¿Alguien se acuerda de Google Earth? Todo surgió en 2004, cuando Keyhole, un programa de pago dedicado a la exploración terrestre, fue adquirido por Google, el gigante de las búsquedas. Hoy Google Maps prácticamente se ha comido la herramienta. Pero la de Mountain View no desiste en el intento.
El próximo martes 18 de abril tendrá lugar una presentación importante. Google ha convocado a la prensa a través de invitaciones para que asistan a un evento. Quieren hablar de un nuevo Google Earth.
Google no ha ofrecido pistas sobre aquello que veremos en esta presentación. Una presentación que, por cierto, tendrá lugar cuatro días antes del Día de la Tierra, que se celebra el 22 de abril.
Pero, ¿qué se espera de nuevo? De momento no hay confirmaciones oficiales. Pero por el lema que está usando la compañía, todo apunta a una renovación total.
No hay que perder de vista que Google Earth es un sistema de exploración terrestre muy poderoso. Incluye grandes opciones, como por ejemplo un simulador de vuelo o una herramienta que nos permite ver los efectos de cambio climático a largo plazo.
Es posible, por otra parte, que Google Earth se lance al mundo de la realidad virtual (VR). En noviembre la compañía ya dio a conocer Google Earth VR.
Google Earth, una herramienta con historia
Keyhole, el nombre del programa adquirido por Google, pasó a llamarse Google Earth y a ser de acceso gratuito. Esto ocurrió entre mayo y junio de 2005. Más de diez años después, la herramienta no está siendo usada con tanta asiduidad como Google Maps, pero lo cierto es que sigue tratándose de una opción fundamental para hacer exploraciones terrestres.
Con los años, Google no ha dejado de introducir mejoras en Google Earth. Algunas de las más importantes son las fotos esféricas de las calles de ciudades importantes en el mundo.
Pero las últimas actualizaciones nos invitan a explorar fuera del planeta Tierra. Con Google Earth también podemos visitar Marte o la Luna. Por otra parte, también existe la posibilidad de acceder a las impresionantes capturas del telescopio Hubble. El mismo que ha permitido a la NASA obtener imágenes inéditas del universo.