Parecía que AMD no iba a sorprender, que su destino era estar siempre a la sombra de Intel. Pero en el 2017 llegaron los AMD Ryzen, prometían muchos más núcleos que los homónimos en Intel y con un precio inferior. Su llegada supuso un golpe sobre la mesa que hizo temblar al gigante azul, tres años más tarde los fabricantes empiezan a postar por estos procesadores en equipos de último nivel. Y, ese es justo el caso del Asus ROG Zephyrus G14. He probado este portátil con el AMD Ryzen 7 4800HS y es un David en esteroides con poquísimo miedo a Goliat.
Diseño gaming, pero no mucho
Sí, el Asus ROG Zephyrus G14 es un portátil gaming. Pertenece a esa categoría de producto destinado a los más jugones. Pero no encontraremos las estridencias típicas de este tipo de portátiles: iluminación RGB, líneas de diseño agresivas y dimensiones excesivas. En su lugar, Asus ha decidido apostar por una estética elegante y refinada. Esta sobriedad puede llegar a parecer sosa si la comparamos con otras propuestas de la empresa. Eso sí, esto no significa que carezca de personalidad. Asus ha dado pinceladas estéticas que consiguen diferenciarlo de cualquier portátil.
La principal y más llamativa es la que encontraremos en su frontal, la tapa de aluminio en color gris oscuro o Gris Eclipse tiene dos texturas: una microperforada y otra con acabado en metal cepillado. La zona microperforada es puramente estética en la unidad que he tenido en mis manos, pero en otras versiones del Asus ROG Zephyrus G14 se incluirá la tecnología AniMe Matrix. Esta tecnología utiliza 1.215 mini-LED escondidos tras las perforaciones para iluminar la tapa del portátil, siendo totalmente personalizable en aspecto. Incluso permite importar GIFs que se reproducirán en bucle en la tapa del portátil.
No acaban ahí los detalles en la tapa del Asus ROG Zephyrus G14, en la esquina inferior izquierda (si miramos el portátil desde arriba) está situada la serigrafia con el logo y eslogan de los productos ROG de Asus. Esta placa metálica con acabado espejo contrasta sin desentonar con la estética general sobria. Además, esta tapa se prolonga hasta la bisagra sin tener una línea divisoria evidente. Y, aunque esto pueda parecer ornamental, en realidad cumple una función: con el portátil abierto la bisagra eleva el equipo mejorando la ergonomía a la hora de escribir y la captación de aire fresco (frío) para mantener a raya las temperaturas de los componentes.
Y, no tenemos que preocuparnos por la mesa en la que lo apoyemos o por la integridad del propio portátil. El Asus ROG Zephyrus G14 está construido en aluminio en su totalidad y en la zona de la bisagra tiene refuerzos de goma para proteger el mobiliario, aunque esos son de menor tamaño en comparación con los que encontramos en la base del portátil. Ya que estamos aquí, recalcar las múltiples rejillas de ventilación. Las dos principales se encuentran en ambos extremos laterales superiores, justo encima de los ventiladores, pero hay dos más situadas en el ecuador de esta tapa inferior. Existen dos rejillas más, situadas en los extremos laterales inferiores, pero estas son para los altavoces.
Si saltamos a los laterales, nos topamos con más rejillas de ventilación. En la zona de la bisagra tenemos dos aperturas separadas por otra serigrafia que indica la familia del producto, Zephyrus. En los laterales también encontramos amplias rejillas de ventilación que ocupan casi la mitad del espacio, dejando el resto para las conexiones físicas. En el lateral derecho se reparten el espacio dos puertos USB 3.2 Gen 1 de Tipo A, los USB de toda la vida, un USB 3.2 Gen 2 de Tipo C y un cierre Kensington. El lateral opuesto se encuentra otro puerto USB 3.2 Gen 2 de Tipo C, pero compatible con DisplayPort 1.4 y Power Delivery (podemos cargar el portátil y suministras carga a los aparatos que conectemos), un HDMI 2.0b, puerto de auriculares y micrófono combinado de 3.5 milímetros y por último la clavija de carga propietaria. El lateral por el que levantamos la tapa del portátil es completamente liso.
Hecho el repaso exterior del Asus ROG Zephyrus G14, hablemos del interior. Al levantar la tapa, utilizando solo una mano, lo primero que vemos es un touchpad de buen tamaño (teniendo en cuenta el volumen general del equipo) en las antípodas dos rejillas para otros dos altavoces. Este touchpad da paso a un teclado sin pad numérico que se encuentra unos milímetros por debajo de la altura del chasis. Por encima del teclado, casi llegando a la pantalla, se encuentran los botones de control multimedia y un botón especial que lanza la aplicación Armoury Crate de la que hablaremos en el apartado del software. En un lateral el botón de encendido que también actúa como lector de huellas. Encima de todo esto la pantalla de 14 pulgadas con unos marcos reducidos, aprovechamiento del 85%, pero con un marco inferior muy pronunciado.
