instagram no hay hueco para el cabreo y el espacio para escribir se llena de hashtags. Estar en Instagram alegra la vida y el día. Por eso quieres formar parte de Instagram, porque destila un buen ambiente. Muchas estrellas como Kim Kardashian se sienten mucho más cómodas en esta última red que en ninguna otra. Sólo Snapchat le hizo sombra en este aspecto, pero no fue por mucho tiempo.
Mucha respuesta (y rápida)
Aunque Twitter se jacte de ser la red más rápida de todas, con timelines de vértigo, Instagram no tiene queja. Y es que su sistema permite una gran interconexión entre los usuarios. Aún sin tener apenas seguidores, el uso adecuado de hashtags puede hacer que usuarios de todo el mundo respondan a tus mensajes.
Esta velocidad también hace que nosotros como usuarios nos entretengamos. Si ya nos hemos revisado de memoria nuestro timeline, podemos echar un vistazo a la sección de buscar. Allí encontramos infinidad de fotos y vídeos con temas de nuestro interés. A través del logaritmo de la app, visualizaremos contenido que se parece a otro que ya hayamos visitado anteriormente, o alguno que le haya gustado a aquellos que seguimos. ¡Bendita monitorización!
10 cifras a modo de resumen
Aparte de esos 700 millones de usuarios, Instagram barre Internet con sus estadísticas. Aquí tenéis 9 más como prueba. Por ejemplo, las 95 millones de fotos compartidas de media cada día, llegando a las 40.000 millones en total. También los 4.000 millones de likes que se dan de manera diaria.
Instagram fue comprado por 1.000 millones de dólares. Sólo en 2016, triplicó la cifra, con 3.000 millones de ingresos recaudados por publicidad. Se espera que esos ingresos suban a 5.000 millones en 2018.
Las últimas tres cifras son porcentajes: un 20% de los usuarios totales de Internet usan Instagram. De ellos, un 68% son mujeres. En cuanto a grandes marcas, un 48% usa Instagram para promocionar sus productos.
Por todo esto, Instagram es una red que engancha, y produce efecto llamada. La prueba son esos 700 millones de usuarios activos, que, si mantienen el ritmo, serán 800 a final de verano. ¿El límite? El infinito y más allá.