Si estáis buscando un nuevo televisor y habéis echado un ojo a los modelos SUHD de Samsung seguro que habéis leído en más de una ocasión el término Quantum Dot. La compañía coreana está exprimiendo al máximo esta tecnología para conseguir unos televisores que proporcionan una gran calidad de imagen, con unos negros profundos y unos colores más vivos. Pero, ¿qué es Quantum Dot? ¿Realmente mejora la imagen frente a un televisor LED convencional? Vamos a intentar explicar qué es exactamente la tecnología Quantum Dot, cómo la utiliza Samsung y qué podemos esperar de los televisores SUHD de Samsung de este año.
Los puntos cuánticos son pequeñas partículas semiconductoras de 10nm de diámetro, es decir, mil veces más pequeñas que una partícula de polvo super micro. Los Quantum Dots, o puntos cuánticos, aparecieron cuando dos científicos, Dr. Louis Brus y Dr. Alexei Ekimov, descubrieron que estás partículas semiconductoras tan finas emitían diferentes colores de luz dependiendo de su tamaño. Los puntos cuánticos más pequeños emiten luz azul y los más grandes emiten luz roja. Teniendo en cuenta este principio, el uso de estas partículas para construir televisores hace posible reproducir una gama mucho más amplia de colores.
¿Cómo ha utilizado Samsung los Quantum Dots en sus televisores?
Ahora que ya sabemos qué son los Quantum Dots o puntos cuánticos, vamos a ver cómo Samsung ha utilizado estas partículas para mejorar la calidad de imagen de sus nuevos televisores SUHD. No obstante, para entender bien cómo funciona y qué aporta la tecnología Quantum Dot, primero tenemos que saber cómo funciona un panel LED normal. De forma muy resumida, en los televisores LED tenemos una luz LED azul como fuente principal de iluminación, que, según el modelo de televisor, emite desde una zona u otra de la pantalla, habitualmente desde los laterales del panel. Este sistema de iluminación hace que los negros, uno de los grandes males de la tecnología LED, se vean casi como gris oscuro, además de tener unos colores más apagados, menos vibrantes.
Por ello, los fabricantes han intentado buscar soluciones más económicas para ellos que tener que recurrir a los nuevos paneles OLED. Samsung ha encontrado en los nanocristales la tecnología necesaria para conseguir mejorar los negros y los colores de sus televisores de gama más alta. La función de los nanocristales será hacer de filtro de la luz azul que producen los LED, rompiéndola y consiguiendo una luz blanca que contiene todos los colores del espectro. A nivel práctico, esto se traduce en unos negros más profundos y unos colores más intensos. La compañía coreana ha conseguido adaptar estas partículas para su uso en la fabricación de paneles SUHD mejorándolas en dos puntos importantes. Por un lado ha sido capaz de fabricar paneles con tecnología Quantum Dot Color, pero sin utilizar cadmio, un componente tóxico que se encuentra de forma inherente en los puntos cuánticos. Y, por otro lado, utilizan una técnica de recubrimiento del filtro de las nanopartículas denominada Quad-layer. Esta técnica consiste en que cada nanopartícula se protege con una cápsula. Gracias a esto, se reducen sus posibles defectos y la incidencia de la oxidación o la humedad. Además, en la capa de nanopartículas se reduce al mínimo el nivel de impurezas haciendo que la luminosidad aumente un 15% y aumentando su durabilidad.
El sistema Quantum Dot no viene sólo en los televisores SUHD de Samsung. La compañía coreana ha incluido otros dos sistemas que complementan el uso de la tecnología de puntos cuánticos. Por un lado tenemos la tecnología Ultra Black con panel Moth-Eye, basada en la retícula de los ojos de las polillas, que consigue minimizar los reflejos. Para ello la compañía ha creado una estructura de conos nanométricos en los que la luz se absorbe por el panel hasta atenuar en un 99,7% su incidencia. Por otro lado, los televisores SUHD utilizan un panel de 10bit. La diferencia con un panel convencional es que cada uno de los píxeles es capaz de procesar mayor cantidad de información. Con esto se consigue que el televisor cubra un 96% del espacio de color DCI-P3, admitiendo un input de color BT 2020. La combinación de estas dos tecnologías con el sistema Quantum Dot consigue unos negros todavía más oscuros y unos colores todavía más vivos.
