Hace algunas semanas un trabajador de Samsung comunicó a Phone Arena que el Z1 estaba superando todas las expectativas. Hoy Business Korea da un dato que pone al smartphone de la surcoreana muy bien parado. El primer terminal Tizen de la compañía ya ha logrado vender más de 100.000 unidades en mercados emergentes, donde Samsung quiere hacer despegar su plataforma móvil. No hay que olvidar, que este sistema no lo tiene nada fácil, ha de competir con Android, que gobierna la gran mayoría de terminales de bajo coste.
El Samsung Z1 fue lanzado a mediados del mes de enero y lo hacia con la esperanza de que Tizen lograra tener su propio hueco en un sector completamente dominado por iOS y Android. Podemos decir, que el dispositivo entra dentro de la categoría de telefonía de gama medio-baja. Esto se ve claramente reflejado en sus prestaciones, las cuales son algo austeras, aunque cumplen perfectamente con lo que prometen. Está claro, que la firma surcoreana ha querido inaugurar Tizen en un terminal que pueda causar furor en países como la India o Rusia. De este modo, encontramos en el Z1 una pantalla de 4 pulgadas y resolución WVGA, bastante básica teniendo en cuenta que ya hay terminales QHD. En su interior encontramos también un procesador de doble núcleo, que funciona a 1,2 Ghz de frecuencia de reloj. Su memoria RAM se queda algo corta, es de tan sólo 768 MB. Por su parte, la capacidad de almacenamiento interno es de 4GB, pero se puede ampliar fácilmente mediante tarjetas MicroSD de hasta 64GB.
En el apartado cámara, el Samsung Z1 tampoco destaca demasiado. El sensor principal es de 3,1 megapíxeles, aunque, eso sí, va acompañado de un flash LED, que nos permitirá tomar imágenes de mejor calidad en lugares en los que la luz no sea una opción. En cuanto a conectividad, el terminal dispone de WiFi y 3G, así como otros sistemas como bluetooth y GPS. Su batería es de 1.500 miliamperios, que dará para unas 8 horas en conversación y hasta 7 horas reproduciendo contenido multimedia. Que el dispositivo haya logrado superar las 100.000 unidades se debe, en parte, a la versatilidad de Tizen, que es el verdadero protagonista de este smartphone.
Samsung seguirá fabricando nuevos teléfonos gobernados por esta plataforma. De hecho, está previsto que presente nuevos modelos a lo largo de este año. Pero Tizen no sólo se quedará en los teléfonos, también estará presente en televisores (ya vimos en el pasado CES algunos modelos), así como en wereables, en cámaras o electrodomésticos. A pesar de que algunos analistas no le auguran mucho éxito, realmente Tizen puede lograr un importante hueco en aquellos dispositivos que no equipen un procesador demasiado potente ni tengan demasiada memoria. Y es que, si por algo se caracteriza es por su liviandad, es bastante más ligero que otros sistemas. Dada la proximidad del Mobile World Congress de Barcelona, estaremos muy pendientes por si Samsung tiene algo que decir allí de su plataforma. De momento, se espera que se presenten sus nuevos terminales insignia, el Galaxy S6 y Galaxy S6 Edge.