La tecnología es un negocio despiadado. Una imparable carrera por innovar o morir. Una guerra sin cuartel que se libra en múltiples frentes simultáneos, y donde las alianzas unen a extraños compañeros de cama. Cualquier método vale, y en el mundo de las redes y los dispositivos móviles, la patentes son una de las armas favoritas. Quién iba a imaginar que competidores como Microsoft, Apple, Ericsson, Sony y RIM (Blackberry) podrían ponerse de acuerdo para formar el consorcio Rockstar, especializado precisamente en licenciar y vender patentes. Ahora, ese consorcio tratar de abatir en tribunales a uno de los gigantes de Internet: Google.
Todo empezaba en el año 2011, cuando Rockstar ganaba una subasta, haciéndose con una valiosa cartera de propiedad intelectual de la antigua Nortel, que había quebrado dos años antes. El precio de la adjudicación alcanzaba la impresionante cifra de 4.500 millones de dólares a favor de Rockstar. La puja de Google se quedó corta, en cien millones de dólares, una cantidad de dinero que ahora puede pasarle factura. Y es que actualmente Rockstar gestiona más de 4.000 patentes que cubren un amplia variedad de tecnologías de comunicación actualmente en uso en los segmentos residencial y empresarial, relacionadas con las telecomunicaciones y las redes.
Este mismo viernes Rockstar presentaba varias demandas en los tribunales de Estados Unidos contra Google y otras siete empresas por violación de patentes. Esas demandas pueden poner en jaque los negocios de los buscadores por Internet y de los smartphones y tabletas con sistema operativo Android. Aparte de Google, entre los demandados figuran los fabricantes Asus, Samsung, HTC, LG, Huawei, Pantech y ZTE. Los procedimientos judiciales se han iniciado en un distrito de Texas, conocido por ser amigable con este tipo de reclamaciones sobre propiedad industrial.
Rockstar sólo esgrime media docena de patentes en su demanda contra Google, todas ellas agrupadas bajo la denominación de “motor de búsqueda asociativo”. Describen “ una máquina de anuncios que proporciona publicidad a un usuario que busca la información deseada en una red de datos”. La patente más antigua de ese lote fue solicitada en 1997, un año antes de la fundación de Google, y la más nueva fue solicitada en 1007 y concedida en 2011. Los abogados de Rockstar intentar aprovecharse de que Google acudiera a la subasta de las patentes de Nortel para sostener su reclamación.
Por otro lado, las demandas contra los siete fabricantes se basan básicamente en esas misma patentes y afectan a funciones básicas en los smartphones y tabletas con Android como un centro de mensajería integrada, un filtro para el protocolo de Internet o una interfaz gráfica de usuario con una herramienta de navegación. El consorcio Rockstar justifica sus acciones en su filosofía corporativa: la innovación trabaja codo a codo con la necesidad de proteger las patentes. “Las grandes ideas y las inversiones que hay detrás de ellas merecen ser recompensadas y respetadas”.
La guerra está servida, porque está claro que los demandados van a contraatacar con pleitos cruzados, sirviéndose de sus respectivas carteras de patentes, especialmente Google, que es titular de una cuantiosa y bien nutrida propiedad industrial.
Porque aparece 1007 en el cuarto párrafo?