Netflix acaba de reconocer que cuenta con más de 20 millones de suscriptores a sus servicios de vídeo en streaming. Eso incluye los clientes en Estados Unidos, Canadá y Latinoamérica. Su base de abonados ha caído durante el segundo y el tercer trimestre del año 2011. La pérdida de suscriptores se ha debido, por un lado, a la polémica subida de precios de este verano.
Por otro lado, el plan fallido de separar la actividad de alquiler de películas en DVD creando una nueva división también ha lastrado el atractivo de la compañía para los consumidores. Como respuesta, Netflix ha plegado velas, y ha paralizado su expansión internacional. Incluso se llegó a barajar su aterrizaje en España, que está descartado hasta nuevo aviso.
De los proyectos para conquistar el mercado europeo, lo único que parece quedar en pie es el lanzamiento de Netflix en Reino Unido e Irlanda, “a principios de 2012”. Ahora bien, en la compañía parecen contentos con el cierre del ejercicio 2011, porque las horas de visionado han crecido. Durante el último trimestre de 2011, los usuarios de Netflix han visto más de 2.000 millones de horas de películas y de series de televisión en línea.
La compañía está concentrándose en sus clientes de servicios en streaming. Su catálogo de series de televisión es muy completo. En 2011 ha cerrado acuerdos de una duración plurianual con la CBS, la Fox, la Disney la NBC Universal, la MGM, Lionsgate, Miramax o Dreamworks Animation, entre otros estudios y productoras. Además, incluso consigue contratar algunos derechos en exclusiva. Como la serie de Kevin Spacey “House of Cards” del pasado año, o la nueva serie de gánsters “Lilyhammer” que ofrecerá en febrero.