Microsoft lo sigue intentando con su tableta Surface, pero no le salen las cuentas. En sus resultados financieros trimestrales han tenido que meter un “ajuste de inventario” de 687 millones de euros (900 millones de dólares). Y es que las tabletas Surface RT no se venden. De entrada, el pasado fin de semana bajaron los precios de sus modelos alrededor de un 30% para salvar los muebles. Después anunciaron descuentos y regalos en el mercado de la educación. Lo han intentado todo para vaciar el almacén de tabletas antes del lanzamiento de las nuevas versiones. El resultado final es que las acciones de Microsoft han caído casi un 5% después del cierre del trimestre.
Como era de esperar, en el informe final los resultados son positivos, pero por debajo de lo esperado. Han ingresado 15.177 millones de euros (19.900 millones de dólares) cuando las estimaciones de los analistas apuntaban a 15.787 millones de euros (20.700 millones de dólares). El salvavidas de Microsoft desde hace 30 años es su sistema operativo Windows. Un programa que se incluye de serie en casi todos los ordenadores que se venden en el planeta (más del 90%). El problema es que el resto de sus negocios (Office 365, Outlook.com, Skype, Xbox) no terminan de tirar del carro, ahora que la venta de PCs pierde fuelle.
De hecho, los ingresos de la división de Windows han sido de 3.356 millones de euros (4.400 millones de dólares). Es decir, que han caído un 6%. Y es que, el crecimiento imparable de las tabletas con los iconos de Google (Android) está matando poco a poco a la gallina de los huevos de oro de Microsoft.
