El mundo de los teledirigidos no acaba en el clásico coche con control remoto. Primero fue el vehículo con detector de metales y ahora nos encontramos con los Zero Gravity, unos coches teledirigidos de la firma Air Hogs, que tiene la inaudita capacidad de subirse por las paredes. Se ha acabado aquello de reventar el coche por radio en las patas de la mesa. Y es que, incluso para los más patosos en esto del radiocontrol, el Air Hog no se encontrará con abstáculos más peigrososos que un interruptor de la luz o un cuadro mal colgado.
Su modus operandi no es ningún enigma. La clave está en que combina uncuerpo ligero junto a un mecanismo de corrientes de aire propulsadas por el ventilador de los bajos que lo impulsa para que no se caiga cuando se encuentra con la pared. Tanto el mando como el coche se alimentan a pilas, que tienen comprarse a parte. En el siguiente vídeo hay una muestra de su funcionamiento…
El único detalle a tener en cuenta es el tipo de pared, que debe ser lisa. Por lo demás, también es recomendable usarlo en exteriores… y es que no queremos ni imaginar como quedarán las paredes después jugar un rato por el pasillo. Luego está el precio. En estos momentos la broma puede costar la friolera de 350 euros (mano de pintura no incluida) en Amazon, la famosa tienda americana de Internet.
Vía: Airhogs
vaya pastel de coche-secador y que ascazo de tia chupando camara.
Que chulo!!!!!!!