Microsoft y Nokia, una alianza que ha terminado con la compra de la compañía finlandesa. Mucho se va a hablar todavía de los motivos que han llevado al mayor fabricante de móviles hace apenas unos años a terminar bajo el mando de la compañía estadounidense. Pero… ¿qué gana Microsoft con esta compra? ¿Se trata de un paso estratégico en la intención de la empresa de convertirse en un fabricante de hardware o más bien un modo de proteger el crecimiento de su sistema operativo Windows Phone? En declaraciones recogidas por Cnet, un vicepresidente de Microsoft da algunas de las claves que han motivado esta compra.
Se trata del vicepresidente Joe Belfiore, responsable del desarrollo de Windows Phone. Según este ejecutivo, una de las claves de la compra de Nokia estriba en el intercambio de información de las dos compañías, o más bien, de la falta de este intercambio en determinados momentos. En el desarrollo de algunos terminales Lumia, la compañía finlandesa mantenía un férreo secreto sobre algunas de las características que iban a tener estos equipos. Mientras tanto, Microsoft decidía realizar cambios en el software de Windows Phone sin conocer el camino que estaba llevando el desarrollo de estos terminales. De haber conocido estos cambios, se habría conseguido realizar modificaciones más acordes con los productos que después iban a llegar al mercado.
Esta situación, claro, se repite con todos los fabricantes de hardware que van a trabajar con el sistema operativo de Microsoft. Pero la compañía estadounidense podrá desarrollar ahora proyectos más adecuados y rápidos al desarrollo de los móviles fabricados por Nokia, en un intento por potenciar la presencia en el mercado de Windows Phone. Aunque en España apenas si tiene una presencia muy residual, el sistema operativo de Microsoft se ha convertido gracias a los móviles Lumia en la tercera opción global por debajo de Android y el iPhone. En países como Francia su cuota de mercado ya supera el 10%, con terminales con una percepción muy buena como el Nokia Lumia 925.
De hecho, es evidente que a estas alturas hablar de Windows Phone es hablar de Nokia, con más de un 80% de terminales con este sistema de la marca finlandesa. Según Belfiore, la comunicación entre las dos compañías se había estrechado mucho en el lanzamiento de los últimos modelos, sobre todo en el caso del Nokia Lumia 1020 (el primero de esta gama en integrar una cámara de 41 megapixels).
Otra de las claves de esta compra está en la amplia experiencia que puede aportar Nokia sobre el funcionamiento de diversos mercados. El ejecutivo cita como ejemplo el uso de la tecnología Bluetooth. La compañía finlandesa le hizo ver que esta tecnología se utiliza en algunos mercados como china para transferir datos, algo que en Estados Unidos no se hace. Otro ejemplo de este tipo es el funcionamiento de mercados emergentes, ya que los primeros requisitos de hardware de la compañía estadounidense para su sistema provocaban que los terminales que se realizaban fueran demasiado caros para triunfar en estos países. Después de que Nokia hiciera ver este punto, la compañía estadounidense decidió rebajar estos requisitos.
Todavía faltan unos meses para que el acuerdo entre Microsoft y Nokia se cierre definitivamente. Pero está por ver que la compañía estadounidense sepa aprovechar los recursos de Nokia y refuerce la presencia de Windows Phone. ¿Qué opináis de esta compra?
También fue muy importante la linea de moviles Asha, como paso previo de salto a los Lumia.