Los tiempos han cambiado y de qué manera, también por lo que a tecnologías de la información se refiere. Y es que ahora, la gran mayoría de personas con acceso a Internet lee las noticias a través de su ordenador, de su tablet o del teléfono móvil, en cualquier parte. Los periódicos en papel casi se han convertido en piezas de museo dispuestas en las barras de los bares que nos sirven para hacer tiempo mientras esperamos nuestra cita o mientras tomamos el primer café del desayuno. Sí, para bien o para mal – más bien lo primero – los tiempos están cambiando y los usos también. Los diarios de información están en la Red y se mueven constantemente para ofrecer datos al minuto, más allá de la versión digital de los periódicos, mucho más estática de lo que quisiéramos. Sí, el tiempo corre y lo que era válido hace unas semanas ya ha dejado de ser completamente vigente. Hoy te presentamos los datos de un nuevo estudio llevado a cabo por la Fundación Orange, con el objetivo de poner sobre la mesa el estado de la sociedad de la información en España.
De un tiempo a esta parte, la compra de contenidos digitales ha disminuido considerablemente, perdiendo algunos puntos desde 2009 en prácticamente todos los sectores: libros, revistas, materiales formativos; software de ordenador y actualizaciones; películas y música o juegos de ordenador y videoconsolas. Algunos se preguntarán si en detrimento de la compra de contenidos originales, la descarga de contenidos protegidos ha aumentado. Pues bien, hay que subrayar que no. La tasa de utilización de redes P2P para compartir música o películas ha decrecido de manera impactante, pasando de un 41,3% en 2007 a un 19,5% en 2011. No pasa lo mismo con los contenidos editoriales. Y es que para congratulación de medios como el nuestro, en los últimos cinco años se ha producido un crecimiento del 87% de la demanda de diarios online, esto es, de contenidos que se publican a través de Internet, que se actualizan a diario y que cuentan con una ventaja muy importante, adaptada a los tiempos actuales: la inmediatez.
De hecho, uno de los cambios más importantes de estas nuevas tecnologías de la información está en la manera como los usuarios acceden a la actualidad. En este sentido, el mismo informe revela que el 70% de propietarios de tabletas las utiliza para acceder a la prensa online. Con respecto a la música, el mercado discográfico español en digital se ha diversificado de la siguiente forma: el 35,7% es consumo vía streaming (a través de programas como Spotify); el 27,2% corresponde a las descargas por Internet; el 20,7% a las suscripciones y el 16,4% a las descargas de móvil.
Con respecto a la publicidad, la inversión de las empresas prácticamente se ha duplicado, obteniendo la magna cifra de 430 millones de euros, lo que supone un fuerte contraste con respecto a las cifras de inversión publicitaria de cinco años atrás. De esta manera, el total de Internet se sitúa en un 15,6% del total de inversión publicitaria en España, con una ligera moderación patente en los últimos tiempos debido a la crisis económica global.
En el mismo informe, además, se ofrecen datos estrictamente relacionados con la integración de las nuevas tecnologías en los hogares, con resultados bastante positivos en general, pero con ligeras diferencias – repercutidas en negativo – de España con respecto a la Unión Europa. De esta manera, el 64% de los hogares declara tener una conexión a Internet, siendo la media europea de un 73%. El 95,1% de las familias españolas tiene teléfonos móviles y el 64% los utiliza para acceder Internet. Uno de los datos más positivos es el que a firma que un 71% de los internautas accede a la Red a diario, lo que implica una familiarización mucho más patente de la que detectábamos hace apenas algunos años. El comercio electrónico, sin embargo, sigue siendo una de las asignaturas pendientes para los internautas españoles. Y es que apenas un 19% asegura haber hecho o llevar a cabo normalmente transacciones online. Por contraste, el 42% de los internautas indica que hace uso de la banca electrónica.
Lo cierto es que se experimenta un crecimiento significativo en la adquisición de smartphones o teléfonos móviles inteligentes, puesto que ahora dos de cada tres internautas lleva uno de de estos dispositivos en su bolsillo. Solo uno de cada seis, por otra parte, ya se ha apuntado a la moda de los tablets, todavía poco extendida entre la gran mayoría, pero sí presente en algunos sectores más informatizados o profesionalizados. Con respecto al sistema operativo de los smartphones, los usuarios españoles siguen el patrón global, siendo Android la plataforma más empleada, con un 40,5% del porcentaje global. Mientras tanto, el 22,4% declara estar conectado a iOS (a través de un iPhone, por supuesto) y el 11,5% a Symbian, un sistema operativo comúnmente instalado en los teléfonos de Nokia. Las plataformas minoritarias, al igual que en lo global, siguen siendo BlackBerry OS (11,3%), Windows Phone (2,9%) o Bada (1,8%).
Llama la atención, por otra parte, que el 31% de los usuarios de tabletas dedique su tiempo a ver la televisión a través de este tipo de dispositivos. Mientras tanto, el resto de usos sigue siendo bastante tradicional con respecto a estudios de años anteriores. De esta manera, podemos decir que el 71% de los usuarios se dedica a buscar información sobre bienes y servicios (a través de medios informativos, blogs o páginas de recomendaciones…), el 67% lee periódicos, diarios de información o revistas y el 57% se dedica a buscar sobre temas de salud, lo que no deja de resultarnos curioso.
En este sentido, los balances son muy parecidos a la media Europea, en la que los usuarios también coinciden en utilizar servicios relacionados con viajes o alojamientos (58%), consultar información sobre algún tema a través de la Wikipedia (58%), participar en redes sociales (52%), descargar software (31%), buscar empleo (25%), leer o enviar opiniones sobre temas políticos (21%), participar en encuestas online (10%) o acceder a redes sociales profesionales (10%).
Por otra parte, cuando se trata de acceder a Internet a través del móvil los usuarios se centran en la navegación (81,9%), en consultar el correo electrónico (80,9%), acceder a sus redes sociales de cabecera (64,1%) o disfrutar de la mensajería instantánea (61,4%), en un porcentaje muy superior a la media europea (41,2%). Estas preferencias se materializan en el ránking de aplicaciones más utilizadas, puesto que encontramos Windows Live Messenger (46,7%), Whatsapp (39,9%), Skype (32,5%) o Google Talk (19%) a la cabeza del software de mensajería instantánea más empleado. No hay que olvidar que se trata de aplicaciones gratuitas que permiten la comunicación entre usuarios que ya disponen de una conexión a Internet y que por tanto, pueden ahorrar de manera considerable, evitando el envío de los arcaicos SMS o las cada vez menos recurridas llamadas de teléfono.
