Todo móvil es tan potente como su procesador y otras características claves (GPU, RAM y ROM) lo permitan. Sin embargo, su rendimiento puede verse reducido debido a varios problemas, y estos pueden hacer que la experiencia de usuario sea peor, tanto para abrir aplicaciones y juegos como para ejecutar cualquier tarea, por más simple que sea. Para solucionarlos, antes hay que saber cuáles son los motivos por los que está funcionando más lento de lo que debería, y aquí listamos 7 de ellos.
Es normal que con el tiempo un móvil se vaya poniendo más lento, ya que su hardware va envejeciendo y las aplicaciones y juegos, así como el software en general, van avanzando y exigiendo más a nivel de recursos y sistema, algo que no se puede evitar. Sin embargo, hay ciertas cosas que sí se pueden hacer para que vaya más rápido, y para ello hay que tener en cuenta los siguientes motivos que afectan su rendimiento. Estos son…
Hay muchas aplicaciones en segundo plano
Una de las razones más comúnes por las cuales tu móvil puede ir más lento de lo normal tiene que ver con las aplicaciones en segundo plano. Si se tienen varias apps abiertas recientemente y estas se están ejecutando en segundo plano, la memoria RAM se llenará y esto afectará considerablemente el rendimiento del teléfono en cuestión.
Sin embargo, no siempre tienen que haber varias aplicaciones abiertas en segundo plano para que esto suceda; a veces, tan solo una o dos apps son suficientes para que la RAM se sature, pues esto dependerá, en gran parte, de qué tan exigentes son a nivel de recursos del sistema. Y es que hay apps que son tan ligeras que prácticamente no causan ningún impacto significativo en el consumo de la RAM y el desempeño del móvil, pero hay otras que sí, en especial las apps de edición de vídeos y los juegos pesados con gráficos en 3D. Al mismo tiempo, la facilidad con la cual la RAM de un móvil se llena dependerá de su capacidad.
Para evitar que el móvil se ponga lento y trabaje de forma más rápida, se deben cerrar las aplicaciones en segundo plano para liberar la memoria RAM. Para ello, hay que hacer lo siguiente:
En Android
- Desliza el dedo desde la parte inferior de la pantalla hacia arriba hasta que aparezca la sección de aplicaciones o ventanas recientes.
- Luego cierra las apps en segundo plano, deslizándolas hacia un lado o arriba.
En algunos móviles también existen aplicaciones y herramientas para liberar la RAM y mejorar el rendimiento del mismo. En Xiaomi, por ejemplo, dicha app se llama Limpiador, y basta con solo abrirla para que esta realice un análisis del sistema y ofrezca la opción de cerrar las apps en segundo plano.
En iPhone
En iPhone, el proceso para cerrar las apps en segundo plano y liberar la memoria RAM es prácticamente el mismo que en Android. Solo hay que hacer lo siguiente:
- Desliza el dedo de abajo hacia arriba en la pantalla para abrir las aplicaciones recientes.
- Después cierra cada una deslizándolas hacia arriba.
No cuenta con la última actualización
Si tu móvil está desactualizado, es probable que tenga problemas de rendimiento, errores, bugs y un sinfín de problemas que solo las actualizaciones más nuevas pueden solucionar. Por ello, lo recomendable es mantenerlo siempre con la última actualización lanzada por el fabricante, ya que estas tienen la finalidad de mejorar la experiencia de usuario en general, así también como la fluidez y rapidez del teléfono en cuestión. Sin embargo, si este cuenta con más de dos o tres años, ya no recibirá más actualizaciones grandes (versiones de Android y de capas de personalización), aunque sí seguirá contando con actualizaciones pequeñas de mantenimiento durante uno o dos años más, dependiendo del fabricante.
Para revisar si el móvil cuenta con alguna actualización disponible, para luego descargarla e instalarla, se deben seguir los siguientes pasos:
En Android
- Lo primero que hay que hacer es entrar en los ajustes del teléfono.
- Luego hay que acceder en Acerca del teléfono o Sobre el teléfono. En algunos dispositivos, dicha sección aparece como Sistema.
- Ahora bien, lo siguiente que se debe hacer es entrar en el apartado de actualizaciones. Según la capa de personalización, esta puede estar nombrada como Versión, Actualización o Software.
- Al entrar, se realizará una revisión automática de las actualizaciones disponibles. También se puede pulsar en el botón de Revisar actualizaciones.
- Si hay alguna actualización disponible, aparecerá la opción para descargarla e instalarla. De ser el caso, se debe iniciar la descarga. Para ello, se recomienda estar conectado a una red Wi-Fi rápida y estable, para que no hayan errores en el proceso de descarga y evitar también un consumo no deseado del paquete de datos móviles.
En iPhone
- Hay que entrar en Ajustes.
- Después se debe ir a General.
- En este punto, hay que pulsar en Actualización de software.
- Luego, el sistema realizará una búsqueda de actualizaciones, y si hay alguna disponible, aparecerá la opción para descargarla e instalarla. De ser el caso, es recomendable tener el iPhone conectado a una red Wi-Fi y no a los datos móviles para no generar un consumo no deseado de los paquetes de datos móviles del operador.
