Uno de los mayores dilemas a los que se enfrentan los usuarios de la tecnología en la actualidad, es si merece la pena comprar un cable HDMI caro, o si por el contrario es suficiente con adquirir un cable económico. En este artículo trataremos de explicar las diferencias que existen entre ellos, para analizar si merece la pena comprar un cable HDMI caro.
El dilema de los cables caros y baratos
Seguro que muchas veces has visitado un foro especializado en tecnología en busca de consejos a la hora de comprar un determinado componente. Los cables siempre suelen ser un caso bastante polémico, habiendo tantos usuarios que defienden que merece la pena pagar de más por un cable supuestamente premium, como usuarios que afirman que no existe ninguna diferencia entre los cables más caros y los baratos.
Antes de analizar si existe realmente algún tipo de diferencia entre un cable barato y uno con un alto precio, nos conviene analizar el origen de la polémica en torno a este componente. El origen de los dilemas en torno a la calidad de los cables, se remonta a la época en la que se utilizaban las señales analógicas para enviar las señales entre los distintos dispositivos.
Las señales analógicas son mucho más propensas que las señales digitales a sufrir interferencias. Esto es algo que puedes comprobar de forma bastante sencilla. Si utilizas en tu ordenador unos auriculares con un conector analógico de 3,5 mm, seguro que eres capaz de escuchar muchas más interferencias y ruido en comparación con unos auriculares basados en la conexión USB, que recordemos es digital. En el caso de las señales de vídeo pasa exactamente lo mismo.
Esto provocó que, con el paso de los años, los consumidores dieran cada vez mayor importancia a la calidad de los cables utilizados, para conectar sus dispositivos. La diferencia entre utilizar un euroconector de buena o mala calidad para conectar el DVD al televisor, era tan grande como la diferencia que existe entre el día y la noche.
¿Funcionan realmente mejor los cables HDMI caros?
Llegados a este punto, hay que tener en cuenta que los cables HDMI se basan en la tecnología de señal digital, que funciona de una forma muy diferente a como lo hacen las señales analógicas.
Los cables HDMI se limitan a transmitir una señal en forma de ceros y unos, que se corresponden al lenguaje binario, qué es el único que los ordenadores y los distintos dispositivos electrónicos son capaces de interpretar. Además, los cables HDMI utilizan una tecnología llamada señalización de diferencial minimizado de transmisión, también conocida por sus siglas TMDS. Está tecnología se diseñó con el objetivo de reducir la interferencia electromagnética sufrida por los cables HDMI.
Todos los cables HDMI cumplen con el mismo estándar de especificación, no habiendo ninguna diferencia en este sentido entre los cables baratos y los cables caros. Esto significa que el funcionamiento de ambos tipos de cables es exactamente el mismo, por lo que no es de esperar que haya ninguna diferencia en la calidad de imagen.
La única diferencia real que existe entre un cable HDMI barato y uno caro es la calidad de los materiales usados en su fabricación. Esto se traduce en que los cables con un alto precio suelen ser bastante más resistentes que los cables baratos, por lo que te durarán muchos más años.
Conclusión
La conclusión final es que la única diferencia entre los cables HDMI caros y los baratos es la calidad de los materiales y su durabilidad. No hay ninguna diferencia en la calidad de imagen que obtendremos con ellos.
¿Merece la pena pagar más por un cable que te durará más tiempo? Esto es algo que debes responder tu mismo. Puedes dejar un comentario con tu opinión sobre este tema.
Hay que tener en cuenta la calidad de los componentes a unir. Un equipo sencillo con uno barato vale, un equipo de alta gama el cable a su altura. De todas las maneras un cable de 5€ es dificil que sea bueno y uno de 100€ no es excepcional, un termino medio es lo mejor y sobre todo de marcas conocidas. Saludos
En en ámbito analógico, conexiones de audio doméstico con conectores RCA entre electrónicas, y entre amplificadores y altavoces con cables desnudos en los extremos o con bananas y similares, debo decir que también es conveniente aplicar cierto sentido común; huir de los estándar que suelen acompañar a los equipos y recurrir a distancias lo más cortas posibles, buenos apantallados, y cobres libres de oxígeno de cierta calidad. Y, en el dominio digital creo que más o menos el mismo criterio. Nada de cables esotéricos de desorbitados e hilarantes precios.