Reducir el tamaño de los aparatos es una de las formas en las que la tecnología avanza. No ya sólo por ahorrar peso y espacio, sino con el objetivo de integrar aparatos entre sí. Es el caso de dos proyectores de bolsillo presentados recientemente en el CES de Las Vegas por 3M y Microvision. El más pequeños es el de 3M. Esta firma estadounidense, inventora del post-it entre otros objetos cotidianos, pretende que los fabricantes de teléfonos móviles se animen a usar este prototipo como componente interno de sus próximos terminales.
Una idea similar a la del miniproyector de Texas Instruments, con una diferencia: en lugar de láser, usa iluminación LED, que proporciona más brillo y colores mejor definidos. Eso sí, salvando siempre las distancias respecto a los proyectores de sobremesa, que superan con creces las medidas de 4 x 3 x 1 centímetros de este prototipo de 3M. En distancias cortas, puede proyectar imágenes a 640 x 480 píxeles de resolución, creando una pantalla virtual de 40 pulgadas de tamaño sobre la pared.
La lente, de apenas un centímetro de diámetro, usa tecnología LCOS (cristal líquido sobre silicio) y consigue una luminosidad de entre 8 y 10 lumens, por lo que necesitaremos oscurecer el ambiente para ver las proyecciones con nitidez. En otras palabras, podría «hacer el apaño» para presentaciones en una sala de proyección. 3M afirma que su miniproyector podría funcionar durante dos horas ininterrumpidas alimentándose de la batería de un móvil (dejando a un lado el consumo del propio teléfono).
¿Tendría salida un complemento de este tipo en un teléfono? ¿Más allá del ejecutivo al que le atraiga disponer de un proyector tan portátil para exponer cuentas y resultados en cualquier momento? Lo cierto es que parece un poco futurista que un usuario medio pueda recurrir a un proyector integrado para ver y enseñar fotos y vídeos a sus amigos. Pero hasta hace pocos años no nos hacíamos a la idea de usar el móvil para escuchar música o hacer fotos. Y hoy en día son prácticas muy extendidas, sobre todo en terminales de gama alta.
A este respecto, 3M afirma que el miniproyector también podría montarse en una agenda electrónica o incluso una cámara digital, por lo que la idea podría transportarse a aparatos con distintos públicos y necesidades. En este línea podríamos colocar el otro proyector también presentado durante el CES: el Show Pico de la firma Microvision. En este caso se trata de un proyector láser externo y sensiblemente más grande, pero también de bolsillo, que se conectaría con distintos aparatos para proyectar las imágenes en formato panorámico (848 x 480 píxeles) y con hasta 10 lumens.
En las condiciones ideales, el tamaño de la proyección podría llegar a las 100 pulgadas, aunque con unos colores menos naturales debido al uso del láser. Está previsto que llegue al mercado a finales de año, por un precio de 350 dólares (unos 235 euros al cambio). Veremos cómo es recibido este producto por el público. Y en el caso del proyector de 3M, habrá que ver si los fabricantes consiguen incluirlo en las entrañas de los terminales sin que afecte mucho a sus dimensiones. O si, por el contrario, conviene más reconducirlo hacia el campo de los accesorios externos.
Vía: 3M / Xataka / engadget