La Navidad es ese momento del año en el que toca reunirse con la familia, correr a última hora para conseguir todos los regalos y por supuesto, olvidarse de la dieta durante unos días. Es también en esta época cuando se hacen más fotos de familia que nunca, pero en muchas ocasiones lo que podría ser un bonito recuerdo de Navidad acaba siendo una foto sosa, aburrida y sin vida. Así que desde Tuexperto queremos proponerte unos consejos muy útiles para mejorar la calidad de tus fotos navideñas.
Composición
A la hora de colocar a nuestros familiares para hacer la foto, es importante evitar situarlos en línea, de más alto a más bajo, o en fila. Sitúalos de una manera que parezca aleatoria pero creando un bloque, poniendo a algunos delante o dejando que unos se sienten y otros se queden levantados. Así lograremos una composición equilibrada y natural.
Prepara tu disparo
Sería ideal que el color de la ropa de nuestros protagonistas combine con el tono general de la foto, aunque seguramente eso es mucho pedir. No obstante, procura combinar los colores entre sí, o evitar poner juntos a personas que lleven ropa del mismo tono. En caso de que no haya manera de conseguir un tono equilibrado o acorde con lo que buscamos, siempre podemos pasar la foto a blanco y negro. Es una solución un poco drástica, pero puede dar buenos resultados, sobre todo si aplicamos algún tipo de filtro para añadir algo de carácter, como por ejemplo uno de simulación de película analógica.
Captar la expresión
Intenta evitar las fotos de pose u obligar a la familia a que se estén quietos para la foto, ya que lo más seguro es que acabemos con una foto poco expresiva y aburrida. Un consejo útil es charlar con ellos, o intentar que se rían. Otro truco que funciona es simular que haces la foto “formal” e inmediatamente después sacar dos o tres tomas más, porque a veces, justo después de la foto la gente se relaja y adopta una pose más natural y relajada, y así es como queremos que salgan en la foto, ¿verdad?
Deja que los niños sean niños
Otra batalla seguramente perdida es la de intentar que los niños se estén quietos. Es imposible. Y más en Navidad, con la excitación de los regalos, los primos, etcétera. Así que lo mejor es dejar que los niños sean, pues eso, niños. Dejemos que se rían o que hablen y jueguen entre ellos a su aire, y ahí es cuando encontraremos la foto que buscamos. Recordad que para conseguir unas fotos de niños bien enfocadas y sin trepidaciones, lo mejor será seleccionar la opción prioridad a la velocidad, deportes o acción, dependiendo de la cámara que usemos.
Sal de detrás de la cámara
La mejor manera de interactuar con la familia es desentenderse de la cámara, o sea, preparar el disparo para acto seguido poder dar indicaciones a los sujetos de la foto. Para conseguir esto, enfocaremos una vez y bloquearemos el autoenfoque manteniendo apretado a medias el botón de disparo. Si además usamos un trípode nos aseguraremos que el enfoque sea igual al del momento en que lo bloqueamos. Esta técnica también es útil para corregir el encuadre sin cambiar o perder el enfoque.
Esperamos que estos consejos os sean útiles y que vuestras fotos navideñas mejoren gracias a ellos.