Hay diversos motivos que pueden llevarnos a usar un ratón en superficies poco habituales. Ya sea porque lo llevamos a todas partes y tenemos que improvisar una oficina en el banco del parque o por simple y llana falta de presupuesto para comprarnos una alfombrilla. Para todas estas situaciones, Microsoft ha anunciado el lanzamiento de Microsoft Explorer, un ratón que usa tecnología BlueTrack.
¿Y qué diantres es eso? Pues un ratón óptico muy sofisticado. En lugar de láser rojo, usa una luz LED azul como fuente, con una óptica de gran angular y un sensor de imagen que consigue un contraste mucho más alto de lo habitual. De esta forma, el ratón es capaz de operar sobre el mármol de la cocina, una mesa de madera barnizada o incluso en el suelo de moqueta.
Eso sí, en cristales transparentes como el de una ventana o la típica mesita baja de salón, la única opción es volver al pleistoceno de la informática y empuñar un ratón de bola. Paradojas de la tecnología. Es también un ratón que funciona sin cables e incluye una batería interna que se recarga mientras dejamos el ratón depositado en el típico soporte de sobremesa.
Sale a la venta en Estados Unidos en octubre, con un precio de 100 dólares (unos 72 euros al cambio actual). También cuenta con una versión para viajeros, llamada Explorer Mini, más pequeña, a pilas y acompañado de un transmisor USB que se guarda en la parte inferior del ratón cuando no lo usamos. Este último es, lógicamente, más económico: 80 dólares (unos 57 euros).
En cualquier caso, no tardarán mucho en llegar a Europa. Sobre todo porque ya hay otro ratón que sale a la venta en España el 15 de septiembre y que también incorpora tecnología BlueTrack: el SideWinder X5. En efecto, una actualización del Microsoft Sidewinder, el ratón para videojuegos de PC del que os hablamos el año pasado. Tendrá un precio de 60 euros.