Bose Soundlink Revolve, altavoces que llevan sonido a todas partes

Bose nos presenta un altavoz sin cables, portátil, que resiste la lluvia y que suena bien incluso en espacios grandes. Todo eso cumplen los Bose Soundlink Revolve y Revolve+, ideales para llevárselos de excursión. O para usar en la terraza. O para tener en casa y saber que lo puedes mover cuando quieras. La diferencia entre ambos es el tamaño y que la baterí­a el Revolve+ dura algo más (16 horas frente a 12). El Bose Soundlink Revolve cuesta 229 euros, y el Revolve+ 329 euros.

Sonido 360 grados

La aportación del especialista en sonido americano Bose con sus Revolve está en la difusión de la música. El único altavoz interno, un “todobanda” que reproduce todas las frecuencias, está en la parte inferior. Apunta hacia abajo, donde Bose ha colocado un difusor omnidireccional muy estudiado. Así­, el sonido sale por la parte inferior en 360 grados.

De esta forma el Revolve se puede situar en el centro de una habitación o sobre una mesa rodeada de personas. Así­, la percepción del sonido será la misma al andar (o bailar) por la estancia y para todos. Como podemos usarlo de “manos libres” esto también facilita mantener conversaciones telefónicas en grupo.

Nos ha sorprendido lo bien que se ve la difusión 360º del sonido en las gráficas de laboratorio. Como refuerzo, la parte superior de los Revolve cuenta con una cámara de resonancia para graves. Las frecuencias bajas pasan al exterior a través de dos radiadores pasivos. Además de su función de radiar graves para dar más peso al sonido, ayudan a que los Bose sean herméticos por arriba.

En casa… o en el exterior

Precisamente esa hermeticidad permite a los Bose Revolve tener certificación IPX4 de resistencia al agua. Es decir, que resiste a las salpicaduras de agua, así­ que podremos usarlo fuera cuando llueva, o en la cocina o el baño. No es sumergible, así­ que si estás pensado en tenerlo en la piscina ningún problema, pero que sea al lado y no dentro.

Además las superficies de los Soundlink Revolve están acabadas en plásticos resistentes ligeramente gomosos. Así­ se evitan arañazos y ofrece cierta resistencia a golpes. Incluso sobrevive a ligeras caí­das. Si donde lo vas a usar no hay superficies estables, por debajo tiene una rosca estándar y cualquier trí­pode servirá para estabilizarlo.

Bluetooth, jack o micro-USB

Los Bose Soundlink Revolve y Revolve+ son altavoces sin cables con conectividad Bluetooth. Es lógicamente su principal argumento y el alcance es el habitual: unos 9 a 10 metros diáfanos. Pero también tienen una entrada auxiliar (jack estéreo 3,5mm) e incluso una conexión micro USB. Con esta podemos para usarlo directamente como tarjeta de sonido externa de un ordenador, por ejemplo.

Para que su portabilidad sea completa, ambos modelos cuentan con una baterí­a de Litio interna. En el modelo Revolve ofrece 12 horas de autonomí­a, que en el Revolve+ suben hasta 16 horas. El modelo pequeño mide 152 x 82 x 82 mm y pesa 660 gramos. El Revolve+ tiene unas dimensiones de 184 x 105 x 105 mm y pesa 900 gramos. Ambos están disponibles en color blanco o negro, y existe una base de carga opcional que facilita esta operación.

Aplicación dedicada

Bose no sólo nos ofrece un producto bien diseñado y puesto a punto, sino formas de controlarlo. Para emparejarlo al móvil será el propio altavoz quien nos guí­e, y recuerda los últimos ocho dispositivos usados. Los botones de control directo están situados en la parte superior y son de suave tacto. Tenemos además su propia aplicación dedicada que nos informará del estado de carga entre otras cosas.

Además no hace falta tener el móvil cerca. Una vez conectado, podemos controlar la música o llamadas desde el propio Bose Revolve. Incluso cuenta con un botón dedicado al acceso a Siri o Google Now para ejecutar comandos de voz.

Bose Soundlink Revolve (Revolve+)