Pleurobot es un impresionante robot con forma de salamandra y capaz de recrear perfectamente los movimientos más comunes de este animal. Es capaz de reptar y nadar y se ha diseñado cuidadosamente después de estudiar una serie de vídeos realizados con rayos X y que permitían ver los movimientos de las salamandras en la naturaleza.
El robot es una de las creaciones más recientes que han visto la luz en el EPFL, el Institutio Federal Suizo de Tecnología en Lausana.
Inspiración real en la naturaleza
El robot Pleurobot se ha diseñado con el objetivo principal de recrear los movimientos reales de una especie de la naturaleza gracias a la tecnología. En concreto, los científicos del EPFL se han fijado para su desarrollo en la especie de salamandra Pleurodeles waltl. Se trata del primer robot que recrea perfectamente el movimiento de un esqueleto animal de manera perfecta gracias a la impresión 3D, y para lograrlo han invertido muchísimas horas de trabajo y esfuerzo.
Más allá de la parte técnica de programación, el desarrollo de Pleurobot ha necesitado horas de análisis de vídeos con rayos X que permitieran estudiar hasta el más mínimo detalle del modo en que se mueven estas salamandras. Gracias a los rayos X, los científicos han podido comprobar cómo se desplazaban los distintos huesos del animal para lograr el movimiento deseado en el cuerpo.
El resultado es un impresionante robot que, efectivamente, se mueve como una salamandra real. No solo es capaz de reptar, sino también de nadar, y el aspecto físico es realmente sorprendente.
Pleurobot está compuesto por una serie de huesos impresos en 3D y controlados por un circuito electrónico que funciona casi como un sistema nervioso central, capaz de emitir las señales necesarias en cada parte del cuerpo del robot para lograr el movimiento deseado. El dispositivo tiene menos vértebras que una salamandra en la naturaleza, pero se han dispuesto de tal modo que permiten optimizar los resultados y lograr un movimiento lo más natural y realista posible.
Hacia la comprensión de los movimientos corporales
Los científicos del EPFL pretenden con esta creación dar un gran paso en el estudio de la locomoción en los animales. Con estos avances en biorobótica, no solo se consigue una mejor comprensión de los movimientos de los huesos, sino que también se abren nuevas vías de estudio para analizar la importancia de las señales nerviosas que estimulan al cuerpo para lograr esos movimientos.
En el largo plazo, esto podría permitir la construcción de «neuroprótesis» para tratar problemas de parálisis parcial o total o paraplejías en el cuerpo humano, capaces de enviar los estímulos nerviosos correctos en la zona de la columna vertebral para permitir el movimiento.
De hecho, al estudiar los movimientos de la salamandra, se ha podido comprobar que la diferencia entre los movimientos de reptación y los de nado se basa solo en una cuestión de intensidad de los impulsos nerviosos. Modificando la intensidad de la estimulación, cambia el tipo de movimiento.