Y no, no hay webcam. Sí, habéis leído bien, Asus ha prescindido de la webcam y, lo cierto es que, viendo a la competencia, en el marco superior entraba perfectamente una cámara para realizar videollamadas. Asus puede excusarse con el tamaño del Asus ROG Zephyrus, menos de 35 cm de largo con poco más de un centímetro y medio de grosor, pero lo que más sorprende son sus 1,6 kg. Estas dimensiones lo convierten casi en un ultrabook, cabe en cualquier mochila y, además, gracias a su construcción sólida y robusta no hay miedo ninguno por los temidos balanceos o golpes ocasionales.
Teclado y touchpad
Escribir en el Asus ROG Zephyrus G14 es una experiencia reconfortante. La sensación que transmite a la hora de teclear está a caballo entre uno de membrana y uno mecánico. El recorrido es mayor al de uno de membrana, pero no ofrece la resistencia de uno mecánico. Lo único que he notado es que he necesitado de unas horas de tecleo constante para hacerme a su respuesta. Está retroiluminado y al tener las teclas en color negro, la iluminación es visible incluso a plena luz del día. La disposición de las teclas es correcta, hay espacio suficiente entre los caracteres y cuenta con tecnología Overstroke pare mejorar su rendimiento en juegos, disminuyendo el recorrido de activación.
Mi única queja son las teclas multimedia que están separadas en una fila independiente, pero que no cuentan con una tecla para silenciar el portátil y por lo tanto tendremos que recurrir a utilizar el atajo de la tecla función. En cuanto al touchpad, este tiene un tamaño más que solvente para las dimensiones generales del equipo. La superficie tiene un recubrimiento que la hace más deslizante para facilitar su uso, es compatible con los gestos de Windows. La respuesta es fiable y precisa, el sistema de clic funciona en todo el touchpad con una agradable respuesta debido al interruptor mecánico.
Asus ROG Zephyrus G14, ficha técnica
Asus ROG Zephyrus G14 | |
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Pantalla | 14 pulgadas, diagonal de 35,56cm, con resolución Full HD (1.920 x 1080 píxeles) en formato 16:9 con acabado mate (antirreflejos) y tecnología IPS para el panel Tasa de refresco de 120Hz con AMD Freesync, brillo de 300 nits Validación X-Rite de Pantone: NTSC 72%, SRGB 100%, Adobe 75,35% Contraste 1000:1 y ángulos de visión de 170°/170° |
Procesador | AMD Ryzen 7 4800HS APU (8 Núcleos, 16 Subprocesos, Caché: 12MB Level 2&3, 2.90GHz hasta 4.20GHz, 64-bit) |
Tarjeta Gráfica | NVIDIA GeForce RTX 2060 con Diseño Max-Q 6GB GDDR6 VRAM Integrada: AMD Radeon Graphics |
Memoria RAM | 16GB (8GB + 8GB [EN PLACA]) DDR4 3200MHz |
Almacenamiento | 512GB SSD M.2 PCIe NVMe |
Sonido | 2 Altavoces Estéreo de 2,5W Integrados 2 Altavoces de Agudos de 0,7W Integrados Micrófono de Matriz compatible con reconocimiento de voz de Cortana y Alexa Tecnología Dolby Atmos Tecnología Smart Amp |
Cámara | No integra webcam |
Sistema operativo | Sin sistema operativo (analizado con Windows 10 Pro) |
Conectividad y seguridad | Intel Wi-Fi 6 (Gig+)(802.11ax) 2×2 Bluetooth 5.0 Lector de huellas |
Batería | 76Wh, 4 Celdas, Ion de Lítio con hasta 10 horas de autonomía |
Conectores | 2 x USB 3.2 (GEN1) 1 x USB 3.2 (GEN2) 1 x USB-C™ 3.2 (GEN2) (DisplayPort™ 1.4/Power Delivery/G-Sync) 1 x Salida Auriculares/Entrada Micrófono 3.5mm (combo) 1 x HDMI 2.0b 1 x Bloqueo de Seguridad Kensington 1 x Entrada de Corriente |
Dimensiones | 324 x 220 x 17,9 mm milímetros y 1,6 kilogramos |
Adaptador de corriente | 180W Adaptador AC Salida: 20V DC, 9A, 180W Entrada: 100~240V AC, 50/60Hz universal |
Fecha de lanzamiento | Disponible |
Precio | Desde 1.500 euros |
Asus ROG Zephyrus G14, análisis en vídeo
120Hz para los gamers y certificación Pantone para los editores
14 pulgadas pensadas para dos públicos diferentes. En la unidad que he probado del Asus ROG Zephyrus G14 tiene como ventana al mundo digital un panel antirreflejos IPS Full HD (1.920 x 1.080 píxeles) con tasa de refresco de 120Hz con AMD Freesync, certificación Pantone (espacios de color: NTSC 72%, SRGB 100%, Adobe 75,35%), ángulos de visión de 170º y un brillo de 300 nits. Y, tras la retahíla de datos, vamos a ver qué tal se comporta.
