El Mobile World Congress 2016 todavía no ha terminado, pero a un día del cierre y tras la resaca de las presentaciones, ya estamos en disposición de comenzar a hacer balance. En la feria hemos visto de todo, pero si algo ha destacado por encima de todo han sido las presentaciones de grandes smartphones como los Samsung Galaxy S7 y LG G5, ambos buques insignia de sus respectivas firmas. Y aunque prácticamente todas sus características responden a las expectativas de los usuarios, hoy hemos sabido que ambos equipos plantean un inconveniente importante con respecto a la gestión de la memoria interna y externa. Una de las características que más destacamos de la nueva versión de Android 6.0 Marshmallow fue la integración de la memoria de las tarjetas microSD externas en la memoria interna, de modo que en cuestiones de almacenamiento no habría distinciones y los usuarios podrían instalar aplicaciones en la tarjeta sin inconveniente alguno.
Sin embargo, parece que esta opción no resultará compatible con los nuevos Samsung Galaxy S7 y LG G5 que se acaban de presentar en sociedad, aunque Samsung, por ejemplo, ya ha ofrecido una explicación al respecto. Para el fabricante surcoreano, la razón de ser de esta característica tiene mucho que ver con la tipología de dispositivos que se comercializan en mercados emergentes y que suelen contar con 4 u 8 GB de almacenamiento interno. En ese caso, parece que el «almacenamiento adaptable» de Android Marshmallow tendría sentido. Sin embargo, Samsung considera que los propietarios de terminales como el Samsung Galaxy S7 solo usarán la tarjeta microSD para transferir archivos entre su teléfono y otros dispositivos (tabletas, ordenadores portátiles, equipos de sobremesa, etcétera). Estamos hablando, principalmente, de fotos y vídeos capturados con la cámara del terminal.
Con el sistema de «almacenamiento adaptable», la tarjeta podría formatearse cada vez que se inserta en el equipo, de modo que los usuarios podrían llegar a perder sus archivos. Otro inconveniente importante tiene que ver con el hecho de que una vez que Android 6.0 Marshmallow ha comenzado a usar la tarjeta con este fin, esta no podrá ser leída por otros equipos y por lo tanto, no podría usarse para transferir archivos entre dispositivos. La compañía LG no ha ofrecido explicaciones al respecto, pero todo apunta a que, teniendo en cuenta esta circunstancia, los tiros también van por aquí.
Hay que tener en cuenta que tanto el Samsung Galaxy S7 como el LG G5 parten de una capacidad de almacenamiento de 32 GB, lo suficientemente holgada como para prestar a los usuarios un buen servicio. No obstante, conviene tener en cuenta que nos encontramos ante un sistema operativo abierto y que, dependiendo de la reacción de los usuarios, siempre existe la posibilidad de que Samsung y LG se propongan activar esta opción.
Y a ti, ¿qué te parece? ¿Crees que la decisión es un acierto por parte de los fabricantes? ¡Cuéntanos tus impresiones abajo en los comentarios!