Algunos robots sirven para salvar vidas. Otros nos ayudan a hacer la compra. Pero este RoboStool sólo sirve para que pongamos los pies encima. Aunque no parezca más que un simple puf, la diferencia es que este invento tiene ruedas y puede desplazarse por los pasillos hasta el lugar en el que estés descansando. Así no tienes que llevarlo de un lado para otro si tienes varios sofás multimedia repartidos por toda la casa.
El singular autómata dispone tres opciones diferentes de desplazamiento. Puedes solicitar su presencia manejándolo con el mando a distancia, como si fuese un juguete de control remoto. También está equipado con un sistema de navegación mediante faros, para evitar los posibles obstáculos en su trayectoria. Y por último, puede seguir a su dueño por toda la casa utilizando su sensor térmico.
Como puedes ver en el vídeo de presentación, es bastante preciso a la hora de colocarse frente a nuestros pies. Lo cierto es que también hace demasiado ruido mientras está en funcionamiento, y no debe ser muy agradable tener un chisme armando jaleo por las habitaciones durante la hora de la siesta. Disculparemos este defecto, pues al fin y al cabo no es más que un proyecto casero.
La ingeniosa mente detrás de este artefacto es Steve Norris, de Norris Labs. Un apasionado de la robótica que ha aplicado en este invento algunas de las técnicas y recursos que ya empleó en otros proyectos. Si compartes la afición de Norris y el inglés no es un problema para ti, puedes construirte tu propio RoboStool (ya que no parece estar a la venta para el gran público). Sólo tienes que seguir las indicaciones de su página web, donde incluso encontrarás el código fuente empleado por el inventor.
Vía: technabob