Windows 10 ya está asentado en muchos ordenadores, y aunque todavía no alcanza las cotas de uso de Windows 7, ha sido recibido con mucho mejor humor que Windows 8. Igualmente, Microsoft todavía tiene algunos asuntos que arreglar en su sistema operativo. Vamos a ver cinco de ellas que, si Bill Gates nos pudiera escuchar, debería tener en cuenta. Al menos, desde nuestra humilde opinión.
La tienda de Apps
Recientemente supimos que Windows 10 incluirá una opción en su tienda de apps para usar aplicaciones sin necesidad de descargar. Es una grata noticia para su tienda de Apps, pero no repara el principal fallo: la falta de aplicaciones.
Este es un problema grande. La Microsoft Store todavía está a años luz de la Play Store o la App Store. No sabemos si es por que los desarrolladores todavía no están convencidos o por la falta de desarrollo de Windows 10 en terminales móviles, pero lo cierto es que hay muy pocas. Microsoft necesita trabajar eso si quiere estar a la altura de los sistemas operativos de Apple y Google.

El logo de Microsoft Edge asustará a algunos detractores de Explorer.
El navegador
Windows Explorer había caído en el más absoluto desprestigio. Ahora, con Windows 10, Microsoft quiere revitalizar su navegador creando Microsoft Edge. Funciona con Bing como buscador y está integrado con Cortana. También ha conseguido algunas interesantes mejoras como conseguir que sea el único navegador que reproduzca Netflix en 4K en un PC.
Sin embargo, todavía no cuenta con el beneplácito del público, y Google Chrome le ha comido todo el terreno en estos años. Hacer de su navegador una herramienta útil y atractiva sin duda es una importante cuenta pendiente.
El sistema móvil
Windows 10 Mobile se ha vendido como la forma de unificar sistemas móviles y de sobremesa. Sin embargo, no cuenta con suficiente respaldo entre público ni entre marcas. Al igual que su navegador, a Microsoft le toca hacer un trabajo importante de relaciones públicas si quiere volver a ser ese «tercer sistema», y la única oposición posible a Android. Por ahora, lo tienen bastante crudo.

A Windows 10 Mobile todavía le queda un camino largo.
El menú de inicio
Todo el mundo respiró aliviado cuando Microsoft recuperó el menú de inicio clásico para Windows 10. Sin embargo, fue una marcha atrás total. Esta vez se añadieron algunos elementos que consideraron útiles de Windows 8, como las apps y recomendaciones que se anclan y desanclan, y así ofrecer un valor añadido.
Al margen de su utilidad, todavía parece que el menú de inicio necesita un poco de trabajo, pues todavía no es lo intuitivo que debería ser. ¿Por qué el botón secundario tiene tantas opciones? ¿No sería mejor integrarlo todo en un mismo menú? Funciones interesantes como la de buscar programas quedan prácticamente enterradas en el menú secundario. Esperamos que den pasos para mejorarlo en próximas versiones.

Un menú todavía poco intuitivo.
Panel de control versus Configuración
No nos terminamos de aclarar. ¿Cuál es la diferencia entre Panel de Control y Configuración? Los dos están en el menú de inicio, y los dos parecen mostrar en esencia las mismas opciones. Es como si se combinase el lenguaje móvil y el PC en un mismo sistema…y a la vez.
Para una próxima actualización, Microsoft debería pensarse elegir entre una de las dos. O al menos, dejar una para la versión móvil y otra para la versión de escritorio.
Conclusión
Centrándose en estas ideas, creemos humildemente que Windows 10 mejorará mucho su posición como sistema operativo global. Los tiempos han cambiado y los sistemas operativos demandan un lenguaje distinto, lenguaje que pasa por los móviles y las apps.
Es cierto que Windows está jugando bien sus cartas en materia de realidad virtual y realidad aumentada. Sin embargo, además de centrarse en el futuro, la empresa de Bill Gates tiene que acordarse del presente, y estar a la altura de su propio nombre.