La compañía de Redmond acaba de presentar su primer wearable: Microsoft Band. La multinacional ha hecho oficial su pulsera inteligente, a la que ha acompañado un nuevo servicio llamado Health. El objetivo de ambos es ayudar a los usuarios a controlar su salud mediante la recogida de datos de sus actividades deportivas.
Band es una pulsera parecida a la Samsung Gear Fit. El equipo cuenta con una correa en plástico negro y una panel en tonos violeta en el que se encuentran las distintas opciones que ofrece el dispositivo. Igualmente, en la parte interna del terminal, nos encontramos con un sensor óptico de ritmo cardíaco.
El dispositivo presenta una pantalla rectangular de 11 x 33 milímetros que tiene una resolución de 320 x 106 píxeles. Microsoft ha apostado por introducir una lista de sensores que permitirán a los usuarios monitorizar toda su actividad física. Entre ellos, contará con uno para controlar el ritmo cardíaco, un acelerómetro/giroscopio de tres ejes, un girómetro, GPS (para mostrar detalles de nuestra ubicación), sensor de luz de ambiente, sensor de temperatura de la piel, sensor UV, uno de respuesta galvánica de la piel (para ayudarnos a identificar niveles de estrés) o micrófono, entre otros.
Asimismo, la pulsera integra conectividad Bluetooth 4.0 y además es resistente al polvo y a salpicaduras de agua, pero no sumergible. Gracias a ella, podremos ver todas las notificaciones que nos lleguen desde nuestro smartphone. Desde mensajes, hasta llamadas entrantes, pasando por avisos del calendarios o mensajes de redes sociales.
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Igualmente, podremos controlar nuestros recorridos gracias a un podómetro. Además, tendremos la posibilidad de mirar las calorías quemadas y monitorizar nuestro sueño. La verdad es que no tiene nada que envidiar a otras pulseras inteligentes del mercado.
Como ya decían las filtraciones, este equipo será compatible con terminales que funcionen con iOS, el sistema operativo para móviles y tabletas de Apple, Android, el software de Google, y Windows Phone, el de la propia compañía. Esta estrategia de universalizar su wearable para que se sincronice con otras plataformas aparte de la suya puede que perjudique al ecosistema de la empresa, pero estamos seguros de que le beneficiará a largo plazo.
A pesar de todas estas características, una de las funciones que más ha llamado la atención es el soporte de Cortana. Si usamos este dispositivo con Windows Phone 8.1 tendremos la posibilidad de establecer recordatorios mediante el asistente de voz de Microsoft. Además, tal y como informan desde la compañía, también podremos pagar los productos que consumamos en Starbucks si asociamos el dispositivo a nuestra cuenta de la marca de restauración.
Como ya comentábamos al principio del artículo, esta smartband viene acompañada de Health, una plataforma que incluye un servicio en la nube para los usuarios. De esta forma, contarán con una infraestructura que permitirá combinar diferentes resultados relacionados con la salud para así obtener conclusiones consistentes.
La Microsoft Band ya está disponible en Estados Unidos por 200 dólares (unos 150 euros). Sin embargo, todavía no sabemos cuándo llegará a otros mercados, aunque no creemos que tarde mucho en cruzar sus fronteras.