Hace apenas un año, el mundo se dejaba sorprender por Pokémon Go. Una aplicación aparentemente inocente salía del seno de Niantic para convertirse en una verdadera locura. Y lo hacía gracias a una baza importante: la realidad aumentada.
Millones de personas salieron a la calle con su móvil para salir a la caza de Pokémon. La idea partió de una broma, que por cierto hizo Google. En el April’s Fools Day del año 2014, el Día de los Santos Inocentes de aquí, el gigante de las búsquedas hizo un vídeo bautizado como Pokémon Challenge.
Hablaba de un nuevo e hipotético juego en el que a través de sus sistema de mapas, los usuarios tendrían la oportunidad de buscar todas las especies de Pokémon. Un sueño de la infancia que, tan solo dos años más tarde, se haría realidad.
Y nació Pokémon GO
Niantic y Nintendo pusieron en marcha la maquinaria para sacar a relucir Pokémon GO, un juego que sumergiría al mundo de cabeza en su teléfono móvil. Las calles se llenaron de gente buscando Pokémon. Y aunque el juego fue publicado de manera escalonada en todo el mundo, los servidores de Niantic se fueron saturando a medida que avanzaba el despliegue.
Tras las primeras horas de funcionamiento, muchos usuarios ya se quedaron sin poder descargar la aplicación. Pokémon GO desatando una verdadera fiebre que se materializó en cifras. 25 horas después de haber aparecido en el mercado, Pokémon Go se situó en la primera posición de la lista de apps más descargadas en iTunes.
Esto provocó que las acciones de Nintendo se dispararan, haciendo que la compañía incrementara su valor en 16.000 millones de dólares.
Cifras de descargas e ingresos récord
A finales de julio, la aplicación ya contaba con más de 75 millones de descargas en todo el mundo. Fue, de hecho, según datos de SensorTower, el videojuego más rápido del mundo en alcanzar los 50 millones de descargas. Una cifra a la que por cierto llegó en tan solo 19 días. Y eso que, al principio, la aplicación solo estaba disponible en 32 de los 100 países habituales.
No hay más que comparar esta cifra con las de otras aplicaciones exitosas, como por ejemplo Color Switch, que alcanzó los 50 millones en 77 días; el exitoso Slither.io, que lo hizo en 81 días o el ya legendario Candy Crush Jelly Saga, que necesitó 112 días.
Pokémon GO, además, superó a muchas otras aplicaciones en descargas (aquí arriba tienes un gráfico en le que se comparan las descargas de Pokémon GO con las de Tinder) o, en la parte inferior, a nivel de ingresos con otros juegos de éxito mundial como Clash Royale o Candy Crush Soda Saga.
Por las calles veíamos hombres y mujeres pegados a las pantallas de sus teléfonos móviles. Y los datos lo confirmaban, porque la gente pasaba más tiempo enganchada a Pokémon GO que a otras apps de moda, como por ejemplo las de sus redes sociales favoritas: WhatsApp, Instagram, Snapchat o Messenger. Y las diferencias eran más que notables.
Pokémon GO es freemium. El propósito de Niantic – aunque al final esto rompiera todas sus expectativas – era el de enganchar a los usuarios para después seducirles con compras integradas. Esto hizo que en su primer día de vida, consiguiera 4 millones de descargas y 10,2 millones de ingresos.
Juegos de éxito como Super Mario Run (8,4 millones de dólares), Clash Royale (2,9 millones) o Fire Emblem Heroes (1,4 millones) consiguieron una buena porción de ingresos durante la primera jornada. Pero lo cierto es que no fueron capaces de hacerle sombra a Pokémon GO.
Pokémon GO, un año después
Era imposible que Pokémon GO mantuviera las cifras que consiguió con su puesta en marcha en julio de 2016. El primer mes fue una auténtica locura en descargas e ingresos. Y la cifra de máximo apogeo fue la de agosto. No obstante, en septiembre había perdido ya el 80% de sus jugadores de pago.
Y eso que Pokémon GO se convirtió en el videojuego que más jugadores diarios tenía (21 millones, frente a los 20 millones que había logrado Candy Crush).
Pero Pokémon GO no fue capaz de superarse a sí misma. Y eso que publicó una actualización tras otra para intentar seducir a los desertores. Un estudio de la Universidad de Harvard (sí, las instituciones más prestigiosas también se ocuparon del fenómeno Pokémon GO) confirmó que los jugadores abandonaban el juego al cabo de seis semanas. Esta misma institución desmentía, tal como se había afirmado en un principio, que Pokémon GO fuera una aplicación buena para el ejercicio físico.
Y aunque las cifras no acompañaban, a principios de este año 2017 (tan solo seis meses después de su lanzamiento) supimos que Niantic había conseguido recaudar mil millones de dólares en 2016. Una cantidad absolutamente demoledora, si tenemos en cuenta que el juego fue lanzado en julio.
La dificultad de mantener el interés inicial
Niantic no fue capaz de mantener el interés inicial. Aquello que había enganchado a los usuarios al principio. Los jugadores perdieron el interés por jugar. No estaban motivados. Pokémon GO no ofrecía incentivos. Participar en los gimnasios solo tiene una recompensa: conseguir monedas, con las que puedes comprar más artículos para conseguir más Pokémon o más experiencia. Nada más.
Esto hace que la gente juegue sin ningún objetivo concreto. Así que es difícil que siga motivando de verdad a los usuarios para mantener instalada esta aplicación en sus teléfonos.
Y este hecho también se ha materializado en bolsa. Si con el nacimiento de Pokémon GO, las acciones de Nintendo se dispararon, la compañía se ha mostrado a la baja en la bolsa de Tokio. En el momento de máximo apogeo las acciones se revalorizaron hasta un 93%. Meses después el valor disminuyó hasta un 24%. La remontada, un año después, parece improbable.
Seguir en la senda
Por suerte, Niantic no ha tenido que hacer muchas inversiones. O por lo menos no muy cuantiosas. Si bien ha ido presentando algunas actualizaciones y novedades a lo largo del año, la compañía se ha centrado en lanzar novedades en fechas señaladas. Como por ejemplo Navidad, Pascua, Año Nuevo o Halloween.
Convencieron a los usuarios para que hicieran compras y se animaran a jugar. Luego sumaron al proyecto los famosos Pokémon de segunda generación. Y parece que el incentivo ha gustado a los usuarios. En el último mes, junio de 2017, Pokémon GO se ha apuntado 12 millones de usuarios diarios y un global de 60 millones activos. Lo que no está nada mal. En absoluto.
De hecho, a pesar del declive, hasta la fecha Pokémon GO cuenta con la friolera de 752 millones de descargas.