Dos meses y medio, dos inversores y 840 productores. Es el balance que ya pueden hacer los componentes de Riot Cinema Collective, la productora que se encargará de filmar El Cosmonauta, el primer largometraje hecho en territorio español con la licencia Creative Commons.
Los artífices del proyecto son tres estudiantes de Comunicación Audiovisual dispuestos a romper con los esquemas de la vigente industria del cine. Y es que la producción de la película es completamente libre, pudiendo aportar (todos aquellos que lo deseen) el importe de dos euros a través de la tienda de merchandasing de El Cosmonauta.
Se trata de una producción colectiva con dos tipos de inversores. Por una parte están los ciudadanos de a pie, los que podrán adquirir camisetas, libros, insignias, monedas y hasta bolígrafos espaciales a precios populares, además del Wellcome Pack para productores que incluye chapa y pegatina.
Riot Cinema Collective te asegura además la aparición estelar en los títulos de crédito y un certificado que te acredita como productor de la película. La personas que superen la aportación de 1.000 euros serán considerados inversores y por lo tanto, comprarán una parte de la película cuya parte proporcional servirá para deducir las ganancias una vez estrenada.
La idea de los tres jóvenes productores Bruno Teixidor, Carola Rodríguez y Nicolás Alcalá es la de registrar «El Cosmonauta» como fuente original Creative Commons para que el público pueda hacer sus modificaciones, siempre y cuando registre el resultado con la misma licencia libre.
Poco a poco ya han conseguido la colaboración de los cosmonautas Boris Volynov y Sergey Volkov, de J.L. Ruiz de Gopegui, ex-director de los programas NASA en España, además de distintos profesionales del sector. Eduard Artemiev, compositor de la banda sonora de la película Solaris, ha cedido el uso de las grabaciones y la directora de vestuario, les diseñará un modelo en exclusiva.
Si las cosas van como hasta ahora, Riot Cinema Collective quizás podrá conseguir la cifra límite de 158.000 euros para pagar la película y quién sabe si los 450.000 euros que hacen falta para pagar los sueldos de los que han colaborado en el proyecto. En ese caso, la película se empezaría a rodar a partir de abril del 2010. Para que luego, después de subvenciones y más subvenciones, el 40% de las películas españolas no se estrenen o tengan menos de 100 espectadores.
Vía: El País
