Esto es lo que puede pasar cuando un joven estudiante de ingeniería tiene que hacer un proyecto para la universidad. En esta ocasión, no es un lanzador de cervezas de salón, sino algo enfocado a otro de los grandes placeres humanos: comer. Es el robot cocinero de magdalenas, fabricado por los franceses Carl Boucher y Dominic Dussault.
Él solito es capaz de hornear cuatro magdalenas cada diez minutos. Y, ahí es nada, puede hacer hasta 50 magdalenas sin añadir nuevos ingredientes (tiene un buen depósito para la masa). Un cacharro que no le vendría mal a más de una cafetería donde los dulces del mostrador son los mismos según avanza la semana. Para completar la jugada en el desayuno casero, se recomienda mojar las magdalenas en un café o Cola-Cao removido por la taza Self Stirring.
Foto de Naty Rive / Vía: Gizmodo