Las multas de la comisión antimonopolio de la Unión Europea siguen ocupando titulares. Hace bien poco conocimos la histórica multa a Google, que batía récords. En esta ocasión, la sanción asciende a un total de 111,2 millones de euros, nada menos. Y las marcas multadas son de primerísima fila: Pioneer, Asus, Philips, Marantz o Denon. No son precisamente segundas marcas, y todas fabrican “hardware”. Se las acusa, mejor dicho se las condena, a pagar por haber pactado precios de venta mínimos en páginas web. Es decir que ponían límites a los precios de sus productos, en función del país donde estaba el vendedor o el comprador. Todas las empresas han reconocido a la Unión Europea los hechos, a cambio de recortes entre el 40 y 50 por ciento en el importe de las sanciones.
Asus, Philips y los demás
Asus ha sido multada con 63,5 millones de euros y Philips con 29,8 millones. Las otras tres (Pioneer, Denon y Marantz) con menos, entre 10 y 7 millones. Como decimos el motivo de la sanción es que el control antimonopolio de la Unión Europea considera probado que estas marcas imponían precios fijos (mínimos) a sus productos.
Han sido 17 meses de investigaciones por parte de la Comisión Europea. Fueron sus especialistas en seguimientos de ventas online los que detectaron estas prácticas consideradas ilegales por antimonopolio. Vieron que las marcas limitaban los ofertas en función de la ubicación o nacionalidad del potencial comprador. La investigación comenzó en febrero del año pasado, y no termina aquí. Además de estas empresas de electrónica, están bajo investigación (y sospecha) otras de videojuegos y de hostelería.
Ofertas… hasta cierto punto
Las cuatro multadas (Asus, Philips, Pioneer y D&M) limitaban las posibilidades de las tiendas (minoristas) en internet para poder poner ofertas propias. Lo hacían en productos del hogar: electrodomésticos, ordenadores y productos de alta fidelidad. El límite lo fijaban ellos, lo que es ilegal en un mercado libre. Si alguna vez viste que las ofertas de varias tiendas llegaban al mismo precio… es que ése era el precio fijado por la marca como mínimo.
La Unión Europea además cree que Pioneer limitó las posibilidades de sus tiendas para vender a clientes de otros países. Esto ocurría en 12 países: entre ellos Francia, Alemania, los Países Bajos o Gran Bretaña, dijo la Comisión, añadiendo que las otras empresas lo hicieron en uno o dos países. En España también debía ocurrir porque conocemos algún caso similar.
Según la Comisaria europea de Competencia, Margrethe Vestager: “el resultado de las medidas adoptadas por estas cuatro empresas es que millones de consumidores europeos se enfrentaron a precios más altos para los electrodomésticos de cocina, secadores de pelo, ordenadores portátiles, auriculares y muchos otros productos».
Habrá más
La Comisaria Vestager, que se hizo famosa con la multa a Google (más de 4.000 millones de euros), vuelve a la palestra con este tema. Y en el clima político actual de guerra comercial con Estados Unidos, es algo bienvenido: Trump pedía un traot más justo y más control sobre fabricantes asiáticos.
Pero no será la última vez: la investigación de la UE sobre los videojuegos se centra en Valve Corp, propietaria de la plataforma de distribución Steam y cinco fabricantes de juegos. Son Bandai Namco, Capcom, Focus Home, Koch Media y ZeniMax. Están acusados de impedir las compras debido a la ubicación o al país de residencia del cliente. Y veremos qué multas les caen. Y hay otra investigación en marcha, centrada en los operadores turísticos Kuoni, Rewe Thomas Cook y… el grupo hotelero Melia.
