La firma suiza Macroswiss, especializada en tecnología para la guerra ha sido la elegida por el ejército de los Estados Unidos para proporcionarles un nuevo «juguetito» a los chicos de Bush. El invento se llama UGV (Umanned Ground Vehicles) y viene a ser un pequeño vehículo que puede llevar un soldado en la mochila. Después el chisme se puede enviar teledirigido para cumplir cualquier misión.
Es una especie de mini-tanque, muy robusto y que, en lugar de usa orugas como el robot minero 3D-R1, lleva seis ruedas con tracción a todas ellas. Pesan sólo 5 kilos, pero pueden transportar hasta cuatro veces su peso, lo que los hace perfectos para ir equipados con sistemas espías de vigilancia, radares, etc.
Alcanzan una velocidad relativamente alta, hasta diez kilómetros por hora y están pensados para usarse en entornos urbanos y en campo abierto. Su principal función será la de detectar, reconocer e identificar objetivos a distancia usando sensores ópticos, térmicos un radar de última generación.
Incorpora una función para regresar él solito a un punto programado. Será un gran aliado en funciones de reconocimiento de edificios, para elaborar tácticas de ataque, etc. Quizás no sea tan discreto como los robots-espía con forma de insecto pero parece más versátil.
Vía: gizmag.
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