Gama SUHD 2016 de Samsung
Los televisores que pertenecen a la gama SUHD de Samsung incorporan, además de la tecnología Quantum Dot, otros dos sistemas claves para el futuro de los televisores. Hablamos, por un lado, del HDR o High Dynamic Range (alto rango dinámico), que incrementa los niveles de luminosidad para obtener colores blancos más puros y negros más profundos. La tecnología HDR de Samsung alcanza un nivel de brillo de hasta 1000 nits, muy superior al de la mayoría de modelos del mercado. Y, por otro lado, tenemos algo que, de momento, es muy necesario, un potente sistema de escalado. El SUHD Remastering Engine interpreta y remasteriza de modo automático cualquier contenido inferior a SUHD y lo transforman en una calidad óptima para reproducirlo en la pantalla.
En cuanto a la gama de televisores de Samsung, este año la compañía ha decidido ampliar los modelos que incorporan la tecnología Quantum Dot Display y ya no tendremos que optar sí o sí por los modelos de gama más alta. Las series KS7000 y KS7500 son la gama de entrada a la tecnología SUHD de Samsung. Ambos modelos incorporan un bonito diseño que utiliza dos patas metálicas situadas en los extremos en sustitución de la habitual peana. Las nuevas series KS7000 y KS7500 se suman a las gamas más altas este año, ya que el año pasado no estaban incluidas en la gama de televisores SUHD. La diferencia entre la serie KS7000 y la serie KS7500 es que la segunda ofrece un panel curvo, mientras que la serie KS7000 ofrece un panel plano. Tenemos diagonales desde las 43 hasta las 65 pulgadas y todos los modelos incorporan Quantum Dot Color, HDR 1000 UHD Premium y panel 10 bit.
Si queremos subir un escalón podemos optar también por los modelos de las series KS8000 y KS8500. Estos modelos incorporan un diseño prácticamente sin marcos laterales y en el que reina una gran peana en forma de Y para apoyar el televisor. Al igual que las series KS7000 y KS7500, los televisores de la serie 8 ofrecen un diseño que Samsung denomina como 360 grados, es decir, son bonitos tanto por delante como por detrás. A nivel técnico, los cambios de la serie 8 frente a la serie 7 se limitan a ciertos puntos muy concretos. Por ejemplo, los televisores de la serie 7 ofrecen Motion Rate 100 mientras que la serie 8 incorpora Supreme MR 200. Por otro lado, la serie 7 ofrece un refresco de 2.000 Hz PQI, mientras que la serie 8 sube hasta los 2.300 Hz PQI. Por último, la serie 7 utiliza UHD Dimming y la serie 8 usa Supreme UHD Dimming. La serie 8 la podemos encontrar con diagonales desde las 49 hasta las 75 pulgadas.
Pero si lo que queremos es tener lo último de lo último tendremos que optar por las series KS9000 o KS9500. El Samsung UEKS9000 ofrece un diseño muy similar al de los televisores de la serie 8, pero con ligeros cambios en la peana para que luzca todavía más elegante. Las características técnicas son prácticamente las mismas en la serie 9 que en la serie 8, pero el modelo superior aumenta a 2.400 Hz PQI. En cuanto a la serie KS9500, sólo se vende en 65 o 78 pulgadas y sube hasta los 2.700 Hz PQI, además de ofrecer un diseño de la peana ligeramente diferente al de la serie KS9000.
Por último, si nuestro presupuesto es realmente alto y queremos optar por un televisor de tamaño descomunal, podemos optar por el Samsung 88KS9 o por el Samsung S9W, con 88 y 82 pulgadas respectivamente. El Samsung 88KS9 es básicamente el mismo televisor que el KS9500, pero con 2.600 Hz PQI y un tamaño gigante. Sin embargo, el Samsung S9W sí incorpora una novedad muy llamativa, y es que es de los pocos televisores en formato 21:9 que podemos encontrar en el mercado.
Destacar, para finalizar, que todos los modelos comentados incorporan la última versión de Tizen OS, el sistema Smart TV de Samsung, y un procesador Quad Core capaz de mover el sistema con total fluidez.