Toshiba ha renovado uno de sus ultrabooks más icónicos. El nuevo Toshiba Satellite Z30-B llega en dos configuraciones diferentes (Toshiba Satellite Z30-B-110 y Toshiba Satellite Z30-B-100) pero mantiene dos premisas fundamentales. Por un lado, un diseño muy ligero de apenas 1,2 kilos que nos permite transportar este portátil a cualquier parte. Por otro lado, una autonomía muy notable de hasta 16 horas de uso para poder trabajar con el equipo durante toda una jornada sin tener que preocuparnos del enchufe. Todo ello con uno de los últimos chips de Intel Core de última generación y un buen conjunto de conexiones. El Toshiba Satellite Z30-B-110 tiene un precio de 900 euros, mientras que el Satellite Z30-B-100 sube hasta los 1.100 euros. Te contamos los detalles.
Una de las claves que ha querido mantener y mejorar Toshiba con la gama Z30 es su autonomía. Gracias al uso de un procesador de quinta generación de Intel Core, el tiempo de uso de estos equipos sube hasta un máximo de 16 horas en el caso del Satellite Z30-B-100 y de hasta 17 horas en el caso del Satellite Z30-B-110. En los dos casos, estamos ante equipos que aguantarán sin problemas una jornada entera o un viaje largo sin necesidad de tener que recargarlos. Esto se une a un formato muy manejable con un peso ligero de 1,2 kilos y un grosor de 1,79 centímetros para convertirse en un excelente compañero para trabajadores móviles o usuarios que se muevan mucho.
El Toshiba Satellite Z30-B-110 apuesta por un procesador Intel Core i3-5005U de doble núcleo con una potencia de 2 GHz por núcleo y cuatro hilos de proceso simultáneos. Este chip se combina con una memoria RAM de 4 GB. Mientras tanto, el modelo más potente Z30-B-100 utiliza un chip Intel Core i5-5200U de doble núcleo con 2,2 GHz y cuatro hilos de proceso. Gracias a la tecnología Turbo Boost, esta velocidad se puede subir hasta los 2,7 GHz en los momentos de necesidad. En este caso, la memoria RAM se coloca en los 8 GB. También existe diferencia en el almacenamiento. Aunque los dos modelos apuestan por una tarjeta SSD, la configuración básica tiene una memoria interna de 128 GB mientras que el modelo B-100 sube la capacidad hasta los 256 GB. En los dos casos, disfrutaremos de una buena velocidad de acceso a disco y de inicio del sistema.
Toshiba ha desplegado un buen conjunto de conexiones para estos modelos. Por ejemplo, a pesar de su finura podremos disfrutar de un puerto Ethernet para conectar directamente el equipo a la red. También contamos con tres puertos USB 3.0 de alta velocidad con tasas de transferencia diez veces más rápidas que el USB tradicional. Todos estos puertos tienen la funcionalidad Sleep&Charge para cargar nuestros dispositivos móviles incluso cuando esté en estado de suspensión. Para transmitir los contenidos a un monitor o a un televisor se utiliza un puerto HDMI y un puerto RGB. Las conexiones se completan con Bluetooth 4.0 y WiFi AC, un protocolo que favorece una conexión más rápida y estable. El Toshiba Satellite Z30-B110 tiene un precio de 900 euros, mientras que el Toshiba Satellite Z30-B-100 sube hasta los 1.100 euros.
