Que conste que no tienen la mejor calidad de sonido del mundo. No se pueden comparar con la Bose SoundDock Portable de Bose o alguna de las múltiples soluciones para el iPod. Ni siquiera pueden rivalizar con los de Bird Electron pero, entre la satisfacción que te da ver esos “cacharritos” que tú mismo has construido y la pasta que te vas a ahorrar, te van a sonar a música celestial.
La verdad es que hay que estar aburrido para pensar en este tipo de cosas o tener una mente muy creativa. Como veis en las fotos del proceso paso a paso, con un par de latas de guisantes u otra conserva, unos viejos altavoces de, por ejemplo, una postal musical o algún viejo transistor, un par de tornillos, una malla metálica y un poco de cable, podreis construir estos altavoces artesanales.
Si estás aburrido, eres un poco manitas y reúnes los materiales, que tampoco es que sea demasiado difícil, podrás construirte tus propios altavoces para reproductores portátiles y decorarlos como tu quieras. El acabado es cosa de tu imaginación y habilidad artística. Hay incluso versiones hechas con cajas de cartón plegables, para mayor portabilidad e incluso con platos de plástico sobre un cartón.
Vía Wired. Foto: José Pino.
Jajaja tienen un aire retro maravilloso.