Las startups o empresas pequeñas de reciente creación han llegado para quedarse. De hecho, su presencia en el ecosistema de negocios es de lo más importante. Al menos para Europa, donde las grandes compañías colaboran estrechamente con las startups para innovar, mientras que éstas se apoyan en aquellas para crecer. Eso sí, siempre en el ámbito de la colaboración y no en la competición. Sin embargo, Samsung ha estudiado la brecha de productividad que existe entre las grandes y las pequeñas compañías. Y, por supuesto, la adopción de tecnología móvil puede ser la solución.
Según el informe realizado por la CCS, y encargado por Samsung, para 2020 el 50 por ciento de los trabajadores será móvil. Es decir, trabajarán eficientemente a través de su dispositivo móvil. Y no es una cifra que se saquen de la manga. La cifra ha pasado de ¼ a 1/3 desde el 2014, siendo este porcentaje de trabajadores los que dependen de su móvil.
Grandes compañías
La mayoría de las grandes compañías son menos productivas que hace 10 años, dice Samsung. Y esto se debe a la falta de agilidad e innovación, a su anticuada tecnología de trabajo o a los costes de las IT o tecnologías de la información y los crecientes problemas de seguridad. Quizá por ello más del 50% de los responsables encuestados pertenecientes a estas grandes compañías listan la seguridad como una de las prioridades a la hora de invertir ámbito de trabajo. Lugar donde el móvil está más que presente.
Ahora bien, estos datos rompen con la situación actual de muchos de estos trabajadores de grandes compañías. Según el informe encargado por Samsung, el 50 por ciento de los trabajadores reconocen que los procesos internos dificultan la innovación. Además, el 41 por ciento afirma que su tecnología de trabajo tiene poco o nada que ver con las tareas que realizan.
Pequeñas startups
Para 2020, el 70 por ciento de los trabajadores de pequeñas compañías será móvil. Y es que estas empresas están más predispuestas a innovar y actualizarse. Algo que rompe los esquemas de las grandes compañías. Según los encuestados, más del 60 por ciento de los trabajadores reconocen que la tecnología de sus trabajos casa con las necesidades que han de cubrir.
El gran problema de estas pequeñas empresas es la seguridad. Ni siquiera uno de cada cinco trabajadores de una startup recibe formación acerca de la ciberseguridad. Por tanto, no es descabellado que menos del 30 por ciento no vea la seguridad de sus sistemas como una de las prioridades en las que invertir en su entorno de trabajo, sea móvil o no.
La solución móvil de Samsung
Los datos de la encuesta arrojan que la colaboración entre la filosofía y métodos de las starups y las posibilidades de las grandes compañías es necesarias. Para todas ellas la tecnología móvil es clave, y ha de ser una tecnología segura y capaz. Grandes baterías, sistemas que impidan la filtración o robo de información, herramientas de trabajo integradas u opciones de versatilidad como transformar el móvil en un ordenador. Elementos que, para Samsung, se encuentran recogidos en el Samsung Galaxy Note 8.