En estos mismos momentos el pueblo de Bolivia está sufriendo un golpe de Estado liderado por los militares y legitimado por Jeanine Añez, la actual autoproclamada Presidenta del Estado de Bolivia. Dentro de este movimiento paramilitar se esconden una serie de intenciones que van más allá de tumbar el Gobierno de Evo Morales. Prueba de ello es la filtración de varias grabaciones firmadas por la oposición del Gobierno de Morales en varios de los medios latinoamericanos más importantes de la región.
El contenido de las grabaciones venía a revelar la alianza de los distintos poderes políticos con la Iglesia, la fuerza militar y la embajada de Estados Unidos. Pero, ¿qué esconde realmente este golpe por parte de EEUU y los partidos conservadores de Bolivia? ¿Y qué tiene que ver con la batería de los móviles?
Litio: causa y a la vez origen del apoyo de Estados Unidos al golpe de Estado boliviano
La semana pasada el sociólogo y profesor de universidad Federico Nacif sentenciaba lo siguiente:
«No hay duda alguna del papel que tuvo el litio en la motivación del golpe de Estado contra Evo Morales. Pero se da por el proyecto de industrialización soberana que viene desarrollando Bolivia, que dejaba afuera a Estados Unidos, más que por el control de la materia prima.»
En 2008, el mismo Nacif desarrolló un proyecto de explotación del litio, el principal material de las baterías, con el que se había acordado junto con una empresa alemana fabricar una planta para el desarrollo y la creación de baterías controladas por el Estado de Bolivia en la ciudad de Potosí.
Villa de Potosí. De EEJCC – Trabajo propio, CC BY-SA 4.0.
Tiempo después, el Comité Cívico de Potosí (ComciPo) comenzó a criticar el proyecto antes de la celebración de las Elecciones Generales por ser «entreguista» al ceder los derechos de la explotación a una empresa alemana. Cabe destacar que la mayoría de comités organizados en Bolivia están compuesto por grandes empresarios y corporaciones afincadas en el país.
«Bolivia cuenta con más de 21 millones de toneladas de litio. De las mayores explotaciones a nivel mundial.»
Tras el acuerdo de reasignación por parte de Morales, ComciPo volvió a oponerse y comenzó a reclamar la destitución del Presidente. A partir de este punto el Gobierno de Evo Morales decide ceder los derechos a una empresa local: YBL es la compañía que compra a Alemania la principal planta de Potasio, componente indispensable para el desarrollo de baterías de ion-litio. Posteriormente YBL adquiere el diseño de la planta de carbonato de litio y encarga su construcción a China. Es ahora cuando Bolivia entra en el mercado de las baterías liderado hoy día por Estados Unidos y China.
Después de la adquisición de las principales plantas y patentes para comenzar a fabricar baterías en grandes volúmenes, el Gobierno del país lleva a un acuerdo con la empresa alemana ACI Systems para construir la primera planta destinada a generar baterías. Las condiciones firmadas durante el acuerdo volvieron a ser criticadas por la ComciPo por ser «entreguista» al no contemplar regalías a las empresas privadas del país por la extracción del mineral.
Palacio de la Asamblea Legislativa de Bolivia.
Desde entonces el mismo comité ha venido defendiendo los derechos de los empresarios con la alianza del presidente de ComciPo, Marco Pumari, con Luis Fernando Camacho, el actual líder del movimiento golpista que ha logrado desplazar a Morales. Las críticas de distintos sectores económicos y empresariales obligan a Morales a anular el contrato de ACI Systems para detener lo que a todas luces parecía ser uno de los puntos más fructuosos para la generación de baterías de ion-litio. Pumari rechaza el gesto de Morales y se comienzan a lanzar titulares desde varios medios conservadores que rezan que el presidente «roba las regalías» de la extracción de litio a la ciudad de Potosí.
El acuerdo de Bolivia con China despierta a la gran bestia
El pasado mes de agosto Bolivia anuncia un preacuerdo junto con China para la conformación de una empresa destinada a fabricar litio metálico. Con una inversión que supera los 1.000 millones de dólares, el acuerdo deja al país con un 51% de los derechos de explotación de litio. El resto de la propiedad estaría bajo el techo de Xinjiang TBEA Group Company, la empresa encargada de la explotación del litio en Bolivia y la fabricación de baterías en China.
El acuerdo firmado con China se acumula, aunque suspendido temporalmente, al acuerdo firmado con la alemana ACI Systems. Con Europa, China y Bolivia al mando, es entonces cuando Estados Unidos decide intervenir a través de lo que posteriormente pasaría a ser un golpe de Estado.
20 de octubre de 2019: Elecciones a la Presidencia y punto de inflexión para el país
Fue a partir de la celebración de las Elecciones el pasado mes de octubre cuando se comenzó a fraguar el que ha sido uno de los golpes de estados más violentos del país. No solo se comienza a combatir el Gobierno desde los partidos más conservadores, también se empieza a establecer el contacto con Estados Unidos a través de la embajada del país afincada en Bolivia.
Varios días después de la proclamación de Evo como Presidente electo del país, se filtran hasta 16 audios y grabaciones que confirman la relación del país liderado por Donald Trump. ¿El objetivo? Confabular contra el presidente para provocar su destitución del cargo y detener en mayor o menor medida el acuerdo del Gobierno con la empresa china. En la última entrevista pública de Nacif el sociólogo sentencia lo siguiente:
«Si el golpe contra Evo Morales se consolida finalmente, no me cabe duda alguna de que entre las primeras medidas se encontrará la anulación de los proyectos de industrialización independiente de Bolivia, lo que supone un mal ejemplo para el resto de la región y el pueblo boliviano.»
