El reciente escándalo de Facebook en el que más de 50 millones de perfiles han sido expuestos ha dejado a más de uno con la mosca detrás de la oreja. Es posible que tras estas revelaciones, se te haya pasado por la cabeza blindar tu perfil de Facebook en materia de seguridad, cuando no directamente desactivarlo. Vamos a enseñarte a hacerlo, ofreciéndote todas las opciones para que decidas en qué medida quieres castigar a la red de Matt Zuckerberg.
Ajustes de privacidad
Una vez publicamos contenido en Facebook, perdemos una parte del control sobre éste. Sin embargo, sí que tenemos una serie de opciones que podemos activar para limitar el alcance de este contenido. Podemos elegir hasta qué punto queremos que nuestra red sea más social o privada.
Para poder acceder a estos ajustes, debemos clickar en la pestaña de opciones, justo en la esquina superior derecha de la pantalla. Ahí visualizaremos un nuevo menú con distintas secciones, y en cada una podemos establecer distintos niveles de seguridad. Disponemos de tres niveles de privacidad: Público (todo el mundo), Amigos (solo nuestros contactos) o Solo yo (únicamente lo veremos nosotros). También podemos, dentro de la opción Amigos, excluir a algunos contactos concretos que no queremos que visualicen ciertos contenidos.
Esos niveles de privacidad se pueden aplicar para evaluar quién queremos que visualice nuestras publicaciones (futuras o pasadas) del muro, quién nos puede enviar solicitudes de amistad, quién puede visualizar nuestra lista de amigos y quién puede buscarnos por nuestro mail, teléfono o incluso a través del motor de búsqueda de Facebook. Todas estas funciones se gestionan con el botón Editar.
Ajustes de biografía
Otra opción para aumentar la privacidad de nuestra cuenta es acudiendo, dentro de Configuración, a Biografía y etiquetado. En este nuevo menú podremos gestionar aspectos como: quién puede publicar en nuestro muro, quién puede ver lo que terceras personas escriban en la biografía o quién puede etiquetarnos (incluso podemos activar la opción Revisar las publicaciones que me han etiquetado antes de que esa etiqueta aparezca). El criterio es el mismo: Público, Amigos y Solo yo.
Por último, nos queda por revisar la información de nuestra cuenta que aparece visible para todos: de dónde somos, qué nos gusta, dónde hemos estudiado, dónde trabajamos y algunas otras cosas. Podemos gestionar esos datos dirigiéndonos al muro y clicando en la pestaña Información. Es importante que sepáis que toda esa información no se puede ajustar como privada, siempre será pública. Por ello, si no queréis que nadie conozca esos datos de índole personal, lo mejor que podéis hacer es borrarlos de la sección.
Eliminar la cuenta
Si queremos ir hasta el extremo y directamente deshacernos de la cuenta de Facebook, debemos hacer lo siguiente: posicionarnos en Configuración, dirigirnos a Administrar cuenta y marcar Editar. La pestaña se abrirá y bajaremos hasta la última opción, Desactivar cuenta. Al marcar esta opción, nuestro nombre y nuestras fotos dejarán de estar disponibles, aunque los usuarios todavía podrán leer algunos de nuestros mensajes. La opción Desactivar cuenta contempla la posibilidad de volverla a activar, tan solo entrando con nuestro nombre de perfil y contraseña, por lo que no se trata de una eliminación total.
¿Buscamos eliminarla para desaparecer del todo? También se puede. Eso sí, Facebook no lo pone fácil, y no lo plantea como opción visible. Sin embargo, buceando en sus secciones de ayuda, nos encontramos con un enlace que nos permite borrar la cuenta completamente. Tranquilos, si clicáis no comenzará el proceso automáticamente. Tenemos que seleccionar Eliminar cuenta, y entonces sí, será irreversible.
Está en tu mano decidir cuánto quieres desconectarte de Facebook. Ponerlo más difícil para que te encuentren, desaparecer un tiempo o para siempre. En un mundo súper-comunicado, ¿estarías dispuesto a ir hasta el final?