Dentro de la interminable guerra de patentes que enfrenta a Apple y Samsung, la coreana acaba de conseguir una victoria. Un juzgado alemán acaba de sentenciar que los dispositivos basados en Android no infringen una patente de Apple relacionada con la tecnología de pantalla táctil. Sigue la racha de buena fortuna para la coreana, desde que el pasado 31 de agosto otro tribunal, esta vez de Tokio, dictaminara que las tabletas y smartphones de Samsung no violan el sistema de sincronización de música y vídeo con los servidores de Apple.
El caso alemán de Apple contra Samsung corresponde a un juzgado regional de Mannheim, donde el juez también acaba de resolver un asunto similar de Apple contra Motorola, que también ha resultado desfavorable para los de Cupertino. En esta ocasión, se trataba de una patente de alcance bastante amplio referente al “modelo de evento táctil”. Si Apple hubiera logrado ganar este juicio, habría significado que Samsung tendría que haber modificado una parte importante de la interfaz de usuario sobre el sistema operativo Android, que además habría requerido volver programar casi todas las aplicaciones desarrolladas para Android 2.3 en adelante.
Esa patente (la número EP2098948), cubre cualquier “vista” (desde un botón o a un elemento de un menú) que contenga puntos de datos que indicen cómo un evento táctil (cada vez que el usuario toca la pantalla) debe ser encaminado. En definitiva, afecta profundamente cómo funciona la interfaz de usuario táctil a nivel del sistema operativo Android, incluyendo los gestos multitoques.
Hasta ahora Apple no ha conseguido ganar en ningún tribunal de todo el mundo ningún caso basado en una de esas patentes amplias, que podrían causar un gran daño a la competencia, porque implicarían realizar cambios esenciales que dañarían la experiencia de los usuarios al usar smartphones y tabletas de Samsung, Motorola o HTC, entre otros fabricantes. Apple está interesada en diferenciar sus productos a toda costa (no en licenciar su tecnología), y no va a cejar en su estrategia de hacer valer sus múltiples patentes en todos los rincones del planeta. Puede ser sólo cuestión de tiempo que Apple consiga un requerimiento judicial basado en una patente amplia.
Los de Cupertino pueden acabar teniendo éxito con sus demandas de propiedad industrial, sobre todo en Estados Unidos, donde el ambiente es favorable tras haber ganado un caso a finales de agosto en California. Entonces Samsung era condenada a pagar más de 1.000 millones de dólares a Apple en concepto de indemnización por daños derivados de haber copiado seis características patentadas del iPhone y el iPad. Ese caso fue juzgado en la ciudad de San José delante de un jurado federal, y de las siete violaciones alegadas, sólo una fue desestimada. Después del fallo, se hacía público que el presidente de ese jurado tenía una patente aplicable a smartphones.