PACMAN es más que un videojuego: es un icono, el paradigma de una época, los ochenta, y de una subcultura emergente, la digital. Es normal que en torno a este tragabolas bidimensional haya toda una serie de motivos y artículos que sin atraen con devoción religiosa a los fanáticos del videojuego. Ahora llega un nuevo grano de arena al desierto con una pieza fundamental en cualquier oficina friki: el STAP-Man, o lo que es lo mismo, una singular grapadora con la forma de nuestro surca-laberintos preferido.
El fabricante de tamaña curiosidad es la empresa británica Panik Design, compañía especializada en artículos de diseño danés e italiano pensado para entornos domésticos y profesionales, que en alguna que otra ocasión ya nos ha sorprendido con sus originales propuestas. Para esta ocasión, el artículo se presenta en dos sencillos (¿o más bien minimalistas?) colores: blanco y negro. Quién dijo miedo.
Con unas medidas de 2,5 x 6,7 centímetros, el STAP-Man se convierte en una opción comodísima (y muy molona) de agrupar los folios más rebeldes de una vez por todas como si de bolitas mágicas se tratase. Si te pica la curiosidad y no te importa gastarte 18 euros en una grapadora, puedes hacer tu encargo directamente desde la web comercial de Panik Design. En un plazo de entre uno y tres días (lo que tarde en llegar tu grapadora desde, atiende, Tailandia) tendrás este simpático cachibache diseñado por Ankul Assavaviboonpan, que no sabemos quién es, pero podemos asegurar que no es de Castilblanco de los Arroyos.
Vía: Dvice