El avance de la tecnología es imparable. Hace tan solo unos años, nadie era capaz de imaginar que podríamos conectarnos a redes sociales, sitios web y otras plataformas desde cualquier parte del mundo gracias al teléfono móvil. Tampoco sospechábamos que contar con un medidor cardíaco, podómetro y receptor de notificaciones en la muñeca sería posible para tanta gente. Claro, esto son solo dos ejemplos de cómo ha cambiado el panorama tecnológico, principalmente si nos fijamos en la electrónica de consumo. Pero la cosa no se queda ahí.
Hace tan solo unos días te contábamos los planes de Facebook para crear una realidad paralela en forma de metaverso. Este es un proyecto que se encuentra en un estado muy prematuro. De hecho, el propio Mark Zuckerberg no sabe muy bien si este nuevo universo digital deberá ser accesible mediante realidad virtual o realidad virtual. Ambas modalidades han avanzado mucho en los últimos tiempos y ofrecen una gran cantidad de posibilidades. Y a estas dos debemos sumar la realidad mixta. ¿Qué diferencias hay entre cada una de estas tecnologías? Si quieres conocer qué es la realidad virtual, la realidad mixta y la realidad aumentada, en este artículo te lo contamos.
¿Qué es la realidad virtual?
La realidad virtual es un sistema que permite al usuario introducirse en un mundo virtual con una inmersión total. En ocasiones se la identifica como VR por las siglas en inglés de Virtual Reality. Para conseguir una experiencia inclusiva se utilizan diversas tecnologías. Por ejemplo, es necesario que el usuario use unas gafas con un diseño específico. Con ellas puede visualizar el entorno del mundo virtual y moverse a través de él. Esto último es posible gracias a un conjunto de sensores, como altímetros y acelerómetros. Como es de esperar, también es necesario un sistema de audio con cancelación de ruido, para que todo lo que el usuario oiga provenga del sistema de realidad virtual y no del exterior. El vídeo, el audio y el movimiento son aspectos controlados por un mismo dispositivo.
La realidad virtual se utiliza, principalmente, en el mundo de los videojuegos y el entretenimiento. De esta manera, el jugador deja de interactuar con el mando y la pantalla y pasa a hacerlo con sus movimientos. Dependiendo del tipo de juego, será importante que el usuario se encuentre en un espacio habilitado expresamente para jugar.
Ahora ya sabes que la realidad virtual busca, gracias a distintos dispositivos de vídeo y audio, una experiencia inclusiva y de completa inmersión en un mundo creado por ordenador. Pero no todos los sistemas de realidad virtual funcionan de la misma manera. Podemos hablar, al menos, de dos tipos distintos de realidad virtual.
- Realidad virtual pasiva. Esta tipología hace referencia a la posibilidad introducir al usuario en un mundo virtual, pero sin que pueda interactuar con él.
- Realidad virtual interactiva. En este caso, el usuario, además de estar dentro de la realidad paralela, es capaz de controlar los objetos que ve o moverse por el espacio virtual disponible.
¿Qué es la realidad aumentada?
La realidad aumentada, también denominada AR (augmented reality), es una tecnología que proporciona información al usuario mediante elementos digitales proyectados sobre el mundo real. Los datos arrojados se integran de manera natural con el entorno en el que se encuentra. Esta es una diferencia fundamental con la realidad virtual.
La realidad aumentada no busca aislar a quien la utiliza. Más bien, aprovecha el mundo real para facilitar información y ofrecer datos en el contexto de lo que está pasando. Para utilizar la realidad aumentada no es necesario adquirir un dispositivo específico, como sí sucede con la realidad virtual. En realidad, cualquier teléfono móvil es capaz de ejecutar aplicaciones de AR.
Un buen ejemplo de realidad aumentada es el juego Pokemon Go, que usa la cámara y el localizador GPS para superponer información al mundo real. También la usan empresas como IKEA, que permite gracias a su aplicación decorar una estancia agregando muebles de manera virtual. En ambos casos, es necesario utilizar el teléfono móvil. No obstante, en algunos campos ya se están utilizando dispositivos que permiten el uso de la realidad aumentada de forma más natural, como por ejemplo las gafas.
¿Qué es la realidad mixta?
La realidad mixta, identificada también como realidad híbrida o por sus siglas en inglés MR, propone una fusión entre los dos tipos de realidades de los que ya hemos hablado. La MR introduce objetos virtuales dentro de un entorno real, coexistiendo con los elementos que ya se encuentran en el espacio físico. Gracias a la realidad mixta, el usuario puede interactuar con los elementos reales y virtuales indistintamente. Además, las nuevas imágenes introducidas en la escena también interactúan con el entorno. Y ese es, justamente, el punto clave de la MR. El mundo real y el virtual se fusionan en uno solo.
La MR precisa de dispositivos similares a los que se emplean en la realidad virtual. Por lo tanto, es necesario que se adquieran cascos o gafas. En algunos casos también puede ser necesario usar auriculares.
La realidad extendida: lo que está por llegar
Terminamos hablándote de un concepto novedoso llamado realidad extendida. También se la identifica con el acrónimo XR. La propuesta de la realidad extendida pasa por aunar las tecnologías que hemos analizado aquí. Por lo tanto, se trataría de combinar todos los entornos, tanto reales como virtuales, y controlarlos sobre la base de las interacciones del usuario. La realidad extendida es una especie de paraguas que abarca la realidad virtual, la realidad mixta y la realidad aumentada.
Es probable que en el futuro dejemos atrás todos los términos mencionados en este artículo y hablemos simplemente de realidad extendida. Mientras tanto, los tres tipos de realidades generadas por ordenador se mantienen separadas y cada una cumple con un objetivo concreto. Evidentemente, estas tecnologías se encuentran en constante evolución y, poco a poco, se aplican en más campos. En la actualidad, la que más aceptación está teniendo es la realidad aumentada, ya que no requiere una gran inversión. De hecho, la mayoría de los teléfonos móviles actuales son compatibles con sistemas AR.
