Hace algunos días hablamos sobre la posibilidad de que el nuevo Samsung Galaxy S5 pueda llegar al mercado equipado con un sensor para detectar el movimiento de los ojos. Se trataría de una característica inédita que trataría de mejorar y/o perfeccionar la tecnología del sensor de huellas dactilares que ya se encuentra integrada en exclusiva en equipos como el iPhone 5S o el HTC One Max. Es cierto que en el momento en que se filtró la noticia, fueron muchos los medios que no le dieron mucha credibilidad al asunto. Hoy, sin embargo, se ha publicado un dato que nos hace pensar en esta posibilidad como una característica real. El medio Patent Bolt acaba de descubrir que Samsung ha registrado recientemente una patente basada en una técnica de escaneo del iris que podría coincidir con la herramienta sobre la que hablábamos hace algunas semanas. Esto significa, además, que el próximo Samsung Galaxy S5 podría ser uno de los candidatos a incorporar esta avanzada tecnología…
Como decíamos, el sistema que acaba de patentar Samsung utiliza una técnica para escanear el iris. Se trata de una herramienta que ofrecería a los usuarios algunas ventajas importantes como una detección incluso más rápida que los sistemas de detección de huellas dactilares. A todo esto, Samsung reduciría considerablemente los costos a la hora de aplicarlo en sus productos. En primer lugar, porque utilizaría una aplicación desarrollada por la propia marca. En segundo, porque los sensores de huellas dactilares suelen tener un coste de fabricación mucho más elevado. La documentación filtrada con el registro de esta patente ofrece información acerca de la arquitectura de este sofisticado sistema de detección ocular.
Según parece, los smartphones tendrían que llevar instalada una cámara y un sensor de proximidad y de emisión de luz. El sensor de proximidad sería el encargado de detectar cuando un objeto se acerca al objetivo de la cámara. Este llevaría, adicionalmente, una unidad capaz de encontrar el iris del ojo, analizarlo y hacer coincidir la información con la del iris del usuario que se ha registrado en el dispositivo. Estos datos, lógicamente, coincidirían con los de su propietario, aunque no tendríamos que descartar la posibilidad de registrar más de un iris y de crear distintos usuarios para un mismo smartphone. Por ejemplo: los miembros de una misma familia o los de un equipo de trabajo que utilizan el mismo teléfono.
Los medios más pesimistas son de la opinión que todavía es pronto para que encontremos este sensor de huellas dactilares instalado en el Samsung Galaxy S5. Si no llega integrado en el próximo buque insignia de la coreana, es posible que lo veamos en otros dispositivos, como por ejemplo el Samsung Galaxy Note 4, cuyo lanzamiento no tendría lugar hasta septiembre del próximo año 2014, o en la futura serie Galaxy F de smartphones de altísima gama que pretende poner en marcha Samsung. Si los rumores son ciertos, el lanzamiento del Samsung Galaxy S5 podría avanzarse a principios de enero, aunque lo que está verdaderamente claro es que el dispositivo se dará a conocer antes de marzo o abril de 2014.