Pentax Q, cámara de objetivos intercambiables muy pequeña

Los de Pentax lo han vuelto a hacer. Han creado una de las cámaras de objetivos intercambiables más pequeñas del mundo. En su dí­a, en los tiempos de la fotografí­a analógica, sacaron al mercado la Pentax 110 y sucesoras, que copiaban en diminuto las caracterí­sticas de las cámaras reflex. Ahora, presentan la Pentax Q, que está basada en las cámaras sin espejo que ahora están tan de moda, pero con un tamaño algo más pequeño, 98 x 57.5 x 31mm, y un peso de 200 g. Es cierto que al eliminar el espejo, ya puede conseguir una cierta reducción del tamaño. Pero eso no basta. Por eso han tenido que emplear un sensor de imagen retroiluminado de 12.4 Mpx con dimensiones reducidas, similar al que está en las compactas baratas del mercado.

Ciertamente, esto no anima demasiado sobre las posibles caracterí­sticas de imagen de este invento, aunque no importa demasiado. El diseño es tan atractivo, con un chasis acabado en magnesio con aplicaciones de un material con tacto de cuero, que probablemente volará de las estanterí­as de las tiendas. Los coleccionistas de artilugios fotográficos querrán tener una de estas cámaras, sin importar demasiado si hace buenas o malas fotos. Pentax ha diseñado una nueva montura llamada Q, que tiene un diámetro 6 mm menor que el de la montura K empleada en las cámaras reflex más grandes de la casa.

La pantalla de tres pulgadas ocupa prácticamente la totalidad de la trasera de la cámara, y permite un visionado muy cómodo de las fotos. De todas formas, si alguien quiere una experiencia más analógica o retro, puede utilizar el visor óptico que se coloca en la zapata de accesorios, y que cuesta más de 220 euros adicionales. El flash es otro de esos detalles espectaculares que hacen que la cámara te guste. Salta desde el cuerpo en un montaje plegable parecido al de los muñecos que salen de las cajas sorpresa. Ya han presentado seis objetivos para sistema, que cubren prácticamente todas las necesidades de los fotógrafos aficionados e incluso de los fotógrafos serios.

Y aunque esta cámara tenga dimensiones reducidas, la electrónica es muy competente. El usuario puede hacer fotografí­as en modo totalmente automático, pero también puede elegir un modo manual donde elige todos los parámetros de imagen. Las imágenes fotográficas se almacenan en formato RAW o en JPEG, y puede captar además secuencias de ví­deo 1080p, que si lo juntamos con los objetivos intercambiables, es muy tentador. Por fin, presenta un modo de alto rango dinámico que permite obtener fotografí­as espectaculares. Como incluye también un estabilizador de imagen, no habrá foto mala. Claro que su precio está cercano a los 800 euros sólo por el cuerpo con un solo objetivo.