Mi perfil de usuario es de gamer promedio y editor de video avanzado. Soy el que está detrás de la mayoría de los vídeos que ves en nuestro canal de YouTube. Por lo que mi perspectiva a la hora de analizar esta pantalla pasa por dos puntos: comportamiento en juegos y fidelidad a la hora de reproducir colores. En ambos casos el Asus ROG Zephyrus G14 ha cumplido, empezaré por mi faceta de editor de vídeo. La certificación por parte de Pantone es siempre bien recibida, este portátil en concreto tiene dos de los espacios de color que más utilizo a la hora de editar: SRGB y Adobe. Es gratificante la fidelidad de colores a la hora de hacer correcciones de color en Adobe Premiere, me permite relajarme porque sé que el resultado final es lo que mis ojos están viendo.
Del desempeño puro y duro a la hora de los juegos hablaremos en el apartado de la potencia. Pero que el Asus ROG Zephyrus G14 llegue con una pantalla de 120Hz deja claras sus intenciones. Bien es cierto que podríamos haber esperado 144Hz, pero está claro que si queremos jugar de manera profesional las 14 pulgadas no son suficientes. Los 120Hz son una opción más que razonable, porque permite montar un panel IPS en lugar de uno TN o VA, con lo que ganamos en profundidad de color a la hora de jugar a títulos más contemplativos. Pero cuando queremos disparar primero, los 120Hz se notan y, aunque no mejoren las habilidades propias de cada jugador, suponen una ventaja respecto a los paneles de 60Hz.
Dolby Atmos pone el sonido a los cuatro altavoces
Los portátiles gaming no suelen tener un sonido digno de mención, la mayoría tiene altavoces anecdóticos. Para usar a la hora de ver un vídeo en YouTube, pero no para disfrutar de una película. En el Asus ROG Zephyrus G14 es diferente, tiene cuatro altavoces (dos en la parte superior y dos en la inferior) los que están apuntando al usuario son dos tweeters de 0,7W y los que apuntan hacia la superficie en la que está apoyado el portátil son dos woofers de 2,5W. Este sistema de altavoces integra la tecnología de audio Dolby Atmos.
El resultado es una experiencia auditiva sobresaliente, es potente y a nivel máximo resulta hasta molesto, pero no porque exista ruido metálico o distorsión, si no porque el volumen es atronador. Hay nitidez y claridad en graves, medios y agudos. Se escucha como se tiene que escuchar, aunque si queremos matizar determinadas frecuencias podemos hacer uso de la aplicación de Dolby Access, para ecualizar a nuestro gusto. ¿Los micrófonos? Estos están integrados en los dos tweeters y son compatibles tanto con Cortana como con Alexa.
AMD y NVIDIA de la mano en el interior del Asus ROG Zephyrus G14
Lo mejor de los dos mundos, AMD Ryzen 7 4800HS y NVIDIA RTX 2060 Max-Q de la mano en el interior del Asus ROG Zephyrus G14. Si el nombre del procesador no os dice mucho, unos datos a tener en cuenta: está construido bajo la litografía de 7 nanómetros, cuenta con 8 núcleos y 16 procesadores lógicos (hilos), trabaja con una frecuencia base de 2.9 GHz, aunque puede llegar hasta los 4.2 GHz en modo turbo y su consumo es de 35W. Las cifras hablan por si solas, estamos ante uno de los procesadores móviles más potentes hasta la fecha, solo superado por el Ryzen 9 4900HS.
