Sony puso a la venta la nueva PlayStation 4 el pasado viernes, pero sólo en Estados Unidos y Canadá. La elección de un lanzamiento aislado podría haber supuesto un problema para la compañía en cuanto a ventas, pero el resultado fue excelente con la friolera de un millón de consolas vendidas en tan sólo 24 horas. El lanzamiento global se producirá el día 29 de noviembre y se espera que superen esta marca holgadamente. Ayer os contábamos el éxito inicial de Sony con su nueva consola, pero como suele suceder también ha habido espacio para las malas noticias. Muchos usuarios se han estado quejando de defectos de fábrica que impedían el correcto funcionamiento del producto. La compañía nipona ha admitido la situación y aseguran estar probando las unidades defectuosas para dar con la causa del problema lo antes posible.
Según Mashable el número de quejas ha crecido de forma exponencial a lo largo del fin de semana. El pasado sábado había unoa 370 votos negativos sobre la PS4 en Amazon, pero a día de hoy la cifra ha aumentado a 690 votos que sólo le otorgan una estrella. Sony habría decidido empezar a investigar la verdadera razón de estos fallos y afirman estar recogiendo las unidades defectuosas para analizarlas detenidamente. En un primer momento la compañía no dio demasiada importancia a las quejas, asegurando que los defectos en algunas unidades estaban dentro de lo esperado en un lanzamiento tan grande. Para evitar que la situación se convierta en un problema más serio ya han comenzado a sustituir las consolas que presentan un comportamiento extraño por unidades nuevas.
El fallo más extendido es el que no permite que la consola arranque. Al encenderla aparece una luz azul que pasados unos instantes se vuelve blanca, pero para muchos usuarios esa luz azul es todo lo que han visto de la PlayStation 4. La comunidad ya ha bautizado este problema como «la luz azul de la muerte» y parece ser la queja más extendida, aunque también hay quienes han hablado de problemas con la conectividad o sobrecalentamiento.
Por el momento se desconocen las causas del problema, pero ayer se habló de que su origen podría estar en un sabotaje de algunos empleados de Foxconn, la fábrica China donde se están ensamblando las consolas. Un grupo de becarios habría sido forzado a trabajar en la producción de la PlayStation 4 y su respuesta ante el trato recibido habría sido la alteración de ciertos componentes internos para hacer que no pueda arrancar. Los implicados publicaron el caso en un foro pero no dijeron exactamente qué componentes alteraron, por lo que no tiene porque estar relacionado directamente. Esperemos que Sony dé con la solución pronto y que el lanzamiento de la PS4 en España vaya como la seda.