En los últimos tiempos han comenzado a surgir portátiles potentes llamados ultrabooks. Uno de los puntos más atractivos de estos equipos está en la inclusión de una tarjeta SSD como sistema de almacenamiento. Estas tarjetas permiten que el portátil se encienda de forma muy rápida (la diferencia con el disco duro es más que notable). No obstante, para el resto de los casos la optimización del sistema es un punto vital para evitar que tengamos que esperar de más a la hora de encender el ordenador. Te contamos cuatro consejos interesantes para mejorar la velocidad de arranque del ordenador.
TuneUp Utilities, una herramienta bastante utilizada para mejorar el rendimiento, ha elaborado cuatro consejos básicos para aumentar la rapidez del equipo a la hora del arranque. En primer lugar, un consejo muy manido pero que resulta realmente vital a la hora de mejorar los tiempos de inicio está en desactivar los programas que se inician con el sistema y que no son realmente necesarios. Una opción es utilizar la herramienta integrada en TuneUp Utilities. Nosotros recomendamos echar mano de Soluto, un programa que destaca por la claridad y sencillez de uso. Con Soluto se estudia el tiempo que «roba» cada aplicación o proceso que se abre con el inicio del sistema, y se ofrece la opción de detenerlo o bien de posponer su funcionamiento hasta que el ordenador se haya iniciado y no estemos realizando ninguna tarea que consuma recursos.
El segundo consejo que se ofrece es desactivar los dispositivos del ordenador que no utilicemos habitualmente, como por ejemplo el Bluetooth o la Webcam. Estos dispositivos consumen recursos a la hora de iniciar el sistema y pueden ralentizar el proceso. Para llevar a cabo esta desconexión temporal hay que ir al administrador de dispositivos de Windows. Puedes encontrar el administrador de dispositivos en el panel de control (en Windows 7 Panel de Control, Hardware y sonido y luego Administrador de dispositivos). No se recomienda deshabilitar aquellos componentes de los que no tengamos muy claro su utilidad en el sistema. Para detener un dispositivo, pinchamos en el botón derecho sobre él y luego sobre la opción «deshabilitar». En el momento en que necesitamos utilizarlo de nuevo seguimos el mismo camino y «habilitar».
En tercer lugar, se aconseja aumentar la memoria RAM del equipo. Se trata de un componente bastante barato en comparación con el procesador y puede suponer una diferencia notable a la hora de arrancar el PC. El último consejo que se ofrece estriba en cambiar la configuración de la BIOS (la BIOS es el software que controla las opciones de configuración básicas del ordenador). Los ordenadores tienen diferentes maneras de acceder a la BIOS durante el arranque. En muchos casos se accede presionando la tecla suprimir cuando se está iniciando el ordenador (antes de que cargue el sistema). Desde esta plataforma se puede determinar que el arranque del sistema solo se realice desde el disco duro, dejando a un lado la unidad óptica o el USB. De este modo, se podrán ahorrar unos segundos. Sea como fuere, solo recomendamos llevar a cabo este consejo si se está familiarizado con el funcionamiento de la BIOS.