La gráfica no se queda atrás, la NVIDIA RTX 2060 Max-Q que monta el Asus ROG Zephyrus G14 no es de las más potentes que podemos encontrar dentro de un portátil (RTX 2070, RTX 2080) pero con sus 6GB GDDR6 de memoria VRAM destinada al procesamiento gráfico, puede con casi todos los títulos y sin hacer muchas concesiones. Además, esta tarjeta gráfica permite utilizar el trazado de rayos en los juegos que admitan esta tecnología. 16GB de RAM DDR4, 8GB en placa y 8GB extraíbles, a 3200 MHz y 512GB en formato SSD PCIe 3.0 x4 NVMe complementan el conjunto técnico de este portátil. Al pasar CrystalDiskMark, las cifras de escritura y lectura son de 1876,59 y 1064,64 respectivamente. Es una puntuación buena, pero no sobresaliente. Si nos quedásemos cortos de espacio podemos sustituir el SSD por uno de mayor capacidad. Pero la RAM tendrá siempre como base 8GB que van soldados a la placa, es una decisión que entiendo por tamaño, pero que considero que lo adecuado habría sido tener 16GB soldados y capacidad para poner otros 16GB.
Con los datos sobre la mesa, veamos qué tal rinde en distintos ámbitos. Pero primero el resultado del test Cinebench R20: 3951 puntos. Sí, habéis leído bien, casi 4000 puntos en un ordenador portátil. En 3DMark el Asus ROG Zephyrus G14 llegó a los 5729 puntos en la prueba TimeSpy y 12769 en Fire Strike. Todos estos datos son de pruebas sintéticas y que sirven para hacernos una idea de la potencia pura del equipo. En el día a día el comportamiento es sobresaliente, puede absolutamente con todo lo que se le eche. La navegación y ofimática no suponen un problema. En cuanto a la edición de vídeo, en Adobe Premiere Pro mueve los clips de vídeo sin sudar ni una gota e incluso los que tienen resolución 4K. A la hora de exportar un vídeo con una línea de tiempo compleja con efectos, transiciones, gráficos, más de una pista de audio y video, lo hace en tiempos razonables. De hecho, el análisis en vídeo de este portátil lo he editado enteramente en él y no he echado de menos mi equipo de sobremesa con una RTX 2070 Super, i7 8700K y 32GB de RAM.
Los juegos tampoco suponen un problema, la combinación de componentes permite jugar a todos los títulos con mayor o menor calidad gráfica. Eso sí, hay pocos con los que alcanza y mantiene los 120fps necesarios para aprovechar al máximo la pantalla a 120Hz. En mis pruebas, el Doom con todos los ajustes en ultra y usando la API Vulkan rozó por momentos los 115-119 fotogramas por segundo, la cifra mínima dentro del juego estuvo siempre por encima de los 80fps y la media es de 110fps. En títulos más exigentes que puedan aprovechar el trazado de rayos de la RTX 2060 Max-Q como el Metro Exodus, la cifra media de fotogramas es 45fps, siempre con los gráficos al máximo. Si queremos podremos jugar a todo, dependerá de los sacrificios visuales que estemos dispuestos a hacer.
La potencia sin control no sirve de nada y en este caso el control llega con una refrigeración que mantiene a raya las temperaturas excesivas. Al abrir la tapa inferior nos encontramos con dos ventiladores de buen tamaño que enfrían un circuito de tuberías que sobrevuelan el procesador y la gráfica. Estos ventiladores en modo Turbo, como hemos realizado las pruebas y jugado, emiten un ruido que puede llegar a ser molesto, pero que es entendible. Durante las pruebas de estrés, las temperaturas han sido elevadas, llegando a rozar los 90 grados Celsius en el procesador y 80ºC en la gráfica. No son las mejores temperaturas, pero están tomadas tras haber puesto el Asus ROG Zephyrus al máximo durante un periodo continuado de tiempo. Solo un usuario extremadamente exigente llegará a tener estas temperaturas en un entorno real. A lo largo de mi experiencia no he conseguido llegar a estas cifras ni tras exportar un vídeo o jugar, tampoco he sentido un calor incomodo a la hora de teclear o en la zona donde descansan las muñecas al escribir.