La memoria interna está muy llena
Cuando la memoria interna del móvil (también conocida como ROM) está muy llena, el sistema se vuelve muy pesado y acciones como abrir aplicaciones, realizar scroll (deslizamiento), ejecutar juegos y navegar por la interfaz van más lentas de lo normal. La razón tras ello es que el móvil necesita contar con suficiente espacio de almacenamiento libre para poder sobreescribir la ROM de forma holgada, almacenar datos temporales y caché de las apps y el sistema, y realizar las típicas tareas del día a día. De lo contrario, el rendimiento del teléfono disminuirá dramáticamente. Por ello, se recomienda contar con no menos de un 10% de memoria interna libre. Con esto en cuenta, si tienes un teléfono con 64 GB de ROM, por ejemplo, debes tener, como mínimo, unos 6 GB de memoria libre, aunque si es más mejor aún.
Para liberar la memoria interna del móvil se pueden borrar archivos como vídeos e imágenes de la galería, o bien desinstalar aplicaciones que ya no se usen y sean muy pesadas. Para hacer de esto más fácil, existen apps como Files, que se encargan de analizar la ROM del móvil y organizar y clasificar todos los archivos por carpetas, fecha, tamaño y tipo, para luego borrarlos rápidamente.
Otra forma de liberar la memoria interna del teléfono para que funcione más rápido es borrando la caché de las aplicaciones, y así lo puedes conseguir:
En Android
- Entra en Ajustes o Configuración.
- Ahora ubica la entrada de Aplicaciones y pulsa en esta.
- Posteriormente, entra en Administrar aplicaciones. Esto te llevará al apartado donde se encuentran todas las apps del sistema y de terceros.
- Después borra la memoria caché de cada una, pulsando en el botón de Limpiar datos o Borrar caché.
Estas indicaciones pueden ser ligeramente distintas en cada móvil, de acuerdo con la marca del mismo y la capa de personalización del fabricante.
En iPhone
En iPhone es diferente el proceso de borrar la caché de las aplicaciones. Para ello, se deben desinstalar las aplicaciones, pero no a través de la pantalla principal, sino mediante los ajustes de iOS. Para ello, hay que hacer lo siguiente:
- Entra en Ajustes.
- Ahora pulsa en General.
- Después pulsa entra en la sección de Almacenamiento del iPhone.
- Finalmente, desinstala la apps que quieras para borrar la caché de estas, pulsando en el botón de Eliminar app. Es importante no confundir dicho botón con el de Desinstalar, ya que, si solo se desinstalan las apps, no se borrarán los datos y la caché de estas.
El móvil está muy caliente
El calor es el peor enemigo de un móvil, y esto es debido a que, además de deteriorar sus piezas internas, como la batería, por ejemplo, también afecta de forma drástica el rendimiento de su procesador, haciendo que funcione más lento de lo que debería.
Cuando hay mucho calor y el móvil está muy caliente por ello o debido a que está ejecutando alguna app o un juego muy exigente a nivel de recursos durante varios minutos u horas, se activa el throttling, una función que básicamente disminuye la frecuencia de reloj del procesador para evitar algún posible sobrecalentamiento, sacrificando así su potencia máxima hasta que la temperatura del teléfono baje a niveles normales.
Así que para que el móvil no sufra de throttling y funcione más rápido, se deben evitar las altas temperaturas. Para ello, hay que usar el móvil en ambientes con ventilación y no exponerlo directamente a la luz del solar, y evitar usar apps muy exigentes de forma prolongada.
La batería está en mal estado
Si el teléfono está funcionando más lento que antes, es posible que se deba a que la batería está dañada o se encuentra en un estado que no es el óptimo, ya que el procesador y otras piezas encargadas del buen rendimiento del mismo podrían no estar recibiendo la energía necesaria para trabajar al 100%. Esto es común en móviles con varios años de uso y con más de 400 o 500 ciclos de carga.
Para cuidar la batería, se debe evitar que el nivel de carga baje del 20% y, a su vez, no exceda el 80%. Y, al momento de cargarla, lo mejor es hacerlo de forma parcial; por ejemplo, se carga del 20% al 30%, luego del 30% al 55% y finalmente del 55% al 80%, con minutos de descanso entre cada periodo de carga. Esto ayudará a que la batería sufra un menor estrés con cada carga y se caliente menos durante el proceso, alargando así su vida útil y manteniendo su óptimo desempeño.
No se ha reiniciado en mucho tiempo
Si tu móvil está funcionando más lento de lo que debería, no haberlo reiniciado hace mucho tiempo puede ser un motivo. Así que es recomendable reiniciar el móvil de vez en cuando, al menos unas cuantas veces al mes, para que este cierre procesos que normalmente debería cerrar o finalizar por sí solo, pero que una u otra razón siguen ejecutándose y, por ende, haciendo que el procesador trabaje más y la memoria RAM tenga menos espacio disponible para otras tareas y aplicaciones.
La red móvil o Wi-Fi es muy lenta e inestable
Hoy en día, muchas apps y procesos del sistema operativo de un móvil necesitan de una buena conexión a Internet para trabajar de la forma más fluida y rápida posible. Por ello, cuando la red móvil o el Wi-Fi al cual está conectado es deficiente, el rendimiento del mismo puede reducirse notablemente. Así que lo ideal es contar con una conexión a Internet rápida y estable para que el móvil funcione lo más rápido posible.