Microsoft acaba de presentar sus resultados económicos correspondientes al segundo trimestre del año, con un balance en general bastante positivo incluso para los analistas. Esto se debe, sobre todo, al gran rendimiento que sigue ofreciendo su paquete de Office y al exponencial crecimiento de sus servicios en la nube de la mano de Azure. Pero también se aprecia una mejora en los resultados de su sistema operativo Windows, lo que podría significar que el mercado de PC empieza a estabilizarse.
La compañía estadounidense registró unos ingresos de 22.600 millones de dólares, apróximadamente 20.500 millones de euros, lo que supone un incremento del 5 por ciento. El beneficio operativo creció un 6 por ciento, llegando a los 6.200 millones de dólares, algo más de 2.300 millones de euros. Sin embargo, las consecuencias de la compra de Nokia, con el pago de 7500 millones de dólares (unos 6.800 millones de euros) propiciaron un descenso del precio de las acciones.
Estos buenos resultados tienen un origen claro en dos vertientes donde la compañía se ha mostrado muy fuerte. por un lado destaca el enorme crecimiento de los servicios en la nube, donde Azure ha mostrado un crecimiento exponencial superior al 102 por ciento interanual. Por otro, un clásico, Microsoft Office, que sigue dando un rendimiento muy bueno, sobre todo la versión en nube (Office 365).
Estos datos, unidos al aumento de un 27 por ciento de las ventas de licencias OEM de Windows (paquete para empresas) y a pesar de que el global de ingresos en computación personal ha bajado, podemos afirmar que el mercado PC se estabiliza por fin tras años de caída. No hay que olvidar que en 9 de cada 10 ordenadores se instala Windows.
Otro ámbito que sale beneficiado es el grupo Surface, que ha experimentado un crecimiento del 9 por ciento gracias al buen recibimiento del mercado al Surface Pro 4 y al Surface Book. En cuanto respecta a las consolas, se puede ver el vaso medio lleno o medio vacío. Por un lado los 49 millones de usuarios de Xbox Live hacen que se haya producido un aumento precisamente del 49 por ciento en el último año. Sin embargo, en las ventas de consolas los números de Xbox están muy lejos de la PlayStation 4 de Sony y los ingresos han caído un 33 por ciento.
Windows Phone registró una nueva caída del 71 por ciento, lo que supone un descenso del 2 por ciento de la cuota de mercado en cuanto a teléfonos inteligentes se refiere. Lo peor aún son las previsiones, que indican que esto no verá la salida, al menos a corto plazo. Seguirán saliendo modelos de la talla del Elite x3 de HP pero a día de hoy, el impacto de Windows Phone es absolutamente irrelevante.
Recapitulando, Office 365 y Azure mantienen a Microsoft en crecimiento, unido a la grata sorpresa del aumento de las licencias OEM de Windows. Pero los resultados reales dejan bastante trabajo por delante a la compañía estadounidense.