Autonomía y seguridad
10 horas de autonomía prometidas que no se llegan a cumplir, pero que se quedan cerca. En el apartado anterior dejé claro que el Asus ROG Zephyrus G14 es una bestia en cuanto a potencia. Y, eso solo puede significar una autonomía pésima. Pero no es así, en un uso de ofimática y navegación consigue llegar a las 6 horas en un perfil de energía cercano al ahorro de batería y con el brillo de la pantalla al 100%. Si exigimos más, programas de edición, la autonomía se resiente y baja hasta las 4 horas. Lo que sí destroza la batería es jugar, no consigue aguantar más de 2 horas de juego continuo. Lo más seguro es que podamos estirar la autonomía hasta las 8 horas si reducimos el brillo de la pantalla y controlamos los procesos en segundo plano. En cuanto a la carga, en casi dos horas tenemos el 100% de la bateria. Podemos cargarlo utilizando el cargador que viene incluido en la caja, que no es excesivamente grande pero que tiene un tamaño considerable. Aunque también podemos utilizar un cargador USB C de 60W. Eso sí, la máxima potencia del procesador y gráfica solo la conseguiremos cuando conectemos el cargador original de clavija. Pero es de agradecer la opción del USB C, pues es más cómodo si llevamos el ordenador de viaje. En el apartado de la seguridad, el Asus ROG Zephyrus G14 solo tiene un método de desbloqueo y es la huella dactilar que se encuentra en el botón de encendido, su funcionamiento es correcto y acierta en la mayoría de las situaciones.
Armoury Crate como centro de control, pero sin Windows
El Asus ROG Zephyrus G14 se vende sin sistema operativo. Es una decisión está enfocada a poder reducir el coste de venta al público, pero por los casi 1.500 euros que cuesta, Asus podría incluir una licencia. Sí, instalar un sistema operativo es sencillo. Yo mismo lo he hecho a la hora de analizar este equipo, durante las pruebas y experiencia lo he tenido bajo Windows 10 Pro. Pero eso no significa que sea una decisión que aplaudir, principalmente por los inconvenientes que esto supone. No todos los usuarios son avanzados y entienden de las implicaciones de un equipo sin sistema operativo. El mayor problema son los drivers, tras instalar Windows 10 Pro no pude conectarme a internet hasta haber descargado desde otro ordenador el controlador necesario para que funcionase la tarjeta Wi-Fi. Además, el proceso es lento y tedioso, hay que ir manualmente seleccionando y descomprimiendo las carpetas, pasarlas a un USB para luego copiar los archivos e instalarlos en el portátil. Es una hora perdida y una sensación que tiene mucho que envidiar al “plug and play” de los equipos que si llegan con sistema operativo. Y, un consejo para Asus: incluid dentro del SSD una partición con un ejecutable que instale todos los drivers.
Una vez tengamos el Asus ROG Zephyrus G14 con Windows y con los drivers instalados, lo más recomendable es instalar el software Armoury Crate para gestionar el comportamiento de los componentes. Dentro de este programa hay diferentes apartados, pero el que nos interesa es el principal, pues es el que más información nos ofrece acerca de nuestro equipo. La estética es gamer, igual bajar un par de revoluciones a todo este diseño vendría bien. En general, si estás acostumbrado a programas de gestión de recursos, este programa no será muy difícil de comprender. En cambio, si es tu primera vez con un portátil de Asus, es posible que necesites un par de minutos o una visita a su web para entender que quieren decir todos esos números. Para lo que más me he visto usando este software es para monitorizar temperaturas y controlar los perfiles de rendimiento. Asus ofrece cinco, uno de ellos recibe el nombre de Windows y lo que hace es que controlaremos el rendimiento dependiendo del perfil de batería que tengamos seleccionado. Los otros cuatro son propios de Asus: Silencioso (prioriza reducir el ruido de los ventiladores a costa del rendimiento), Equilibrado (el punto medio entre ruido y rendimiento), Turbo (el rendimiento es lo que importa, el ruido es secundario) y Manual (el usuario elige velocidad de ventiladores, procesador y GPU)
Asus ROG Zephyrus G14, apostar por los Ryzen de AMD es todo un acierto
El Asus ROG Zephyrus G14 se postula como uno de los mejores portátiles gaming del momento y más si tenemos en cuenta lo que ofrece en su tamaño. Su precio no excesivo, pero sí elevado. Parte de los 1500 euros en una configuración con 512GB de almacenamiento y llega hasta los 1600 euros si queremos 1TB, la RAM son 16GB en ambos casos. Y, a estos precios las opciones que tenemos en el mercado son amplias. Pero pocas consiguen igualar en potencia bruta a este equipo y menos todavía consiguen hacerlo en un cuerpo con 1,6 kg de peso.
Pero no es perfecto, la carencia más evidente es la ausencia de webcam en un marco donde perfectamente se puede integrar una. También está el haber prescindido de sistema operativo en un equipo de más de mil euros de precio. Y, lo que más puede molestar a usuarios entusiastas es que Asus haya optado por soldar un módulo de RAM a la placa y que este sea de 8GB, eliminando toda posibilidad de tener 32GB en Dual Channel. Incluso con todo esto, el Asus ROG Zephyrus G14 sigue siendo recomendable a cualquier usuario, capaz de pagarlo, que busque potencia bruta en un chasis sobrio y compacto.