Samsung confirmó a principios de este año, que se estaba tomando su tiempo con su siguiente smartwatch, con el fin de asegurarse de que sería lo más perfecto posible. Llamado Gear A, este reloj va a ser el primero de la compañía en incorporar una esfera cilíndrica. Además, traerá un nuevo método de interacción con el usuario gracias a un bisel giratorio ubicado en la corona. Hasta ahora, la surcoreana no ha mencionado ningún dato que nos haga hacernos una idea aproximada de cuando será anunciado oficialmente. Muchos pensaban que el Mobile World Congress sería el lugar perfecto, pero la asiática se limitó a presentar allí únicamente sus nuevos teléfonos.
SamMobile ha dado una nueva información hace unas horas, y ha asegurado que la compañía habría retrasado su lanzamiento hasta la segunda mitad de este año. Según el medio, el Samsung Gear A, con nombre en clave Orbis, se pondría en marcha junto con el Galaxy Note 5 en la IFA de Berlín, que tendrá lugar el próximo mes de septiembre en la ciudad alemana. Al parecer, el retraso se debería en parte para que no coincida a la misma vez con el Apple Watch. La compañía no querría que ningún dispositivo le hiciera sombra, y mucho menos el de su principal rival. Recordemos, que el primer reloj inteligente de la firma californiana está ya a la venta en nueve países y en junio se pondrá a la venta en otros tantos. Por tanto, septiembre parece la fecha perfecta para que todas las miradas se centren en el Gear A.
Y, ¿qué datos tenemos actualmente sobre el reloj? Sabemos que su esfera cilíndrica no será el único punto a su favor. El smartwatch de Samsung también estaría gobernado por Tizen, en lugar de por Android Wear y equiparía un procesador Exynos 7420. Es muy posible, además, que incluya conexión 3G y soporte para cargarlo de manera inalámbrica, como hemos visto en el Galaxy S6 y Galaxy S6 Edge.
SamMobile también ha revelado, que el reloj no sería presentado de manera independiente, si no junto al nuevo Galaxy Note 5. Se han conocido las primeras características de este nuevo teléfono y no pintan nada mal. Según se indica, haría uso de una pantalla Super AMOLED con resolución QHD o 4K. El procesador podría ser o un Exynos 7422, aunque también se habla de un Exynos 7430. Como veis, aún no hay detalles demasiado concretos. Lo que sí parece, es que este año volvería a ir acompañado de un Note Edge.
Ya sabéis que el año pasado, el Galaxy Note 4 llegó junto a un dispositivo con pantalla curva, el primero de la compañía (aunque solo se curvaba por un lado, a diferencia del Galaxy S6 Edge). Esta versión, ya tendría sus dos lados curvos y podría incluir una pantalla SuperAMOLED de 5,4 o 5,5 pulgadas. Por su parte, el procesador podría ser un Qualcomm Snapdragon 808, en lugar de un Exynos, e incorporaría una cámara principal de 16 megapíxeles, así como un lápiz óptico S Pen. De momento, estos son los datos que tenemos, aunque suponemos que conforme vaya acercándose el mes de septiembre iremos teniendo algunos más concretos.