
Tengo claro que no me compraría un smartwatch en 2024 sin estas características que te voy a explicar a continuación, ya que me parecen totalmente imprescindibles.
Carga rápida
El tamaño o la forma es algo que más o menos me da igual, puesto que he tenido relojes redondos, cuadrados, más grandes o más pequeños. En cuanto a la autonomía, se puede llegar a sacrificar en cierta medida por tener un ‘software’ de calidad, pero entonces la carga rápida es imprescindible para que el reloj se cargue de manera veloz, aunque dure poco tiempo encendido. De esta forma se compensa una cosa con la otra.
Lo ideal es que el reloj esté totalmente cargado en menos de una hora, siendo un dispositivo con una batería normal en cuanto a miliamperios hora.
Pantalla siempre activa
Estoy de acuerdo con los que consideran que una pantalla siempre encendida consume bastante batería o es innecesaria en un reloj inteligente en muchos aspectos, pero para alguien que quiere conocer la hora en todo momento y que le gusta controlar la sesión de trabajo productiva, tener la capacidad de mirar mi muñeca y ver los datos es vital.
El hecho de tener que encender la pantalla cada vez que miras el reloj se me hace un incordio y por eso necesito que en la pantalla siempre esté representada la hora que es.
Notificaciones interactivas
En este caso el reloj lo considero como una extensión de mi propio teléfono inteligente, por lo que me debe dejar interactuar. Me gusta poder responder a las notificaciones que me llegan a través de mi reloj con todos los detalles, o al menos poder reconocerlas. Un sistema de interacción desarrollado para las notificaciones simplifica las cosas y hace que todo sea muchísimo más cómodo.

La personalización es muy importante
Está claro que en muchos casos no es posible cambiar de ‘smartwatch’ cada año, por lo que, para que sientas que estrenas un reloj cada poco tiempo, este debería tener suficientes esferas intercambiables (algo que ya es normal), y si son interactivas mejor, pero también un sistema para cambiar las correas de manera fácil, rápida y con muchas opciones de personalización.
No hay que olvidar que una parte fundamental para que un ‘smartwatch’ sea cómodo es gracias en gran parte a la correa, por lo que no solo debe ser un elemento de estilo para completar al reloj, sino también una parte esencial para el bienestar al llevar puesto el reloj inteligente.

Medición del sueño
Es importante monitorizar el sueño a lo largo del día, no sólo cuando te toca ir a la cama por la noche. Es decir, que me gustan los relojes que son capaces de capturar el sueño en todo momento y no se limitan a tomar datos sólo en la noche.
Cuando estás de vacaciones y te puedes echar una siesta, está muy bien que el reloj sea capaz de detectarlo, puesto que también podrás conocer los datos de cómo son esos momentos en los que estás descansando.
Además, debe ser un ‘smartwatch’ capaz de detectar las distintas fases del sueño, para conseguir conocer cuanto tiempo estas en cada una de ellas y como se comporta tu cuerpo.

Detección automática del ejercicio físico
La capacidad de detectar automáticamente los entrenamientos es otra característica imprescindible en los relojes inteligentes.
La detección automática de entrenamientos resulta de gran ayuda, ya que asegura que en el momento en el que comience el ejercicio físico el reloj será capaz de comenzar a recopilar datos que serán de gran ayuda para analizar que tal ha ido el entrenamiento. Pudiendo ser en el gimnasio, el deporte que se haya practicado, la salida para correr o el entrenamiento en la piscina.
A esto se le puede sumar que tenga los máximos modos de deporte para ponerle exactamente cuál estás realizando y que el reloj se adapte de manera mucho más efectiva.